Imagen de archivo.
Un nuevo escándalo sexual ha sacudido a la industria musical. Esta vez el foco se centra en la prodigiosa banda islandesa Sigur Rós y su baterista, Orri Páll Dýrason, a quien se le ha acusado de violentar sexualmente a una mujer en la ciudad de Los Ángeles en 2013.La acusación la realizó la artista Meagan Boyd en su cuenta de Instagram, donde aseguró que había sido accedida carnalmente sin consentimiento alguno. "Estaba borracha, y lo conocí en un club (tuve un breve periodo en el que fui bailarina en un club llamado 'The body shop'), también le di un beso antes de quedarme dormida en la misma cama, después de eso quedé completamente inconsciente. Me desperté con la sensación de ser penetrada sin mi consentimiento durante un profundo sueño… pasó dos veces esa noche, y me pregunté por qué no me había ido después de la primera vez… pero estaba borracha, cansada, en estado de shock, y esto fue justo antes de que oyera algo como Uber/Lyft… Pero nada de eso debería importar porque nadie merece ser violado/tocado/lamido/follado sin CONSENTIMIENTO", relató Boyd.
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