Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:El FC Barcelona y el RCD Espanyol se enfrentaron el pasado miércoles, día de Reyes, en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey… y más que regalos, los dos equipos merecieron un buen vagón de carbón. El partido que dejaron fue bronco, plagado de acciones antideportivas; el Espanyol jugó sus cartas y planteó un encuentro duro y el Barça no supo mantener el temple.Afortunadamente, también hubo algo de fútbol entre tanto barro. El Espanyol se adelantó a los nueve minutos de partido tras un error de Dani Alves mediante un gol de Felipe Caicedo; Leo Messi empató pocos minutos después a pase de Andrés Iniesta. Lo más destacado del partido, sin embargo, fue el golazo de falta que anotó el argentino para poner el 2-1 en el marcador.
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En el segundo tiempo, el partido se desmadró. Gerard Piqué marcó de nuevo para los barcelonistas… y todo se fue al garete. El Espanyol acabó con nueve hombres tras un río de tarjetas y amonestaciones; Pau López, el portero perico, protagonizó esta feísima acción…
…y luego el árbitro reflejó en el acta que Luis Suárez, que durante el partido ya se las había tenido tiesas con medio equipo del Espanyol, la había liado pardísima en el túnel de vestuarios:El más cuerdo fue Luis Enrique, que intentó quitar hierro al asunto en la sala de prensa. Un periodista preguntó por los líos tras el partido y el técnico asturiano respondió lo siguiente:Video: Espanyol goalkeeper stepping on Messi's leg #fcblive [via @barcabboy] pic.twitter.com/8ceyxeoUYh
— barcastuff (@barcastuff) 7 Gennaio 2016
Al menos mantuvo el sentido del humor.Lo del túnel de vestuarios eran villancicos