​Erased Tapes: el matrimonio perfecto entre sonidos electrónicos y acústicos

En una entrevista que Robert Raths –genio y mente maestra detrás de Erased Tapes Records- dio para Headphone Commute hace tiempo describe el sonido de la disquera como "el balance natural entre el caos y la calma, la manera de crear caos y tener el control de él. Lo usual en lo inusual y el matrimonio perfecto entre sonidos electrónicos y acústicos". En otras palabras, lo que Raths parece querer describir es un sonido que se escucha lejano a muchas de las producciones de música electrónica de hoy en día. La pista de baile no siempre tiene que ser el objetivo y ésta es una de las disqueras que mejor representan esa afirmación.

Erased Tapes fue creada hace ocho años por el mismo Raths de aquellas atinadas palabras. Surgió (como muchos sellos de los últimos años) más bien como un colectivo de amigos virtuosos de la música electrónica que tenían una visión distinta al resto de sus camaradas y que, en conjunto, compartían una intención similar: la de brindar una experimentación particular al género, una que parecía complicada de lograr en aquellos tiempos y que, sin embargo, ha sido perfeccionada por ellos mismos hasta el día de hoy.

En efecto, Erased Tapes es una disquera que tiene un tacto mucho más sensible para la interpretación de las máquinas y que no teme a demostrarlo en cada una de sus producciones. Es música electrónica, pero con un sentido menos sintético y mucho más humano. Sonidos que emanan de un arsenal de máquinas y que, sin embargo, producen en el escucha algo mucho más que solo ganas de mover los pies. Es una disquera llena de virtudes que invita a la interpretación de las emociones de sus creadores, pero también a la imaginación del escucha. Detallista y meticuloso, Erased Tapes es el lugar perfecto en el que la música clásica interactúa con la modernidad plástica en un marco artístico casi inigualable.

La lista de proyectos que conforman el sello pudiera parecer larga, sin embargo, la cantidad de personas que habitan en él es mucho menor. Una de las virtudes de Erased Tapes es la capacidad de sus artistas para darle vida a entes distintos entre sí que comparten el mismo rostro y que, además, se conjuntan con el resto de sus compañeros para crear algo enteramente nuevo. Así, artistas como Nils Frahm, Ólafur Arnalds o Peter Broderick pueden brindar producciones en conjunto o en solitario con una facilidad que pocas veces se puede ver ahí afuera. Son pocos, pero todos con un una proliferación demasiado efectiva.

No sólo eso, sino que también están aquellos otros que han sido captados por el oído calculador de Raths a lo largo de estos años. Ahí están modestos experimentos como los de Douglas Dare, Michael Price o las alucinantes prácticas como las de Rival Consoles o Masayoshi Fujita. Son proyectos que han sido abrazados por la disquera porque comparten espíritu y dedicación. Controladores del caos, orquestadores de armonías sintéticas y finos arquitectos de atmósferas que encontraron el lugar perfecto para desarrollar cada uno de sus talentos.

Dentro del catálogo de la disquera se pueden encontrar muchas producciones que vale la pena valorar y escuchar una y otra vez. Desde la bellísima música clásica de Eulogy For Evolution de Ólafur Arnalds, hasta el panorama más luminoso de Kid Velo de Rival Consoles, pasando por el étero mundo de These Walls Of Mine de Peter Broderick, la ambientación angelical de Atomos de A Winged Victory For The Sullen o el contraste perfecto del disco debut de Kiasmos que encapsula todo el concepto del sello en un solo disco. Es una experiencia larga el explorar su discografía, pero las recompensas que trae consigo valen mucho la pena.

Como muchos otros sellos discográficos, Erased Tapes tiene varias cajas que conjuntan a sus artistas en un solo lugar. Las Erased Tapes Collection son la puerta de entrada perfecta para su universo, seis cajas que cuentan su historia en un sinfín de sonidos, atmósferas, emociones y maneras de manipular las máquinas conforme han pasado los años. Escucharlas en orden cronológico es hacer palpable el desarrollo de la disquera en estos ocho años y, además, un ejercicio que los oídos de cualquier amante de la experimentación adorarán. Se trata de un mundo del que no se quiere salir cuando se escucha con atención.

No sorprende entonces que personas como John Hopkins, Max Cooper, Lubomyr Melnyk o 65 Days Of Static estén involucradas con Erased Tapes en muchas de sus actividades como producción, asesoramiento, colaboraciones o remezclas para el colectivo. Es un auténtico conjunto de visionarios en donde convergen muchas formas de arte y, además, se cuida cualquier detalle que involucre a la música, desde su composición hasta su distribución. Un mérito que sostiene con brío la historia de una de las discografías más emotivas de los últimos años.

Hoy en día Erased Tapes continúa siendo la referencia obligada cuando se habla sobre la armonía perfecta en la música electrónica y su contraste con instrumentos clásicos y acústicos. Están a punto de editar el nuevo disco de Rival Consoles y hace tan solo unos meses hicieron lo propio con Kiasmos. Robert Raths y compañía continúan en busca de esas anomalías en la electrónica mundial para hacerlas partícipes de su cruzada: la de brindar un corazón palpable a las computadoras y hacer que se conviertan en auténticos conductores de emociones para el oído más sensible. Es todo un gusto escucharlos perfeccionar la técnica frente a nosotros.

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Joan Escutia, perdedor profesional, fundador de Tacón De Oro. Síguelo en–@JoanTDO