La Guardia Civil española detiene a un tuitero por publicar mensajes ofensivos tras el accidente de Germanwings

Es la primera detención en el marco de una amplia investigación policial. Las autoridades españolas han impulsado un plan de identificación exhaustiva de más de medio centenar de usuarios que publicaron mensajes "catalanófos" e hirientes en las redes sociales tras el accidente aéreo de Germanwings. El primer detenido es un joven de 26 años de la localidad murciana de Águilas. Los comentarios realizados por el joven en las redes sociales tienen "un marcado carácter de incitación al odio y la violencia", según afirma este comunicado de la Guardia Civil.

Mientras tanto, las fuerzas de seguridad españolas y la policía autonómica catalana siguen investigando la autoría de otros mensajes ofensivos publicados en las redes sociales. La mayor parte de estos mensajes se empezaron a propagar durante las horas después del accidente en los Alpes que provocó la muerte de 150 personas. Muchos de los mensajes que ahora se investigan se mofaban de que las víctimas del accidente fueran catalanas.

El jueves, la plataforma ciudadana Drets.cat - que hizo un llamamiento para recopilar todo tipo de "tweets" ofensivos - se personó ante la fiscalía para emprender acciones legales.

El ministro de Interior español, Jorge Fernández Díaz, calificó de "muy ofensivos" estos mensajes el mismo día de la tragedia y ordenó abrir una investigación al Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, quienes se están encargando de identificar la identidad de los perfiles o rastrear IPs.

"La única pena sobre el accidente es que se murieran pocos catalanes, pero algo es algo chavales" u "Ojalá sea un avión en el que estén todos los catalanes y se estrelle contra una roca y mueran lenta y dolorosamente", son algunos de los mensajes que se publicaron en las redes.

Los Mossos d'Esquadra, la fuerza policial catalana, también se ha sumado a la investigación y está rastreando la identidad de 17 perfiles que podrían haber incurrido en delito.

Estas actuaciones se han abierto en el marco de las acciones contra los delitos de incitación al odio que, cada vez más, proliferan en Internet. La propagación de mensajes discriminatorios o racistas - y que inciten a la violencia - está tipificada en el artículo 510 del Código Penal español, por lo que estas prácticas en la red pueden incurrir en delito.

El perfil de Twitter de la policía nacional española tildó los mensajes de "mezquinos" y "desagradables" y advirtió que habían sido remitidos a la Unidad de Investigación Telemática (UIT).

La plataforma de abogados Drets.cat, ha afirmado que ha recibido más de un millar de denuncias de usuarios de Twitter con capturas de mensajes que incitaban al odio y la discriminación. La mayoría, han dicho, son de carácter "catalanófobo".

Esta "catalanofobia" se enmarca en un contexto político algo tenso entre las relaciones gubernamentales de España y Cataluña. Una parte de los habitantes de esta región, situada en el noreste de España, aspira a la autodeterminación del territorio. En pleno año electoral para España, y con posibles elecciones catalanas en otoño, las tiranteces entre las dos partes se han acentuado en los últimos meses.

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