Kobe Bryant es un genio tanto dentro como fuera de la duela. Un viejo lobo de mar como él, aplaude sus triunfos pero también acepta cuando en la derrota se la dejan caer a su equipo.Última posesión del juego. Los Lakers igualan a 90 con los Mavericks y el panorama no es nada halagador para el equipo de Kobe pues Dallas no solo tiene la pelota, sino que además, está en manos de Dirk Nowitzki.Kobe da indicaciones a su defensa para que detengan al alemán que con un par de giros se quita la marca de encima, media vuelta y pa' dentro. Algo que conocemos, sabe hacer a la perfección un tipo como Dirk.Mientras, Kobe se sincera con él mismo y con los suyos, le da una nalgadita cachonda a Nowitzki mientras hace una cara de: "Sí, se rifó, nos atoró. Sí, acéptenlo, es muy bueno, y ustedes muy idiotas".Igual no sabemos si eso pensó desde la banca el mítico jugador de los Lakers, pero imaginamos que algo así le pasó por la cabeza luego que Dirk Nowitzki no solo anotó los dos puntos que acabaron por darle el juego a los Dallas Mavericks.Kobe se acostumbró a ganar, pero su grandeza le da para aceptar cuando un rival hace bien las cosas. Y si eso pasa, da nalgaditas, mueve la boca con gesto de aprobación y aplaude a sus rivales.