Identidad

Madres jóvenes cuentan cómo es tener hijos a tan temprana edad

“Ojalá me hubieran dicho que es normal tener dudas y miedos y eso no te convierte en una mala madre".
LJ
fotografías de Lucia Jost
DS
traducido por Daniela Silva
generación
Todas las fotos: Lucia Jost | Celeste y su hija Adeya

Después de que muchas de sus amigas se convirtieran en madres jóvenes, la fotógrafa berlinesa Lucia Jost se dio cuenta de que los estereotipos de las madres adolescentes en los medios sensacionalistas y en los reality shows no reflejan la realidad.

“Todas las madres jóvenes que conozco son increíblemente autosuficientes”, dijo. "Tengo un enorme respeto por estas mujeres y la relación entre madre e hijx". Por eso, en su último proyecto fotográfico, Motherhood - A Mother's Hood, decidió retratar a mujeres jóvenes con sus hijxs.

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Hablé con las mujeres fotografiadas para el proyecto sobre cómo ha sido tener un hijo o hija a una edad temprana.

Yahel, 22, y Ariel, 3.

Lucia Jost, Motherhood – A Mother's Hood – Mujer de cabello castaño con un maxi vestido terroso, posando junto a una carriola 030.jpeg

Yahel y Ariel.

Cuando pienso en ser madre, siempre me imagino a mi mamá, que nos cuidó con mucho cariño a los cuatro. Es la mujer más fuerte que conozco. Antes de convertirme en madre, pensaba que la maternidad sería lo más satisfactorio del mundo, y lo sigo viendo así. Pero aunque mi hijo es mi prioridad absoluta, sé que también tengo que cuidarme. No eres solo una madre, es importante tener eso en cuenta.

Antes de convertirme en mamá, me hubiera gustado saber que es normal tener dudas y miedos, pero eso no te convierte en una mala madre, solo te hace humana. Convertirte en mamá tan pronto es difícil. Tienes que crecer siendo plenamente responsable de un pequeño ser humano. Ha sido, por mucho, lo más difícil que me ha pasado. No hay mucho margen de error. Pero estoy muy orgullosa de ello.

Jada, 25, y Naima, 2.

Lucia Jost, Motherhood – A Mother's Hood – Izquierda: mujer de cabello castaño sentada en una mesa para niños y fingiendo comer con su pequeña. Derecha: mujer sosteniendo a su hija y sonriendo.

Jada y Naima.

Como madre soltera joven y artista, a menudo he sentido que debería dar un paso atrás en mi propio proceso de crecimiento para no parecer una madre "loca" o "mala". Internalicé el discurso de la madre abnegada más de lo que me hubiera gustado. Pero cuando comencé a compartir mis experiencias con otras mamás jóvenes y creativas, empecé a sentirme menos sola y más confiada en mi propio sentido de identidad.

Naemi, 19, y Kalim, 1.

Lucia Jost, Motherhood – A Mother's Hood – Izquierda: mujer con trenzas sosteniendo a su hijo en el parque. Derecha: mujer y niño sentados en una manta en el parque mientras ella trata de darle bocadillos.

Naemi y Kalim.

Crecí en una familia grande, con seis hermanos. Mi hermana también tiene dos hijos, así que no fue nada nuevo. La gente que me rodea siempre me ha visto como una madre, y mi mejor amiga también dice que siempre supo que tendría hijos de joven. En retrospectiva, desearía haber criado a mi hijo con su padre y no como madre soltera, pero eso me enorgullece aún más de mi hijo y de mí.

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La gente siempre me dice que soy demasiado joven, pero creo que soy tan madre como cualquier otra persona. Lo que más me gusta de la maternidad es despertarme junto a mi pequeño y verlo mirándome. Simplemente me hace increíblemente feliz.

Paula, 23, y Elio, 2.

Lucia Jost, Motherhood – A Mother's Hood – Izquierda: niño rubio trepando muebles mientras mamá se aplica rímel. Derecha: mamá abrazando al niño mientras se duerme en la cama.

Paula y Elio.

Descubrí que estaba embarazada cuando llegué a casa de una fiesta de Año Nuevo. Fue un comienzo bastante interesante para el 2018. Estaba completamente en shock. Después de un par de semanas, me quedó claro que quería tener el bebé. Simplemente lo supe. No hay una decisión correcta o incorrecta en este tipo de situación.

Antes de convertirme en madre, tenía una hermosa imagen mental de la maternidad, definida por el amor incondicional. Siempre me agradó la idea de convertirme en madre algún día.

Ahora, siento amor incondicional, pero tampoco quiero endulzar demasiado las cosas. La decisión de convertirme en madre ha dado un vuelco a toda mi vida, para siempre. Ser madre no significa que siempre serás amada y exitosa; tienes que trabajar duro para lograr esas cosas. Debes ser funcional, incluso si, por ejemplo, tuviste un parto traumático o estás pasando por una separación difícil. En estas fases, ser madre significa dejar de lado tus problemas y seguir adelante.

No importa por lo que estés pasando, la sociedad espera mucho de ti. Sobre todo, se espera que estés contenta y agradecida. Pero está bien estar triste, enojada o desesperada; después de todo, solo somos humanos. A pesar de todo, puedo decir que fue la mejor decisión de mi vida.