El food porn de la semana: comida para curar la resaca

Después de enterarnos de que los huevos (ilegales) de tortuga son asquerosos, que las hamburguesas de chapulín son deliciosas, que los montados de Chihuahua son el amor hecho burrito, y que los mejores tamales defeños están en Milpa Alta, llegamos al fin de semana. ¡Uf! ¡Y en qué estado!

Bienvenidos a nuestra entrega semanal de El food porn de la semana, la guía MUNCHIES para disfrutar de las fotos más antojables de Instagram publicadas en los últimos siete días.

Esta vez nos encontramos con muchos platillos que, además de lucir sabrosos (algunos incluso bonitos), tienen en común el superpoder de curar, o al menos disminuir los malestares de, la cruda —resaca, pues—. Sabemos que las fiestas de fin de año no tardan en comenzar y necesitamos estar preparados porque, sospechamos, la cruda será "la amiga que se queda en la casa durante la temporada".

Y, si hoy estás crudo, lo que es muy probable, date un taquito de ojo y, cuando ya no puedas babear más, haz el esfuerzo, sal de la cama y ve a conseguir alguno de estos platillos, que seguramente encontrarás en el mercado o tianguis más cercano.

¡Disfruta!

Catalina (@catalina_c_t) es el nuevo restaurante en el barrio de la Roma, en la Ciudad de México. Es una brasserie con cocina muy cómoda, este carpaccio de pescado lo comprueba. Si se te antojan las cosas frescas cuando estás crudo, ésta es tu mejor opción. Foto de @petitehedoniste.

Los Tacos Fitos son famosos en Tijuana. Quizás porque el puesto, callejero por supuesto, es atendido por el taquero más rápido del mundo (ok, quizás exageramos, pero es muy bueno) o tal vez porque la birria de res que preparan es simplemente maravillosa. Suavecita, que se deshace en cada mordida, levemente picosita y cálida: justo lo que el estómago de un crudo necesita. Foto de @lifeandfood.

La comida para crudos se puede dividir en dos: la fresca y la calientita. Dependiendo del estado de destrucción, y quizás de la personalidad del crudo, es que el antojo va y viene entre el mar y la tierra. Así esta selección. Esta foto es de @lauramanzo, quien recientemente disfrutó de los exquisitos ostiones en el restaurante Rosetta, de Elena Reygadas en la Ciudad de México. Foto de @yummmie_app.

¡Pollitos rostizados! Un clásico de la cocina francesa, pero también típico de la comida callejera en México. Afuera de las estaciones del Metro (subway), en los paraderos de camiones, a un lado de las panaderías, es donde regularmente encontramos rosticerías, cuya publicidad, como bien apunta @mexicanfoodporn, es la más efectiva: mostrar la mercancía, jugosa, grasosa, dorándose lentamente al calor del fuego. #nomnomnom.

Este coctelito de camarones frescos con jitomate, cebolla, chile verde, aguacate y salsa de tomate (cátsup, pues) no se ganó su nombre en una rifa, se lo ganó a pulso, regresando a la vida a innumerables crudos buscando una razón (sólo una) para seguir viviendo. El Vuelve a la vida es esa razón. Foto de @cmexicana.

Al parecer los colombianos también saben cómo curarse la cruda (quizás lo aprendieron de nosotros los mexicanos). Estos son tostones (plátano frito) y chicharrones (piel de cerdo frita). Según la foto de @danielgreve se pueden comer con limón en una especie de botana, aunque imaginamos que si le ponemos una tortilla, salsa y aguacate, quedará el mejor taco anti-cruda de la historia.

Si el Vuelve a la vida no te convence, trata con este coctelito mazatleco (de Mazatlán, México), con callo de hacha, caracol, pulpo, camarones crudos, pepino, cebolla y caldo de camarón caliente. Es un coctelito tibio, igual te cae mejor que algo muy frío. Foto de @agourmet.

No necesita mucha explicación. Es fácil: haz una fogata en el patio de tu casa, cuelga un par de lechones, deja que se cuezan lentamente mientras su grasa aviva el fuego, su carne se suaviza y su piel se hace cada vez más crujiente. Luego come su deliciosa carne en tacos. Si estás en el Valle de Guadalupe (Ensenada, México), date unos vinos (para que la cruda no pegue) y disfruta del paradisiaco paisaje que hay en este hermoso rincón mexicano. ¡Nada mejor para acabar con el malestar de la resaca! Foto de @cmexicana.

Con esta belleza terminamos por hoy, porque nada más antojable —y primitivo— que dos cerditos dando vueltas sobre el fuego.