10 situaciones en las que los nuevos audífonos inalámbricos de Apple fijo se te perderían

Mucho se especuló de la llegada del iPhone 7, sobre todo en lo que a su sistema sonoro respecta. Después de bastantes chismes y cuchicheos entre los medios especializados en tecnología, la semana pasada se esclareció la verdad: el nuevo modelo de Apple para telefonía móvil le diría adiós a la entrada de audio que hasta la fecha conocemos. Sí, esa entradita en la que humildemente conectamos nuestros audífonos todos los días, desaparecerá para darle paso a un tipo de conexión inalámbrica que ellos llaman "lighting"

Los nuevos AirPods (como fueron bautizados por los sagaces mercadotecnistas de la compañía) cuentan con un micrófono con tecnología de cancelación de sonidos externos (para no escuchar las güevonadas que dice la gente), un chip W1 (lo que sea que eso signifique), autonomía energética de 5 horas (dura más que un polvo de un ciudadano borracho promedio), sensores de movimiento para activar funciones y otros sensores más especializados para que solo se activen al estar puestos. En fin, constituyen una auténtica proeza tecnológica.

Parece que no se les escapó nada a estos desarrolladores.

Pero tacho.

Un momento.

Esto está como raro… como que aquí, de hecho, sí hace falta algo… ¿sí o qué?

Señores de Apple, se les olvidó una sola cosita, y es que tal vez a nosotros los usuarios nos encantaría conservar nuestros nuevos audífonos por un periodo de tiempo algo mayor que el de un estornudo, sobre todo cuando estos pueden llegar a costar casi $160 dólares.

Por eso nos tomamos el trabajo de hacer este listado de situaciones en los que los nuevos auriculares de la marca de la manzanita mordida, podrían refundirse como control de televisor entre las cobijas.

Desarrolladores de Apple, tomen atenta nota.

* * *

10. Ya lo dijimos: estornudando. Basta con que el usuario sea alérgico al polvo o al polen y adiós a este articulito de lujo.​

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9. Intentándote subir al Transmi en hora pico.​

8. Mientras ves este GIF promocional.​

7. En la cartera de tu novia, que es en realidad, un hoyo negro.​

6. Volteándote a verle la cola a alguien.​

5. Cuando te das cuenta de que la que te gusta va a la misma fiesta a la que vas a ir.​

4. Cuando no estés del todo de acuerdo con alguien.​

3. Cuando te drogues (o sea todo el tiempo).​

2. Cuando te cuenten un chiste flojo y te tengas que reír por solidaridad.​