10 canciones arruinadas por las tiendas de ropa

Como empleada de medio tiempo en una de las tiendas de moda más grandes del mundo, he presenciado cómo algunas de las mejores canciones que la música electrónica tiene para ofrecer se han convertido en música de fondo para el shopping de regreso a clases. He visto niños vomitar en mostradores de ropa al ritmo de las dulces melodías de Kygo, he visto a chicas que podrían ser el doble de Kate Gosselin gritar obscenidades a los cajeros mientras Bob Sinclair se escucha a lo lejos, y una sesión ininterrumpida de karaoke de Daft Punk con niñas de 13 años en crop tops.

Puede que estas diez canciones simplemente hayan sido tocadas de forma exagerada o requieran de una urgente disociación con las camisetas de cuello V de 7 dólares, pero de alguna forma han grabado su nombre en lo profundo de los muros de los centros comerciales de todo el mundo. Demasiado profundo, a mi parecer.

Disclosure – "Latch"

Escena: Una pesada madre con una camada de niños señala las bocinas y le informa a su esposo que "Ellen Degeneres baila esa canción en su programa". Esperas que eso sea mentira, pero probablemente tiene razón.

Chvrches – "Mother We Share"

Escena: Te comen las ansias y logras atravesar los caóticos exhibidores con faldas florales para alcanzar una y verla. Estás en Forever 21 y una de cada tres chicas alrededor tuyo está usando una corona de flores. Algunas de estas chicas y sus amigas cantan esta canción y están de acuerdo en que "les gusta más este remix". Sacan su credencial de estudiante para obtener un 15 porciento de descuento en un suéter con un print azteca.

Cyril Hahn – "Say My Name"

Escena: Ocurre un choque con cuatro carriolas saliendo de un elevador. Nadie le ve el chiste. Uno de los padres  murmura furioso algo acerca de "largarse de ahí" y comienza a buscar un empleado. Usas tu mano para cubrir tu gafete.

Banks – "Warm Water (Snakehips Remix):

Escena: Piensas, Qué chido que estén tocando esto aquí. A tu derecha, una mujer le entrega a su nefasto novio una pila de "vestidos para salir" para que los cargue mientras sujeta su app de Shazam contra la bocina. Mentalmente retiras lo dicho.

Kaskade feat. Dragonette – "Fire In Your New Shoes"

Escena: Esta es la sesión de karaoke de las niñas de 13 años en crop tops. Digo por tercera vez en el día: No me pagan lo suficiente para trabajar aquí. (Me escucha mi gerente).

Miami Horror – "Sometimes"

Escena: Navegas a través frascos y chácharas modernas con sobreprecio en Urban Outfitters mientras esto suena. La combinación simultáneamente te da un falso sentido de frescura y la urgencia de tomar un baño.

DJ Snake x Yellow Claw x Spanker – "Slow Down"

Escena: Ahí está esa camiseta Hypebeast copia que te tienes que probar. Mirándote al espejo, sientes cómo te queda, sientes el precio con descuento y sientes la canción que está sonando. Mientras te vas, ves a dos turistas vomitando símbolos de amor y paz mientras se toman una selfie en el espejo. En la misma camiseta. No compras la camiseta.

Flux Pavilion – "I Can't Stop"

Escena: No puedes parar. No puedes dejar de procesar a los clientes a través de la fila de cobro. Cuanto más rápido crece, más rápido metes jeans de tiro alto en bolsas biodegradables. Eres una máquina. Eres un robot. Conquistas el consumismo del siglo 21. Y luego se avería la terminal.

Goldroom – "Fifteen"

Escena: Piensas, Claro que esto suena aquí, porque todos aquí tienen quince años o tratan de actuar como si tuvieran quince años. 

Calvin Harris – "Feel So Close"

Escena: Tu compañero de trabajo empieza a cambiar la letra de la canción mientras mueven a las hordas de clientes desordenados al cierre del centro comercial. "Me siento muy cerca de renunciar a este trabajo/es un campo de fuerza". No se supone que sea una broma. Tu crees que es más que una broma.

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