Foto: Nicolas Poillot.
En esencia, la música es una práctica espiritual. Es, en esencia, traer el espíritu a la vida. Y por extensión de esto, la música electrónica a menudo puede ser la más pura extensión de esta idea, si partimos de la base de cómo lo hace con tan solo unos tonos, sutiles cambios en el sonido e inesperados altibajos que se unen en una misión: hacer sentir al oyente algo muy en su interior, o quizás más allá de ello.Desde el lanzamiento de su video debut "Virile" en enero de 2016, el dúo francés The Blaze se ha destacado en esta práctica. Donde antes vimos a gente como Daft Punk o Justice crear sus propios mundos altamente coloridos, The Blaze crea a partir de algo tan amorfo que solo puedo describirlo como la atmósfera de la tierra, donde luego el dúo trae aquellos elementos más puros a relucir. Tanto "Virile" como el increíble segundo video que le siguió, "Territory". se centraron firmemente en las emociones y expresiones humanas. Como dice su comunicado de prensa más reciente, el grupo tiene un deseo: "que puedas sentir".El lanzamiento del pasado martes, "Heaven" (ver arriba), se encuentra en un lugar similar a estos videos pasados, y es, como dirían los franceses, magnifique. Tal vez algún otro dúo electrónico ya haya logrado lo que The Blaze está haciendo a tan alta calidad, y estoy feliz de que me corrijan, pero su exploración de la humanidad a través del medio combinado de sonido e imagen se siente totalmente único.Al mostrar personas de todas las edades y razas que se unen, han logrado capturar la trascendencia de la música electrónica. De hecho, dado el pasado colonial de Francia y su larga historia de discriminación racial, el video representa una visión casi utópica: una en la que la música puede ser una fuerza pura y unificadora.Además de eso, trajeron a la vida algo que creo que existe en el fondo de todos nosotros, y es el espíritu de la vida misma. Tal vez suene como una mierda hippie, y de hecho lo es, pero si The Blaze fuera a comenzar una religión, entonces considérame adoctrinado y listo para orar en su altar.*Este artículo fue originalmente publicado en Noisey UK.
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