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Una investigación de VICE News descubre una red de vigilancia telefónica desplegada por todo Londres

VICE News ha estado rastreando la ciudad de Londres en busca de receptores IMSI — una herramienta de vigilancia secreta que permite espiar a miles de teléfonos simultáneamente — y ha conseguido comprar uno yendo de incógnito.
Foto di Daniel Bateman/VICE News
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VICE News ha descubierto la presencia de varios capturadores IMSI (el acrónimo inglés que se traduciría por Identidad Internacional del Abonado a un Móvil) repartidos por distintos lugares de la capital del Reino Unido, tan variados como el parlamento británico, una pacífica manifestación anti austeridad y la embajada de Ecuador.

Un ex infiltrado en redes de vigilancia también ha confirmado a VICE News que el mismo sistema de captación habría sido empleado por la policía británica.

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Se trata de dispositivos portátiles y las fuerzas de seguridad trabajan con ellos a menudo. Sirven para monitorizar la actividad de miles de teléfonos al mismo tiempo, y pueden interceptar llamadas, mensajes y correos electrónico sin problema.

VICE News ha desplegado su investigación de manera encubierta y en un momento dado de la misma se nos ha ofrecido un receptor de señal telefónica IMSI por 13.000 euros. La compañía que lo publicita asegura haber vendido sus preciados artilugios a empresas privadas y a fuerzas de seguridad del estado de países de todo el mundo — como Rusia, África y Estados Unidos.

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VICE News no ha podido determinar si la señal detectada en Londres pertenecía a un aparato del estado, en parte debido a que la policía británica ha rechazado hablar de la existencia de los captadores de señal. ¿El motivo? No puede hacerlo por razones de seguridad.

Los captadores de señal IMSI operan bajo la apariencia de estaciones telefónicas que conectan a nuestros teléfonos a una red. De tal manera, todos los teléfonos que acepten entrar en determinadas redes online, estarán dejando al descubierto su IMSI y podrán ser monitorizados.

Pese a todo, la existencia de los captadores ha desatado el clamor de los activistas pro libertades civiles, puesto que, una vez activados, son capaces de detectar la señal telefónica de todos los aparatos que están en el radio del teléfono interceptado — lo cual significa que muchas de sus víctimas son personas inocentes.

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VICE News ha realizado ha trabajado durante meses conjuntamente con Privacy International, un organismo protector de la vigilancia global, para recabar así las evidencias sobre el funcionamiento de los captadores de señal.

La policía interviene en la manifestación promovida del Millón de Máscaras, una iniciativa auspiciada por Anonymous, que se celebra cada 5 de noviembre en Londres. (Imagen por Daniel Bateman/VICE News).

Los captadores de IMSI de Londres 

Los sistemas de detección de señal de Privacy International identificaron varias señales sospechosas en distintos puntos de Londres.

Una de las señales se interceptó en una manifestación contra la austeridad celebrada en la capital británica el pasado 20 de junio. La protesta convocó a un gran número de pacíficos manifestantes. El sistema de Privacy International detectó la señal de una antena telefónica en movimiento.

Se trataba de una estación base que mostraba "unas masivas diferencias de potencia de señal", en distintos momentos de la marcha, tal y como explica Richard Tynan, uno de los ingenieros que trabaja para Privacy International. Todo apunta a que un dispositivo de captación de señal estuvo activo durante la protesta y se dedicó a acceder a multitud de números de los presentes.

Otro de los lugares donde se ha detectado una actividad sospechosa ha sido en la embajada de Ecuador en Londres, proverbial residencia del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, desde agosto de 2012. En este caso, se observó la presencia de una estación base que cambiaba de proveedor de señal de manera sucesiva.

"Se supone que cada estación receptora debe permanecer configurada de manera que solo emita la identidad de su propia red", explica Tynan. "En realidad, el sello distintivo de los dispositivos IMSI es que pueden cambiar la identidad de la red a su gusto".

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Mira el documental de VICE News, Piratas telefónicos: la vigilancia secreta de Gran Bretaña (próximamente con subtítulos en español):

Igualmente, se detectó la presencia de un equipamiento de captación de señal similar en los aledaños de la catedral de St. Paul. Allí se observó la presencia de una estación receptora configurada de manera insólita, lo suficientemente enrevesada, de hecho, como para que Tynan dedujera que se trataba de una señal de captadores de IMSI. La señal estaba en su nivel más fuerte, pero no se pudieron localizar las estaciones base.

Igualmente, una señala muy poderosa fue detectada en Westminster, sobre la misma entrada del parlamento británico. La estación base debería de haber estado visible — sin embargo no se detectó la presencia de ninguna antena telefónica.

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VICE News se dirigió a la Cámara de los Comunes para preguntar si existe algún amplificador de señal conocido en la zona. Después de realizar varias pesquisas, un funcionario de prensa nos comunicó que no se tiene constancia de ninguna y nos sugirió que formuláramos nuestra petición amparados en la libertad de información. Sin embargo, la petición fue rechazada por considerarse que "muy probablemente perjudicaría a la prevención y a la detección del crimen".

Vigilancia estatal en venta

En un espacioso salón de conferencias situado al norte de París, el estado y una empresa de representantes consultan cada fila del recinto en busca de equipamiento de defensa. Individuos vestidos de punta en blanco recorren los pasillos, algunos dan pequeños tragos a sus flautas de champán. De vez en cuando se detienen para deleitarse con la factura de las armas de fuego de última generación que sostienen en sus manos.

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Estamos en Milipol: una de las ferias especializadas en seguridad más importantes del mundo. Milipol se celebró durante la tercera semana de noviembre de 2015. Se trata de uno de los pocos eventos donde la industria de la vigilancia, cuya naturaleza es extraordinariamente reservada, puede promover sus últimos hallazgos.

La llamada industria de la intervención legal crece a pasos de gigante. Se espera que sus ventas mundiales alcancen los 1.300 millones en 2019. Al menos, así lo concluye el informe elaborado por la firma de investigación Markets and Markets.

Los representantes de la firma francesa de seguridad Groupé Sécurité Service Industrie, presentaron oficialmente su flamante receptor de IMSI por primera vez en Milipol. El nuevo dispositivo fusiona la vídeo vigilancia con la vigilancia telefónica, y fue muy bien recibido durante la feria. Al menos, así lo asegura el representante de ventas de la firma, Phillipe Grison.

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El "receptor de bolsillo" cuesta 35.000 euros, es muy pequeño, y tan pronto pude ser empleado por un solo individuo, como instalarse en una caja o en un coche. El dispositivo es capaz de interceptar la señal de más de 1.000 teléfonos al mismo tiempo.

La compañía tiene "muy buenas relaciones con las empresas de seguridad del Reino Unido y con las agencias policiales", cuenta Grison.

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Según un colega de Grison, otra de sus herramientas — "una plataforma de visualización de entorno", que no consiste estrictamente en la intercepción legítima — está siendo usada por las fuerzas policiales de Birmingham, Merseyide, Thames Valley y Leicester.

"Tenemos a clientes muy buenos", alardea el comercial.

"Lo que nosotros hacemos es suministrar a las fuerzas de seguridad la tecnología necesaria para hacer su trabajo", cuenta Grison. "Su uso depende de las regulaciones al respecto de cada país".

Los manifestantes envuelven el fuego de una bengala durante la marcha del Millón de Máscaras celebrada en Londres el pasado 5 de noviembre. (Imagen por Daniel Bateman/VICE News).

"Seguridad Nacional"

VICE News ha presentado varias solicitudes de información a distintas fuerzas de seguridad del Reino Unido sobre el uso que le dan a sus receptores de IMSI, amparada en la ley de libertad de información. Sin embargo la respuesta ha sido siempre la misma — que la policía jamás confirmará o desmentirá si usa o no tecnología en aras de proteger la seguridad nacional.

Un ex veterano inspector de seguridad ha confirmado a VICE News que la policía usa tales dispositivos.

Sam Lincoln fue el inspector jefe de vigilancia en la Oficina de los Comisionadas en Vigilancia — el organismo encargado de supervisar la vigilancia en Reino Unido — entre 2006 y 2013. Según él, el uso de receptores "es una táctica habitual de la policía. Y, desde el punto de vista de su legalidad, lo cierto es que todavía no hay restricción alguna", relata. "Normalmente se emplea para localizar a fugitivos y a personas desaparecidas. Es muy útil para identificar el paradero de los sospechosos, o para activar otras partes de las operaciones de cobertura".

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Lincoln considera que es muy probable que los dispositivos en cuestión hayan sido usados durante manifestaciones. De hecho, parece que hay suficientes evidencias para asegurar que los receptores han sido empleados previamente en situaciones similares".

Conseguir una autorización de vigilancia para un dispositivo como el receptor IMSI "no es algo que requiere que te estampen un sello y nada más", añade. Hay pocos inspectores que se dediquen a revisar las peticiones. "Hemos identificado gran parte del papeleo y más de uno creería que es legalmente inválido para habilitar a nadie".

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Mercado negro 

La venta de tamaña tecnología de vigilancia a regímenes represivos o a individuos privados está regulada por un acuerdo suscrito entre 41 países al que se conoce como el acuerdo de Wassenaar. En Milipol varios exhibidores expresaron su temor ante el crecimiento de un mercado negro que parece expandirse a la misma velocidad que el suyo, y que está fagocitado por compañías tecnológicas no reguladas, en su mayoría procedentes de China y de Hong Kong.

VICE News se dirigió a una empresa que vende receptores de IMSI a través de una plataforma online. Los reporteros de VICE News se hicieron pasar por consultores de un cliente millonario y se interesaron por comprar uno de los dispositivos tras dejar bien claro que, en ningún caso, eran representantes del estado.

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Una organización llamada HK Medsourcing, con sede en Hong Kong, se aviene a vendernos el receptor de IMSI por una cifra de entre 15.000 y 20.000 dólares. Edward Tian, el comercial de la firma con el que contactamos por Skype, nos cuenta que el aparato puede "interceptar alrededor de 1.200 números por minuto".

En Gran Bretaña el uso de receptores de IMSI es ilegal, de modo que Tian se ofrece a enviar el dispositivo como si se tratara de un repetidor — un amplificador de señal — para así eludir que sea interceptado por la policía de aduanas.

"Nuestra compañía lleva años trabajando. Nos dedicamos a fabricar repetidores de telefonía móvil, ya sabes, para ampliar la señal", cuenta. "Así que exportamos nuestros receptores de IMSI como si fueran repetidores porque, como ya sabes, en muchos aspectos son prácticamente iguales. Se trata de un equipamiento de radiofrecuencia, así que nosotros lo hacemos pasar como repetidor".

VICE News insiste en que sus representantes no trabajan para las fuerzas de seguridad del estado ni trafican con receptores de IMSI. "No tenemos muy claro cuál es la ley en vuestro país, sobre qué recomendaciones ofreceros", cuenta Tian. "De manera que nos tenéis que asegurar que le daréis un uso legal. Si es así, podemos gestionar vuestra petición sin problema".

La compañía nos asegura que nunca antes han vendido material al Reino Unido. Mencionan haber cerrado negocios en Estados Unidos, Sudamérica, África, Rusia e Israel, además de con "algunos países del sudeste asiático". Según nos cuentan hace solo una semana recibieron una oferta de Bangladesh — un país en que las fuerzas de seguridad han sido acusadas de asesinatos extrajudiciales por Human Rights Watch (HRW).

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Igualmente, dicen haber vendido tecnología a empresas privadas. "Tanto a empresas comerciales como de investigación", comenta Tian. Él mismo nos asegurará por correo electrónico que su dispositivo nos permitirá interceptar también mensajes de texto. Sin embargo, al cabo de las negociaciones mostrará sus reservas sobre suministrar un artefacto que intercepte mensajes de texto a una individuo privado.

"Hay mucha gente que nos pregunta, pero ahora mismo tenemos nuestras reservas. Es algo que nos estamos planteando seriamente porque quizá algún organismo como la CIA o cualquier otro servicio secreto decida analizar nuestras operaciones. Y si eso sucede, andaremos metidos en un buen lío", explica Tian. Solo para concluir que "podemos comunicarnos a través de email".

Reino Unido 

En el Reino Unido, la supervisión de la vigilancia fue contemplada en el borrador de la ley sobre los Poderes Investigadores. Sin embargo, actualmente está tipificada de un modo que es "completamente estéril". Así lo asegura David Davis, un veterano diputado del partido Conservador.

"Yo creo que la manera en que se ha abordado la regulación de los receptores de IMSI, que, básicamente consiste en obtener bloques de información de los teléfonos de la gente, es un motivo para estar preocupado", explica Davis. "Sobretodo porque el gran público tiene asumido que la intercepción de las comunicaciones es algo que solo sucede de manera muy específica.

"La verdad es que existen agencias de inteligencia y agencias de policía en otros países con los que trabajamos conjuntamente. Ambas están lidiando con las mismas amenazas que nosotros y son mucho más abiertas al respecto", añade.

Un portavoz de Vodafone ha contado a VICE News que el gigante de la telefonía móvil acostumbra a utilizar "sistemas tecnológicos avanzados" para proteger los datos de sus clientes. Según el mismo representante, Vodafone nunca permitiría el acceso a la información de los teléfonos de sus usuarios a las autoridades, "a no ser que sea obligada legalmente a hacerlo".

"Existen restricciones y prohibiciones de todo tipo que impiden revelar cualquier aspecto de los sistemas técnicos y operativos y de los procesos empleados para cumplir con los requisitos exigidos por las autoridades. En algunos países resulta incluso ilegal reconocer la existencia de tales sistemas y procesos".

Un portavoz de la compañía telefónica O2 ha confesado a VICE News que su empresa no tiene ningún acuerdo suscrito ni con gobiernos ni con servicios secretos para el destacamento de los capturadores de IMSI.

"Nosotros tenemos vigiladas nuestras redes activamente contra distintos tipos de amenazas, interferencias y alteraciones y jamás hemos detectado la presencia de ningún equipamiento similar en nuestra red", sentencia.

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