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La receta de las patatas fritas transparentes

Tardarás siglos en hacerlas pero conseguirás unas patatas perfectamente transparentes.

Hay dos tipos de gente en este mundo: los que abren una bolsa de patatas y empiezan a devorar su contenido sin siquiera reparar en lo que están comiendo y los que sacan una patata, la observan y se preguntan: ¿qué es esto? ¿A qué se parece? ¿Podría haber otra como esta? Aquellos que entréis en la primera categoría podéis estar tranquilos, sois seres humanos perfectamente normales. Sin embargo, tú que te quedas mirando fijamente a una de las patatas en busca de respuestas, estás a punto de descubrir algunas de ellas.

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En The Creators Project siempre recibimos con curiosidad las innovaciones en la comida. Nos gusta creer que los grandes proyectos no se limitan a la definición tradicional del arte y cuando vimos estas patatas fritas transparentes nos quedamos flipando porque, si lo piensas bien, no existe casi nada en este mundo que sea transparente y comestible a la vez, así que la receta que te presentamos a continuación es realmente algo nuevo.

Muy bien, pues vamos a hacer unas cuantas patatas transparentes.

Para este proyecto, necesitarás un horno precalentado a 190 grados, 8 patatas grandes, sal de alta calidad o sal Kosher, 1/2 taza de aceite de oliva, 4 tazas de agua, 4 cucharadas soperas de almidón de patata, un frasco dosificador y un Arduino. ¡Es broma! Olvídate del Arduino.

En primer lugar tendrás que lavar las patatas y hacer una raja de 1 cm de profundidad en cada una de ellas. Échales un poco de sal y aceite de oliva. No hace falta que las pruebas aún.

A continuación, coloca las patatas sobre una bandeja para horno y mételas en el horno precalentado durante 25 minutos. Tampoco hace falta que las pruebes ahora.

Pon a hervir las cuatro tazas de agua. Por el amor de Dios, no hace falta que la pruebes. Echa el agua sobre las patatas. Cúbrelas y déjalas reposar durante dos horas. Hay varias cosas que puedes hacer mientras esperas. Puedes ver dos episodios de 60 minutos de cualquier serie. Puedes ver Rounders, que dura exactamente 120 minutos. Puedes comer 14 bolsas grandes de patatas Lay’s. Puedes comer 38 botes pequeños de Pringles de sal y vinagre. O puedes comer tres bolsas y media de patatas Lay’s, nueve botes y medio de Pringels y tener aún una hora libre para odiarte, antes de darte cuenta, ¡ring! suena la alarma del horno.

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Saca las patatas y haz con ellas lo que quieras, dáselas a tu perro, estámpalas contra la pared, nos da exactamente igual lo que hagas porque no afectará al resultado de la receta.

Saca las patatas y haz con ellas lo que quieras, dáselas a tu perro, estámpalas contra la pared, nos da exactamente igual lo que hagas porque no afectará al resultado de la receta. Luego vierte el líquido restante en un cazo. Añade el almidón de patata y caliéntalo. Ve removiendo hasta que se convierta en un gel espeso. Llena el frasco dosificador con esta papilla y precalienta el horno a 57 grados. Vierte el líquido sobre una bandeja para horno y hornéalo durante 8-10 horas. Oh Dios, ¿qué harás durante  8-10 horas? ¿Dormir? Nah. ¿Hacer patatas fritas transparentes? Ya lo estás haciendo. Ponte a ver Rounders un par de veces más. Tan pronto como Edward Norton empiece a parecerse a Ben Affleck, apaga el televisor y vuelve a tus patatas. Vaya ¡dónde están! Ah sí, son transparentes, pero están ahí.

Artículo vía Instructables

@ImYourKid

Traducción de Rosa Gregori.