Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:La relación de Leo Messi con los hinchas argentinos siempre ha sido complicada, aunque desde aquí parece algo inexplicable. Prueba de ello es el ataque que ha recibido la estatua que el jugador del FC Barcelona tiene en la capital del país, Buenos Aires.Algunos graciosos, el mismo día que el 10 argentino se ausentaba de los premios The Best de la FIFA —en los que quedó como segundo mejor futbolista del planeta, por detrás de Cristiano Ronaldo—, decapitaron y mutilaron la efigie del jugador. Lo curioso es el momento elegido para perpetuar el ataque, y es que Leo ni venía de un compromiso de selecciones ni de dar ningún discurso que pudiera haber ofendido a sus fans más condicionales.Cuando se retiró el pasado verano de la selección, Argentina clamó por su regreso. En apenas seis meses ya le están cortando la cabeza en las calles de la capital. Quizás no iba mal encaminado el astro, ya que sin duda todavía quedan argentinos que no le profesan demasiado amor.Las autoridades locales ya han anunciado que repararán la estatua, situada en el Paseo de la Gloria, donde se encuentran las representaciones de otros cracks agrentinos como Manu Ginóbili, Juan Manuel Fangio y Gabriela Sabatini.
La estatua de Messi, poco después de su inauguración el pasado verano. Foto de Marcos Brindicci, Reuters
Al inscribirte en la newsletter de VICE, aceptas recibir comunicaciones electrónicas de VICE que en ocasiones pueden contener publicidad o contenido patrocinado.
