Preparar la ropa que te pondrás al día siguiente desde la noche anterior, dejar tus tennis para correr al lado de la cama para recordarte que tienes 6.8 km por delante, esconder tu despertador en la repisa más alta del clóset… Nada de eso servirá. Nada cambiará: levantarse temprano es y siempre será una mierda total.Por supuesto, también están esas personas que literalmente saltan de la cama cuando suena por primera vez su única alarma (no sabemos ustedes, pero nosotras tenemos que poner más de dos alarmas cada mañana), salen a la calle en sus mejores leggins deportivos antes de que salga el sol, toman la clase de Pilates antes de que cante un gallo, y probablemente son androides y, por lo tanto, seres en los que no se puede confiar.
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Por suerte para nosotros, las personas normales que amamos para dormir, el chef Pablo Salas, del restaurante Amaranta (en Toluca, México) tiene una fórmula infalible para hacernos dejar el edredón tibio y suave en la mañana —y nada de irse a acostar temprano—: su receta de huevos choriceros, o estrellados con salsa de chorizo con chile manzano y queso panela.
Son muy fáciles y rápidos de hacer. Y créenos: su sabor es una absoluta gloria. Te garantizamos que una vez que los pruebes, querrás levantarte temprano todos los días para cocinártelos antes de lidiar con la vida.El botón de "snooze" de tu alarma tendrá su merecido descanso. Y tú, por fin, serás una "morning person". ¡Felicidades!RECETA: Huevos choriceros.