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Fasenuova III: Aullidos Metálicos

Rock que no es rock, electrónica para la pista y para el espacio exterior, invocaciones entre óxido y hormigón, paganismo post-industrial y bailes desenfrenados. Entrevistamos a Fasenuova.

Fasenuova con Oscar Mulero. Foto vía

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Rock que no es rock, electrónica para la pista y para el espacio exterior, invocaciones entre óxido y hormigón, paganismo post-industrial y bailes desenfrenados: con Aullidos Metálicos (Humo, 2016), Fasenuova se apoyan en Oscar Mulero y encaran una remodelación sonora que les ayuda a continuar con su proceso de exploración. Con todos ustedes el mejor grupo de la galaxia.

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NOISEY: Explicáis que el disco está planteado de manera global, como si fuera uno de vuestros conciertos, y lo cierto es que al escucharlo se puede apreciar un cambio en la dinámica de y entre las canciones. Al escuchar pasajes como el 'respiro' al final de 'Hell Angel' o 'Naves Desiertas' se tiene la vaga sensación de que podríais estar ejecutando la banda sonora de alguna película ¿Hay algo de esto? ¿Cuál sería la película ideal para ser musicada por Fasenuova?.

Ernesto: Construimos imágenes con la música, también decimos invocaciones en vez de canciones, en directo se nota más el aspecto este de la invocación. En las grabaciones queremos que la música sea el espacio, sólido, las paredes, el techo, un pasillo largo, un paisaje brillante, artificial como ellas mismas son, muchas veces, el cine tiene mucho de todo eso, y las músicas experimentales tienen mucho del trayecto de "Stalker" en aquél vagón desnudo, aquél artilugio en pos de la zona, igual es que muchas bandas sonoras electrónicas hacen de fondo en tanto cine bueno, y eso nos habrá influido también, el mismo Artemiev, por ejemplo. El cine nos gusta mucho. La literatura marca al igual profundamente nuestra música, incluso en esos pasajes, en la creación de imágenes, ya que todo es mental, es más el neuronauta o el psiconauta, el ejemplo de la mente a la hora de componer. Hace poco pusimos en un concierto "La carreta fantasma", de fondo, mientras tocábamos, pero la gente nos miraba más a nosotros, porque no paramos de bailar y de gritar.

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Roberto: Las bandas sonoras de las películas de terror y ciencia ficción de los setenta y de los ochenta, que vi cuando era pequeño, me quedaron grabadas para siempre y esa influencia creo que no desapareció nunca. El intento de reflejar esos mundos, el más allá y los mundos extraterrestres, mediante sintetizadores, dio lugar a bandas sonoras como las de "El Resplandor", "La Cosa" o "Zombie" de Fabio Frizzi, que sigo escuchando hoy en día y me siguen gustando mucho. Por todo esto cualquier película de Ciencia Ficción o de Terror sería una buena idea.

Ernesto: Pero una banda sonora de Don Quijote también.

Roberto: Sí, y por ejemplo, la serie de televisión, The Knick, ambientada a principios de siglo XX, está hecha con sintetizadores, y me gusta mucho. No tiene por qué ser Ciencia Ficción.

Junto con la renovación de vuestro equipo, sin duda la gran novedad en cuanto al sonido del disco es la presencia de Oscar Mulero a las labores de producción, que vosotros mismos definís como valiosísima. ¿Podríais explicar cómo fue el proceso, cuanto incidió en la forma final de los temas? ¿Creéis que su colaboración en el álbum puede despertar expectativas de algún tipo entre personas ajenas tanto a vuestro trabajo como al suyo?

Ernesto: Incluso cambiamos partes del equipo después de hablar con él, por sus orientaciones, que fueron muchas. Primero lo grabamos nosotros a solas, en la Casa del Música de Mieres, un estudio municipal, y cuando terminamos la grabación lo llamamos para enseñárselo, luego, si le gustaba, le pedíamos que lo produjera. Aceptó y empezamos a trabajar juntos. Hablamos mucho del disco como idea y de los temas por separado. Le pedimos que no se cortara, que pusiera de su parte y así lo hizo. Durante la etapa final de la concepción del disco él fue un miembro más de la banda. Siempre atento a lo que decíamos nosotros pero retocando muchas cosas. Los temas son nuestros, así como su estructura, aunque en ese aspecto también se reelaboró con él en algunos casos, y además puso interpretaciones suyas, de manera muy sutil, pero que están ahí, a lo largo y ancho de toda la producción. Sobre las expectativas que comentas es indudable que Oscar Mulero tiene multitud de seguidores y que quizás alguno o alguna se pare por un momento a escuchar lo que hicimos juntos. Sería genial que esto sucediese y de alguna manera está ya sucediendo, por las reacciones que recogemos una vez publicado el trabajo.

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En 2012 editasteis un EP de remezclas de vuestros temas a manos de Marc Piñol, Heinrich Mueller y Legowelt, ahora la colaboración con Oscar Mulero…Parece que veis la relación entre Fasenuova y la pista de baile como algo mucho más cercano de lo que podrían suponer muchos de los que os siguen, que vienen de un contexto más pop/rock y derivados.

Ernesto: Pero es que en nuestros conciertos se baila, siempre se bailó, y yo no paro de bailar tampoco, mi abuela andaluza me llamaba "Er dansante", era su manera de definirme, visto en la distancia, ahora me gusta mucho ese detalle. Nuestros directos tuvieron que desarrollarse en entornos más del rock, siendo a la vez unos extraños en ese tipo de mundos. Ha sido un viaje por zonas que no estaban preparadas del todo para nuestro discurso, pero a la vez esto ha sido algo bueno y nos ha abierto más públicos. El baile es un elemento esencial, siempre lo ha sido. Por otra parte es normal que hayamos colaborado con los artistas que mencionas, porque, queramos o no, aunque en nuestro caso todo sea un poco liado y las fronteras muy porosas, somos una banda de música electrónica.

Roberto: Siempre dijimos que lo que hacíamos era rock, un poco por modestia en comparación con músicas experimentales más cultas, con otra apariencia más seria, digamos, y porque estábamos intentando hacer nuestro camino por ese tipo de escenas, más del rock. No había otras, por aquí no había ninguna escena electrónica que pudiera acogernos, y mucho menos más de una o dos veces al año. Si queríamos tocar más teníamos que buscar salidas realistas a nuestra clara anomalía. Nuestra aspiración siempre ha sido la de la experimentación y parte de esa experimentación es la idea del baile.

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Existe una gran diferencia entre el sonido de este disco, sin duda el más brillante y en cierta manera sofisticado que habéis ofrecido hasta la fecha, y el material de vuestros momentos más ruidistas como puede ser Ella está llena de gracia o vuestros conciertos como Local Mode. Dejando de lado la evolución que va teniendo lugar con el tiempo, ¿creéis que hay aún hueco para retomar en algún momento ese perfil más aberrante y experimental de Fasenuova?

Roberto: Nunca lo abandonamos, esas canciones están presentes, a veces mutadas en otras, en tramos del directo más explosivos y ruidistas.

Ernesto: en el futuro haremos un concierto, donde el mundo que representaremos será más el de Cachito Turulo, a esto lo llamamos un concierto más "acachitado".

Aunque es algo que siempre ha estado ahí, nunca antes las referencias a los cómics y la ciencia ficción (Humanoides Asociados, William Gibson) habían tenido tanta fuerza en uno de vuestros discos. Por otra parte, el lenguaje empleado en las letras mantiene ese tono entre la poesía surrealista y el lenguaje coloquial. A menudo me pregunto cuanto de todo esto es algo consciente a la hora de escribir las letras, y cuánto es producto de la improvisación y se aprecia a posteriori.

Ernesto: Cualquiera que nos escuche o nos vaya a ver percibe de una manera o de otra esas referencias culturales. Que salgan más o menos nombradas específicamente es circunstancial o razón por la que silábicamente van con el todo rítmico y melódico. Son apariciones de palabras. Nunca salió el "Garaje Hermético" de Moebius, pero sí es verdad que siempre ha estado ahí. Aullidos metálicos es una forma de traducir "Metal Hurlant", que es una pasaje instrumental de la grabación, es algo que quiere situar al oyente en un marco determinado, son las coordenadas estéticas del sueño, o viaje. Estuvimos pensando en poner en la portada trozos de recortes del cómic de Guillon y Forest, "Los naufragos del tiempo". Otra referencia que se puede rastrear es la poesía de Eduardo Cirlot, y el ansia de libertad y de vivir otra vida de Arthur Rimbaud, que fue una obra y una biografía que nos marcó mucho al comienzo de la andadura.

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Roberto: las letras nacen a la vez y en el mismo momento que nacen las canciones, luego se siguen modificando al mismo tiempo que todo lo demás. Es una creación de "todo a la vez", para aprovechar el momento de la improvisación en el ensayo, y luego lo vamos puliendo.

A sabiendas de que como individuos estáis fuertemente politizados, me gustaría saber cuánto de esto acaba reflejándose en Fasenuova, hasta qué punto el cliché de la Cuenca Minera tan militante como deprimida puede figurar como leitmotiv del grupo.

Ernesto: Somos un grupo tan político en su arte como el que más. Lo que pasa que decimos las cosas a nuestra manera. Nuestro grito es un grito de libertad, también es producto de la rabia acumulada por tanta explotación e injusticia. No hablamos del frutero de la esquina pero sí vamos a comprarle fruta, y le hablamos como vecinos, participamos en nuestras comunidades, en nuestro país, Asturies, en todos los procesos políticos. No hacemos canciones, hacemos invocaciones, tan sólo queremos sentirnos libres, al menos en esta pequeña construcción de nuestra vida, sobre el escenario, cuando ensayamos. Queremos construir una especie de máquina estética que produce imágenes entre oleadas de baile y caos, mientras modelizamos el espacio con ondas sísmicas. Cada sonido es una pared o una nave enorme, es allí donde hay fuego, del otro lado de la sublevación y el libertinaje. Hacemos la música de un mundo que construimos en nuestras mentes, de un mundo que no es futuro, que es una ficción en el continuo, pero una ficción deseada, amada y sentida como real. Queremos hacer estallar los muros de la cárcel, por eso nos ponemos a bailar y a gritar, con descargas de sonido, ritmos y melodías y con invocaciones. También nos consideramos autores de arte político aunque igual es un término que se queda corto para definir lo que hacemos.

Roberto: Esa es nuestra manera de expresar la rebeldía que tenemos, nos gusta hacerlo así en vez de hacerlo de otra forma más explícita.

Podéis escuchar "Aullidos metálicos" entero en el Bandcamp de Humo