Imagen vía Obin Van Lonkhuijsen/EPA
Síguenos en Facebook para saber qué pasa en el mundo.Aún en shock por las "victorias populistas" del Brexit y de Donald Trump, el mundo ahora está pendiente de lo que suceda en los Países Bajos y en general en el proceso electoral de este año que, de acuerdo a varios informes, podría determinar el destino de Europa e incluso de la democracia.Actualmente, hay mucho en juego en la política holandesa —la desaparición de grandes partidos y el ascenso del Partido Verde, el cual podría convertirse en el mayor partido de izquierda en los Países Bajos—; sin embargo, los medios internacionales han puesto el foco en Geert Wilders, el radical candidato de derecha, que enfila su carrera hacia el puesto de primer ministro, ocupado actualmente por Mark Rutte del Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD, por sus siglas en holandés).En los medios de comunicación estadounidenses Wilders ha sido descrito muchas veces como el "Trump holandés" —el político de extrema derecha preferido en Holanda—, mientras que la mayoría de las agencias europeas lo ubican en el amplio grupo de populistas de derecha, junto con el austriaco Heinz-Christian Strache, la francesa Marine Le Pen y la alemana Frauke Petry.
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Sin embargo, Geert es un político único, quien comparte ciertos rasgos con Donald Trump y algunos otros con Le Pen, mientras que no se parece en nada a otros candidatos.Además de un peculiar estilo de cabello, Wilders y Trump comparten su amor por Twitter. Pero mientras Trump es un tuitero más enérgico, Wilders se ha mostrado más moderado y centrado en sus mensajes, aunque sí tiende a bloquear casi a cualquiera que se atreva a criticarlo (incluyendo a este reportero).
Generalmente envía uno o dos tweets bien estructurados para un mayor efecto. Durante años, ha dominado los debates políticos a través de su cuenta de Twitter, y los mensajes son retomados por los medios y obligan a otros políticos a responder. A diferencia de Trump, quien siempre estuvo dispuesto a ser entrevistado para la televisión durante su campaña, Wilders difícilmente acepta dar declaraciones. ¿Por qué lo haría? Porque él obtiene toda la atención que necesita a través de su cuenta de Twitter y mantiene el control completo en sus mensajes.Dutch nationalist Wilders: Ban Turkish campaigning in the Netherlands — The Indian Express (@IndianExpress)March 5, 2017
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Las diferencias en la manera de manejar sus cuentas de Twitter no son sólo el resultado de su personalidad, sino de su experiencia política. Trump es un político amateur, y aún siendo presidente parece tener poco interés en desarrollar las habilidades necesarias, mientras que Wilders es todo un profesional bastante habilidoso. De hecho, Wilders es el cuarto miembro con mayor experiencia actualmente en el parlamento, cumpliendo ya 19 años de servicio. Por lo tanto, conoce las políticas del parlamento de arriba a abajo, siempre está bien informado y es bueno en los debates; vive para la política, no sólo para los mítines políticos.Wilders es un político que rechaza a cualquiera que desafíe su poder y toma todas las decisiones él mismo, consultando solamente a un pequeño grupo de cercanos. Por ejemplo, los miembros de su Partido por la Libertad( PVV) recibieron el más reciente manifiesto electoral sólo horas antes de darse a conocer a los medios. El programa cabe en una página y prácticamente expresa islamofobia e ideas en contra de la Unión Europea.A pesar de los tropiezos en su campaña, Marine Le Pen sigue liderando las encuestas. Leer más aquí.
En contraste, el Frente Nacional francés es un partido extremamente bien organizado, con decenas de miles de miembros en todo el país, y con un elaborado programa, el cual tiene décadas de tradición en la extrema derecha francesa.Aunque Wilders no comparte mucho con Le Pen, al igual que la líder del Frente Nacional, el político holandés ataca el poder establecido desde afuera, no desde adentro. Wilders también es un político dedicado y un ferviente creyente de que Occidente está en medio de una batalla de supervivencia con el Islam.Francia sospecha que Le Pen está recibiendo ayuda de Rusia para ganar la presidencia. Leer más aquí.
Su núcleo ideológico es mucho más modesto que el de Le Pen y es más cercano a los instintos radicales de Trump. Y aunque parece imitar el estilo de el estadounidense en algunos mensajes de Twitter, Wilders sabe que su futuro descansa sobre las alianzas que tenga con otros partidos de derecha europeos.Sigue a VICE News en español en Twitter: @VICENewsEs