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Por qué 'Buffy, la cazavampiros' fue el mejor programa de los años noventa

En su aniversario número 20, hicimos un pequeño homenaje a sus referencias feministas, el amor lésbico entre dos brujas y los tipos más guapos del show.

Han pasado veinte años desde que salió al aire el primer episodio de Buffy, la cazavampiros y, sin embargo, parece que fue apenas ayer que paseábamos por el cementerio con Buffy, Willow, Xander y la pandilla… y el tierno Giles al fondo, pronunciando encantamientos. Estuvimos ahí en las buenas y en las malas, cuando Willow se fue al lado oscuro y Spike se volvió bueno. Estuvimos ahí incluso en Angel, el spin-off, que fue una mierda. Aún así, seguimos siendo fieles. Pero llegó el día en el que la Boca del Infierno finalmente se abrió y devoró toda Sunnydale y Buffy pudo, por fin, llevar una vida normal, dejándonos a nosotros volver a las nuestras. Fue horrible, pero logramos superarlo. El tiempo sana y ahora solo tenemos gratos recuerdos. Tan gratos que, de hecho, decidimos compartir un par con ustedes, queridos lectores, para conmemorar el aniversario número 20 del programa que cambió nuestras vidas.

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Manes deliciosos
Qué delicia. Te gusten los monos o los pelinegros, los vivos o los muertos vivientes, cuando se trata de actores masculinos, Buffy, la cazavampiros tenía material para todos los gustos. Elige a Angelus o Angel si te gustan las criaturas nocturnas que no han sido malditos con un alma. Alto, oscuro, guapo, y parece envejecer bastante bien. Para las que no son de acostarse con un tipo después de la primera cita, Angel es el propio. De hecho, mejor nunca duermas con él (tiene una tendencia a volverse malo después de eyacular, y no de la manera no-te-vuelvo-a-llamar, sino tratando de comerte).

Después está Spike, el chico malo mono con una afición por el cuero. Le gustan las caminatas largas en la noche, matar cazadores y tomar sangre humana. ¿No te gusta el abrazo tierno y dientón de los muertos vivientes? Siempre estará el adorable perdedor Xander o el entrañable emo Oz. Mitad músico, mitad hombre lobo. No puede ser mejor. Aunque para las que prefieren más a los ñoños, está el bibliotecario de día, Observador de noche Giles, todo un canosito sabroso. Probablemente porque era la única persona que envejecía en la serie. Y también estaba Riley. El dulce y sensible soldado Riley, el novio rico de Buffy que era bueno con las pistolas y se veía increíble en ropa camuflada. Tú eliges.

El estilo de Buffy
Los noventa llamaron: quieren su clóset de vuelta. Desde los tipos cool de Tumblr con collares de tatuaje hasta los sombreritos Supreme de los skaters, las tendencias de los noventa siguen pegando todavía. Así que basta con mirar Buffy para inspirarte. Desde el momento que la conocimos, fue amor a primera prenda. Ahí estaba, una total desadaptada, parada en las escaleras del Sunnydale High School en un top blanco con tiritas y un cardigan de mangas cortas, con una minifalda café que combinaba con sus botas hasta la rodilla, y un solo clip blanco en el pelo. Linda, pero de una manera muy "mato vampiros" que ha sido subestimada. Más adelante en las temporadas, Buffy cambió sus minifaldas por un look más grunge con leñadoras y overoles. Después vino la fase cuero. Pantalones rojos apretados y un esqueleto blanco. Después vino su outfit de fiesta: el vestido rojo de tiras que usó con el pelo recogido, una tiara roja y un rifle. Incluso su último look fue perfecto. Mientras la Boca del Infierno se tragaba todo Sunnydale, Buffy se mantuvo chic con un par de jeans anchos, un top blanco y una chaqueta de ante. Todo combinado con un poquito de sangre y una guadaña antigua en la mano. Eso fue icónico.

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Romance lésbico
Tanto como Buffy y Angel, Angel y Darla y, extrañamente, Buffy y Spike, la relación entre Willow y Tara pasará a la historia como uno de los romances más increíbles de todos los tiempos. Maldita, sí, pero increíble. De hecho, hizo historia por ser la primera representación televisiva de una pareja homosexual en el prime time de los Estados Unidos. Fue algo hermoso de ver: dos mujeres tímidas que aman la brujería reuniéndose para mandar dulces, dulces hechizos. Tiernas, amigables y básicamente un poco laxas en lo que se refiere a su moral, Tara y Willow la tuvieron difícil cuando Willow empezó a meterse más en la magia. Tara, al verla descender en su adicción, la dejó. Naturalmente, se reconciliaron, pero solo para que a Tara le dieran un tiro en el corazón por el geek maligno y líder de El Trío, Warren. Se muere trágicamente en los brazos de Willow, haciendo que una vengativa Willow despedace a Warren. Muy romántico.

El musical
Si la vida fuera un gran musical en el que se revelan nuestros sentimientos más ocultos a través de una canción alegre, ¿el mundo no sería mejor? Claro que no. Pero ese no fue el caso de Once More, with Feeling, recordada con amor en los círculos de Buffy, cuando un demonio azul que baila tap en traje en el capítulo 7 de la temporada 6 lanzó un hechizo al grupo, haciendo que cantaran cada vez que querían expresar sus verdaderos sentimientos. ¿Por qué? No me acuerdo bien pero parecería que compartirlos en exceso llevaría a su muerte. Una lección que deberíamos aprender, especialmente con las bebidas de viernes por la noche después de la oficina. Desde el rocanrol de Spike en Rest in Piece hasta la rendición descorazonada de Buffy en Something to Sing About, este es posiblemente el mejor episodio de todos los tiempos.

Feminismo
Según Alison Bechdel en Wikipedia, el Test Bechdel pregunta si en una pieza de ficción protagonizada por dos mujeres o niñas, ellas hablan de algo más que de un hombre o un niño. ¿Cuenta si están hablando de un demonio? Mentira. Pero bueno, antes de su tiempo, Buffy, la cazavampiros era un programa sobre una joven con poderes sobrehumanos con los que vencía brutalmente a demonios masculino. Era la puta ama. No tenía miedo de cara al peligro, incluso asesinó al amor de su vida para salvar el mundo. De hecho, todas las mujeres de la serie son poderosas: Faith, Kendra, Anya y el resto de los Potenciales Cazadores del mundo (todas mujeres, todas fuertes bajo el cuidado de Buffy). Bueno, Dawn era una imbécil pero ni siquiera era una persona real. El mejor personaje era Anya, una antigua demonio que se negó a soportar la mierda de nadie. Ella odiaba a las conejitas y pensaba que Martha Stewart era, en secreto, una bruja. "Nadie podría hacer tantos recortes y maricadas sin invocar los poderes de la oscuridad". ¿Qué más queremos de un programa de televisión?

Este artículo fue publicado originalmente en i-D, nuestra plataforma de moda.