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Cultură

Un recorrido por Christiania

Christiania es la infame comunidad de paracaidistas de Copenhague.

Christiania es la infame comunidad de paracaidistas de Copenhague. Me la describieron como un pueblo mágico en el que venden cannabis a plena luz del día en las calles, y a los chicos guapos y afeminados les gusta verte fumar un porro para inhalar tus exhalaciones pachecas. Así que cuando fui a Dinamarca tuve que visitar el lugar. Como yo también soy una colgada, siento una extraña afinidad con los paracaidistas del mundo, así que quería estar cerca de mi gente.

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El pueblo libre de Christiania es un estado, de unas 850 personas y 85 hectáreas, autoproclamado independiente. Fue fundado en 1971 por un grupo de hippies, anarquistas e idealistas, tras ocupar un cuartel militar abandonado en Copenhague. Una de las ventajas de las leyes especiales en el pueblo es que se puede vender cannabis legalmente. Las autoridades toleraron esto durante 30 años, pero desde 2004 ha habido esfuerzos constantes por regular el estatus legal de la comunidad.

La venta de cannabis ocurre principalmente en la calle del empujón o Pusher Street (es en serio). Me tuve que robar esta foto de internet porque cada que sacaba mi cámara cerca de la mercancía, todos a mi alrededor me echaban unas miradas intimidatorias de "No fotografías", y me gruñían con sus dientes sucios.

Aunque hay mucha mariguana, el pueblo adoptó una política de "cero drogas duras" en 1979, la cual sigue vigente.

Muchas de las casas en Christiania fueron construidas por los propios habitantes. Algunas no cumplen con las normas de salud y seguridad, y carecen de cosas como agua y electricidad, pero no importa. Esta es una razón más por la cual el gobierno quiere poner fin a este paraíso para hippies/perdedores.

Me imagino que esta extraña casa espacial fue idea de alguien demasiado drogado, que sin embargo logró construirla.

Me gustaría vivir aquí.

Para salir de Christiania tienes que pasar bajo este letrero que dice: “Usted está entrando a la UE”. Me pareció un lindo detalle.

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Más tarde fuimos a un lugar llamado Spunk Bar en Copenhague. Al parecer "spunk" (semen en el Reino Unido) en danés quiere decir dulces, sin embargo el nombre me pareció muy chistoso. Al parecer sigo siendo muy inmadura.

Adentro hicimos algunos amigos de la zona. No eran exactamente los niños afeminados que estaba buscando, pero me gustó su estilo. Básicamente así se visten todos los chicos cool de Copenhague.

No sé si hay más heroína en Copenhague que en otras grandes ciudades, pero definitivamente no está tan escondido. Mientras caminaba por las zonas más obscuras de la ciudad me topé con al menos tres personas fumando a la mitad de la calle, a plena vista. Tomé esta foto afuera del Spunk Bar. Qué rico.

Esto fue a unos pasos de distancia. Tantas drogas duras y violencia me hicieron desear estar de regreso en Christiania, rodeada de paz y amor.