Estamos llegando al punto de no retorno en las reservas pesqueras

Será mejor que todos los amantes de los mariscos empiecen a acumular tanto katsuobushi (alimento hecho a base de atún), surströmming (arenque enlatado) y latas de atún como sea posible, porque parece que las reservas de pescado del planeta pronto llegarán a un punto crítico.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, regularmente llamada FAO, acaba de publicar su informe bienal State of World Fisheries and Aquaculture (Estado de la Pesca y Acuicultura Mundial) y los descubrimientos son perturbadores, por decir lo menos. Según el informe de la organización, estamos extremadamente cerca de alcanzar el límite sustentable de la producción mundial de pescado. De hecho, aproximadamente el 90 por ciento de la población mundial de peces está afectado por la sobrepesca, con un aumento pronosticado del 17 por ciento para 2025.

La realidad es que el consumo de pescado ha aumentado sin control hasta el punto de que el individuo promedio come una cantidad asombrosa de 20 kilos de pescado al año. La sobreexplotación del suministro mundial se ha triplicado desde la década de los 70: cerca del 40 por ciento de todo el atún y otros pescados altamente solicitados son capturados de manera insostenible.

El director de la ONU de Fisheries and Aquaculture Policy and Resources Division (División de Recursos y Política de Pesca y Acuicultura), Manuel Barange, explicó al periódico británico The Guardian que los mares Mediterráneo y Negro eran "particularmente alarmantes", con tazas de sobrepesca de alrededor de 60 por ciento cada uno.

"Existe un límite absoluto acerca de lo que podemos extraer del mar y posiblemente está cerca de los niveles de producción actuales, que se han estabilizado. Han crecido un poco en años recientes, pero no esperamos que haya más crecimiento debido al impacto del aumento generalizado de la producción acuícola".

El incremento repentino del consumo de pescado se debe probablemente al aumento de la popularidad de la acuicultura. José Graziano da Silva, el director de la FAO, dice que la acuicultura es actualmente la fuente del 50 por ciento de todo el pescado consumido. Aún más sorprendente, se prevé que el cultivo de peces supere la pesca de peces salvajes por primera vez en la historia como la principal fuente de pescado para consumo humano en 2021. China se ha convertido en un defensor importante de la acuicultura y actualmente cuenta con el 60 por ciento de todo el pez de granja del mundo.

"Mi opinión personal es que es trascendental haber alcanzado este nivel de producción", Barange le dijo a The Guardian. "En la batalla para asegurar suficiente comida para alimentar a más de 9 mil millones de personas en 2050, cualquier fuente de nutrientes y micronutrientes es bienvenida".

A pesar del aumento reconocible de las granjas de peces, el informe descubrió que "el estado del pescado marino del mundo no ha mejorado". Según Graziano da Silva, la pesca ilegal representa actualmente con 26 millones de toneladas al año, casi el 15 por ciento de la producción de pesca mundial marina y terrestre.

Los recientes pasos agigantados en la acuicultura realmente son buenas noticias para países en desarrollo —73 por ciento de los países consumidores de pescado están en la categoría "bajos ingresos, déficit de comida" de la ONU— pero algunos grupos de conservación sienten que esta técnica no solo promueve la introducción de especies invasivas, sino que también conlleva el riesgo de contaminar los hábitats naturales cercanos. Otros simplemente sienten que el enfoque en las granjas está mal orientado y debería ser canalizado hacia otra cosa. Lasse Gustavsson, director del grupo de conservación marina Oceana, cree que el manejo de la pesca sostenible debería ser prioritario en vez de la acuicultura.

"Actualmente, la población de peces en niveles alarmantes ha aumentado una quinta parte respecto a 2000", explica Gustavsson. "El impacto ambiental de la sobrepesca es incalculable y devastador para las economías costeras, es simplemente demasiado para que esta situación siga escondiéndose".

No importa de qué lado estés, es evidente que todos estamos en un serio problema si los patrones de consumo y las prácticas pesqueras siguen en descontrol. En tiempos inestables como estos, podría parecer que no hay mucho qué hacer.