Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:En esto del deporte hay jerarquías guste o no. Si te llamas Kobe Bryant, tienes derecho a un asiento en el banquillo incluso cuando no has ido convocado. Esto es así. Y si alguien tiene que levantarse para dejarte sitio, pues se levanta y te deja sitio, faltaría más.En el partido entre los Lakers de Los Angeles y los Dallas Mavericks de la pasada noche, Bryant apareció mediado el primer cuarto y descubrió que no había ninguna silla disponible… así que sencillamente ordenó al rookie Larry Nance Jr. que hiciera el favor de levantarse. El pobre Larry obedeció, faltaría más.
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Ah, y eso no fue todo en el Staples Center. Al final del mismo partido, Kobe volvió a protagonizar una acción para el recuerdo. Los Lakers y los Mavericks empataban a 90 cuando quedaban apenas diez segundos de posesión: el gran Dirk Nowitzki se jugó el último balón… y anotó. Los angelinos quedaron condenados a una nueva derrota, pero Bryant, en vez de lamentarse, felicitó a la estrella alemana.When Kobe Bryant wants a seat, Kobe Bryant gets a seat. Sorry, @Larrydn22.https://t.co/593dmfDI0y
— NBA on ESPN (@ESPNNBA) 27 Gennaio 2016
Así es Kobe I el Grande, monarca eterno del reino de Los Angeles. Abrid vuestro corazón a su majestad.Los Lakers, como decíamos, perdieron por 90-92 frente a los Mavericks y se acercan peligrosamente al lamentable récord de los Philadelphia 76ers: solo han sumado 9 victorias en 47 partidos.Mavericks' Dirk Nowitzki hits game-winner in front of Lakers' bench, gets love from Kobe Bryant pic.twitter.com/NER6YoETWW
— Ben Golliver (@BenGolliver) 27 Gennaio 2016