Las sindicatos de Hollywood toman medidas para acabar con el acoso en las escenas sexuales

Artículo publicado originalmente por VICE Estados Unidos.

La semana pasada, SAG-AFTRA, el sindicato de Hollywood que representa a más de 160.000 actores e intérpretes, publicó una guía para que los coordinadores de las escenas de intimidad en los sets ayuden a prevenir el abuso y el acoso. Los coordinadores de intimidad —personas cuyo trabajo es garantizar que el sexo simulado y las escenas con desnudez sean cómodas y seguras para los actores— son una adición relativamente nueva y se han utilizado (hasta ahora) para ayudar a dirigir las escenas de sexo en series como Sex Education y The Deuce.

Los sindicatos, especialmente los grandes y poderosos como el SAG, hacen que sea mucho más difícil para las personas y compañías excesivamente poderosas abusar de las personas comparativamente menos poderosas que trabajan para ellos. Los artistas externos al SAG han estado presionando a sus respectivos sindicatos para aplicar medidas que protejan a los actores contra el acoso y el abuso laboral durante años. Los sindicatos en realidad han sido una herramienta increíblemente útil para combatir el acoso en todas las industrias, con un fervor creciente después del movimiento #MeToo. Incluso en industrias sin sindicatos, como las campañas políticas, los empleados han obtenido una mejor capacitación sobre el acoso y una infraestructura de recursos humanos previamente inexistente al reconocer públicamente la falta de estas medidas como problemas estructurales.

Este nuevo conjunto de pautas de cuatro páginas del SAG es importante ya que no solo apuntala a los coordinadores de intimidad como un componente necesario para filmar escenas delicadas, sino también porque es una respuesta a un problema generalizado de la industria que le impedía desarrollar bien su trabajo a ciertas personas. Los coordinadores de intimidad, según la definición del SAG, deben servir como expertos e intermediarios que pueden ayudar a los productores a realizar la escena que desean, sin comprometer la seguridad o la comodidad de un actor. Las pautas , que son bastante sencillas, ayudarán a garantizar que el sexo simulado y las escenas de desnudez no se realicen descuidadamente o sin un reconocimiento explícito del consentimiento y los límites.

Ninguno de estos conceptos es revolucionario, pero ciertamente son valiosos y muy necesarios, como gran parte de los derechos que logran obtener los sindicatos. Idealmente, este tipo de asuntos no tendrían por qué explicarse con tinta, ya que las personas básicamente deberían tratarse bien, sin una obligación contractual de hacerlo. Pero si no podemos contar con la "decencia humana", pautas como estas hacen que el ambiente laboral sea más seguro para los trabajadores.

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