Los saharauis se sienten solos y piden, desde México, apoyo internacional

Han pasado 42 años de la ocupación de Marruecos al Sahara Occidental, un territorio no autónomo ubicado al norte de África, y la situación sigue siendo la misma para el pueblo saharaui: las violaciones a los derechos humanos de mujeres, hombres, niños y ancianos por parte de fuerzas marroquíes son una constante.

Lo anterior fue denunciado por el embajador de la República Árabe Saharaui Democrática en México, Ahmed Mulay Ali Hamadi, quien recordó: "Nuestras mujeres y niños fueron perseguidos con bombas de napalm (un tipo de combustible)", y hasta la fecha la resolución del conflicto de soberanía del Sáhara Occidental no se ha resuelto.

Durante una rueda de prensa realizada la semana pasada en la Ciudad de México, Mulay habló sobre la situación actual del Sahara y acusó a Francia de apoyar la invasión de Marruecos a Sahara Occidental.

"Francia es la culpable de todo lo que está ocurriendo en esta zona. […] Francia sigue siendo un país que vela por sus intereses, que tenía en tiempos del colonialismo.", señaló Ahmed Mulay.

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Según lo dicho por el diplomático, Francia representa un obstáculo en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para que la MINURSO —Misión de las Naciones Unidas en el Sáhara Occidental— desempeñe la tarea por la cual fue creada en abril de 1991: organizar un referéndum para que los saharauis elijan entre la independencia y la integración a Marruecos.

La invasión y ocupación marroquí tuvo lugar en octubre de 1975, ignorando la resolución 2625 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, aprobada en 1970, que estipula: "No se reconocerá como legal ninguna adquisición territorial derivada de la amenaza o el uso de la fuerza".

El embajador mencionó que a pesar de los intentos de detener la descolonización del territorio, la República Árabe Saharaui Democrática es actualmente reconocida por más de 80 países, incluyendo México e incluso forma parte de la Unión Africana —cuyo objetivo es unir política y económicamente a los estados de dicho continente—.

Para brindar una nueva perspectiva al conflicto, en agosto António Guterres, secretario general de la ONU, eligió como enviado para el Sahara Occidental al expresidente alemán Horst Köhler.

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A propósito del nombramiento el diplomático Ahmed Mulay comentó: "Creemos que el señor va a tener los mismos obstáculos si no hay una presión de la comunidad internacional, presión del secretario general de Naciones Unidas sobre el reino de Marruecos para que acepte negociar y acepte el derecho internacional".

Ahmed Mulay hizo un llamado a que la comunidad internacional "se involucre para que se pueda llegar a la paz, mediante el diálogo y no mediante la violencia y las guerras".

Actualmente miles de refugiados que viven en los campos del Sáhara Occidental, compuestos fundamentalmente por cinco asentamientos en El Aaiún, Awserd, Smara, Dajla y Tinduf. Según in informe de la Agencia de la ONU para los refugiados allí viven en condiciones climatológicas muy duras, con frecuentes tormentas de arena y escasez de alimentos y agua potable.

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