La mamá de Giulia Bernardelli nunca le dijo que no jugara con la comida, y si lo hizo, desobedeció. La artista italiana realiza increíbles dibujos con comida y líquidos, utilizando lo que podría ser un horrible accidente el lunes por la mañana como lienzo. El café vertido sobre una mesa o mermelada untada en un pan es lo único que necesita para echar a volar su imaginación.“Cuando tomo café, pienso en las posibilidades de lo que podría crear si vuelco la taza en la mesa. En el desayuno puedo ver las pisadas de un gato que caminó sobre la mermelada” dice en entrevista con el Huffington Post Francia. Su habilidad para proyectar obras de arte totalmente espontáneas con cualquier cosa la ha hecho muy popular en Instagram, pues tiene alrededor de 75mil seguidores.
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