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Artículo publicado originalmente por VICE en inglés.El hombre más rico del mundo pasó un rato muy agradable en el espacio el martes por la mañana, mientras que el resto de nosotros estamos agobiados por los incendios forestales, la variante Delta del COVID-19, la desigualdad extrema o simplemente ir a trabajar o pagar nuestras deudas.El fundador de Amazon y Blue Origin, Jeff Bezos, usó un sombrero vaquero, tocó una campana y dijo que había tenido el mejor día de su vida luego de volar al espacio en el New Shepard, su cohete con forma de pene. Los otros miembros de la tripulación incluyeron a su hermano; un joven de 18 años, hijo de un multimillonario que pagó casi 30 millones de dólares por su asiento; y Wally Funk, una piloto de pruebas de 82 años que entrenó para ser astronauta en la década de 1960 pero nunca viajó al espacio.Funk se convirtió en la persona de mayor edad en ir al espacio y Bezos se convirtió en la persona más rica en hacerlo, derrotando a Richard Branson en una batalla que no tiene nada que ver con el espacio.“Tienen un equipo realmente feliz”, mencionó Bezos durante una transmisión en vivo mientras la nave estaba cerca de su apogeo. “Me siento increíblemente bien”, dijo el hombre que supervisa una empresa cuyos trabajadores tienen que orinar en botellas, ha devastado las economías locales y trata a los empleados de sus almacenes como “atletas industriales”, después de aterrizar de forma segura. “Me sorprendió lo fácil que fue la gravedad cero. Es como nadar”.Luego del aterrizaje, Funk dijo: “Eso solo ocurrió durante unos cinco minutos”.A continuación pueden ver el video sobre el viaje de Jeff Bezos.
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