Una tarde con el movimiento #YoSoy132

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Una tarde con el movimiento #YoSoy132

¿En verdad son porros, acarreados o sólo un pequeño grupo de jóvenes?

Todos en el país están vueltos locos debido a las próximas elecciones presidenciales. Muchos ya no quieren el cambio que hace 12 años tanto anhelaban, otros quieren de vuelta a los que  saben gobernar y otros más, apuestan por darle una oportunidad a aquel que otra vez busca el alto mando, pero ahora de manera legítima.

Después del episodio de la Universidad Iberoamericana, en el que Enrique Peña Nieto dejó el protagonismo a los estudiantes para convertirse en el villano de la película, las redes han jugado un papel importante en todo este desmadrito pre electoral. Jóvenes de distintas universidades del país se han unido para demostrar que la juventud está inconforme y que también puede hacer ruido, moviendo de su silla a más de uno de la clase política.

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Desafortunadamente, la oligarquía mexicana olvidó algo de suma importancia: aquellos a los que hace años podían hacer pendejos, ya crecieron, leyeron, analizaron lo que ha pasado con su país y pueden votar. Encima de esto, tienen un monstruo llamado internet y no les da miedo usarlo a su favor.

Mucho se ha comentado en la televisión, la radio y los medios impresos con respecto al movimiento #YoSoy132, que desató involuntariamente, Peña Nieto. El periodismo tiene la obligación de ser veraz y objetivo, el pedo viene cuando la información manejada por los principales medios contrasta de una manera tan cabrona con la que se mueve en Twitter y Facebook. No sólo son errores (enormes) en las cifras, si no que ya caen en el cinismo de disfrazar la realidad y esto es gravísimo, porque aquellos que no tienen acceso a ciertos medios, pueden creer lo que se les muestra como real.

Para corroborar esto por nosotros mismos, nos lanzamos el miércoles pasado a acompañar a los chicos de #YoSoy132 y así darnos cuenta de qué es realmente lo que está pasando. ¿En verdad son porros, acarreados o un pequeño grupo de jóvenes? Qué gusto decir que no. Es sólo un chingo de raza unida por sus ideales, tratando de limpiar el cagadero que hay en el país.

Hace tiempo, una columna del portal de Proceso, se refirió a los jóvenes como: "…una generación que en vez de alzar su voz, de repudiar su situación, se regodean en su indiferencia.'' Pues yo no veo a esta juventud apática ni dormida, está bien despierta y bastante encabronada.

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Conoce más del movimiento #YoSoy132 en su sitio y a través de su Twitter y Facebook.

@soyalemendoza