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Sexo

Historias extrañas de gente que se encontró a su ex

"¿De verdad me había encontrado a mi ex la primera vez que probé ácidos en una ciudad donde ninguno de los dos vivía?"

Vivo en constante miedo de encontrarme a personas con las que salí en el pasado. A veces pienso qué haría si me encontrara al peor ex que he tenido: probablemente evitaría mirarlo a los ojos, me escondería en el baño más cercano, tendría un ataque de pánico, y tomaría un taxi a casa lo más pronto posible.

Es una decepción que, sin importar en cuantas redes sociales hayas borrado a un ex, jamás podrás hacerlo en la vida real (con la excepción de una orden de restricción). Por eso, preferimos preguntarle a algunas personas sobre cómo reaccionaron cuando el destino decidió arruinarles el día topándose a un ex.

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Aleksandra, 24

Algo de contexto: Salí con un chico dos años, y durante ese tiempo se hizo el mejor amigo de una chava. Yo sabía que eran más que eso, y por eso ella fue un gran catalizador para que termináramos. Un año después comenzaron a salir. Un frío día de septiembre, me encontraba caminando al trabajo cuando vi a mi ex y a esa perra arriba de sus bicicletas justo frente a mí. Mi ex se detuvo y ella se aventó hacia los matorrales con todo y su bici, sólo para verla salir de su escondite a siete metros de donde estábamos parados. Mi ex me hizo la plática, y ella se quedó parada como una tonta. ¡Ni siquiera me pudo ver a los ojos! Tuve una plática incómoda e intenté salirme de la situación lo más rápido posible. Debí reclamarle. Me arrepiento de no haberlo hecho.

Xavier*, 27

Rompimos después de una relación de un año. Creí que la ruptura había sido bastante relajada, pero me dejó de hablar varios meses. Ella quería que sus amigas recogieran sus patines que había dejado en mi casa; no lo podía hacer por sí sola. Después empezó a trabajar en la misma compañía que yo y en el mismo edificio. Para esas alturas habían pasado meses desde que nos vimos. Un día se presentó a la oficina; me habían advertido pero no creí. Me la encontré dos o tres veces, y también en una fiesta navideña de la compañía.

La primera vez que la vi cerca de donde yo vivía, se me olvidaron mis llaves. De regreso a casa, la vi en la calle. Me dijo, "Mi novio vive en ese edificio". Fue muy cagado porque yo también vivía ahí. Intenté convencerla de ir a tomar un café, porque trabajamos en el mismo lugar y su novio vive en mi edificio. Intenté que las cosas fueran menos incómodas. Me dijo que a su novio no le agradaría mucho.

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En una ocasión la vi en el elevador. Yo estaba con una chava que se había quedado en mi depa. Le estaba contando una historia, entonces las puertas se abrieron, y mi ex y su novio estaban ahí. De la nada, mi ex empezó a contar chistes de diarrea mientras yo seguía contando mi historia. Había una o dos personas más en el elevador. Desde entonces la he visto varios veces en el mismo lugar. Su novio ni siquiera me ve, creo que no sabe quién soy. No creo que ella le haya explicado jamás que su exnovio vive en el mismo edificio.

Corinne, 23

Llevaba meses saliendo con un chico, las cosas iban bien hasta que hicimos planes una noche. Quince minutos antes de vernos, me mandó un mensaje de texto para decirme que iba a salir con sus amigos. Le dije que borrara mi teléfono, y en mi ira, salí y me cogí a un chavo que vive exactamente cruzando el condominio de mi ex. A la mañana siguiente estaba comprando un café con este chico que me presentó mi ex. Iba a pagar la cuenta cuando vi entrar a mi ex; fue el momento más horroroso de mi vida. Se dio la media vuelta y, literalmente, salió corriendo de la cafetería.

Kaylin, 27

Vivir en un pueblito es complicado cuando se trata de evadir a tu ex. El mío también trabaja en el mismo lugar que mi mejor amiga, donde ella tuvo la inauguración de su primera galería de arte en agosto.

No me iba a perder la fiesta de inauguración, así que pasé todo el día haciendo comida para llevar, me fui a casa, fumé un poco, y me fue al show. Vale la pena destacar que mi ex nunca le cayó bien a ninguno de mis amigos, y por lo mismo estuvo solo la mayoría del tiempo en la fiesta, aunque tampoco había mucha gente. Por lo general, no bebo, pero ese día me sentía emocionada y me tomé dos botellas y media de vino. Mi ex me siguió un rato por todos lados para hacerme la plática, pero me pasé la noche pidiéndole que me sirviera vino, porque, al final del día, no quería lidiar con él estando sobria.

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A la mitad de la inauguración, invité a un par de amigos más para echar desmadre. Entonces, empecé a hacer muchas tonterías. Soy torpe por naturaleza, así que en realidad no necesito estar borracha para tirar cosas o tropezarme; fue justo lo que hice. Tiré dos copas de vino, me tropecé con ambos pies y, en algún punto, casi me caigo encima de él. Fue muy bueno para actuar como sin nada hubiera pasado, pero se la pasó detrás de mí y me provocó mucha ansiedad durante dos horas.

Tammy*, 23

En aquel entonces, vivía con mi ex en la misma ciudad. Fui de visita un fin de semana a la ciudad en la que solía vivir. Fue la primera vez que probé ácidos. Mis amigas me dijeron que querían ir a un bar, y yo acepté. Creí que sería divertido bailar mientras observaba las luces; esperaba pasarla chido. Entonces, lo vi de reojo y me detuve inmediatamente. Estaba ahí, con todos nuestros amigos en común, y se la estaban pasando muy bien. ¿De verdad me había encontrado a mi ex la primera vez que probé ácidos en una ciudad donde ninguno de los dos vivía?

Creo que se incomodó, pero resultó mejor de lo esperado. Estábamos en el mismo círculo de personas, parados afuera del bar, sin hacer contacto visual y sin dirigirnos la palabra. "Sólo quiero pasarla bien esta noche", pensé, "quiero ignorar a este pendejo que me jodió la vida". Entonces entré, me puse a bailar, y lo vi. Bailó un poco y después se fue con sus amigos. Pensé, "¡Qué chido!" Me quedé un rato más, y después me fui caminando al lugar donde me estaba quedando. En el camino pasé por los lugares donde habíamos tenido los mejores momentos juntos. Vi que un chico estaba bailando al sonido de su bocina portátil, comencé a bailar con él, y mi experiencia fue aún más divertida.

Las entrevistas fueron editadas para esta nota.

*Los nombres cambiaron por razones de anonimato.