Ñom Ñom: Shabu shabu, una sobredosis de Japón en el DF

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Comida

Ñom Ñom: Shabu shabu, una sobredosis de Japón en el DF

Una olla al centro de la mesa en donde se hierve un caldo y se sumergen ingredientes: carne de res, pescado, tofu, alga, col, hongos, zanahoria, cebolla y fideos udon, soba o harusame.

El shabu shabu es un platillo japonés que consiste en poner una olla en el centro de la mesa en donde se hierve un caldo y se sumergen los ingredientes hasta que se cocinen. Los ingredientes más comunes son carne de res, pescado, tofu, alga, col, hongos, zanahoria, cebolla y fideos udon (de harina), soba (de trigo) o harusame (de soya). Es similar al huo guo (o hot pot) de China, que, a su vez, se originó a partir de un platillo mongol. Al caldo también se le puede agregar ajo y chile, pero eso ya depende del gusto de cada quien.

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Máscaras en las puertas de los baños.

Lo primero que noté en el Shabu Shabu Corner, lugar ubicado en la colonia Roma especializado en este platillo, fue la decoración. Dos pulpos comiendo te reciben, el techo está cubierto de grullas de papel de muchos colores y al fondo hay un estante lleno de juguetes japoneses como darumas, peluches de onigiris y máscaras noh y muñecas kokeshi.

Una mesera vestida como colegiala japonesa no sólo te explica cómo funciona, sino que pasa cada dos minutos a tu mesa para asegurarse de que estés preparando tu platillo adecuadamente. ¿Qué más puedes pedir?

Seifuku <3

Así se ve el Shabu Shabu antes de prepararlo.

La colegiala me recomendó pedir caldo miso —que es la opción más segura por si no les gustan los sabores muy fuertes— y le hice caso. Como pedí un shabu shabu mixto, tenía dos carnes para escoger y decidí que quería rib eye y salmón. De todos los fideos que había, escogí el udon. Me ofrecieron cambiar el gohan que incluye el platillo por un yakimeshi, y acepté porque tenía muchas ganas de carne y no me arrepiento porque estaba delicioso.

Así se ve el shabu shabu paso por paso.

Las bebidas son las mismas que en la mayoría de los restaurantes japoneses: agua, limonada, té verde, calpis, calpis con jugo, cerveza nacional y cerveza japonesa. Me decidí por el calpis, una bebida hecha a base de agua, leche desnatada y ácido láctico. Sabe como a un Yakult pero no tan fuerte, más refrescante y se le puede agregar jugo de varios sabores. Pedí el de mango.

Ñom Ñom :D

Se supone que la porción del shabu shabu es para una persona pero, en mi opinión, es suficiente para que coman dos personas "normales" y queden satisfechas. La chica que me atendió me sugirió que pidiera sushi porque estaba al 2x1 y —de nuevo— confié en su sabiduría. Le dije que sí a todo. Me explicó que había sushis armados o que, si así lo prefería, podía armar mi propio rollo con los ingredientes que yo quisiera. Decidí atreverme y armar mis propios rollos: camarón, pepino, aguacate, uno empanizado y el otro cubierto con queso crema.

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El shabu shabu estaba listo y los dos rollos de sushi en la mesa.

¡Hora de comer!

Mi shabu shabu con caldo miso, fideo udon, rib eye y salmón.

Como dije antes, el caldo está hirviendo, así que no cometan el mismo error que yo y esperen unos minutos antes de empezar a comer porque se pueden quemar, muy fuerte.

Olvidé que estaba hirviendo :'(

Por último, a pesar de que estaba llenísima por todo lo que me había empujado, pedí una orden de mochis. Los mochis son un postre japonés de helado de sabor cubierto con una especie de gomita hecha de arroz. Me trajeron tres mochis: de azuki (frijol dulce), té verde y fresa. No importa cuánto hayas comido, siempre queda un rinconcito en la panza que sólo se puede llenar con algo dulce.

Mochis w

La comida fue hermosa. El shabu shabu es como una sobredosis de Japón hirviendo en el centro de tu mesa. Terminé llena, cansada de comer, pero feliz. Lista para no moverme un rato y disfrutar de la decoración desde la comodidad inmóvil de mi silla. No puedo compartirles de mi shabu shabu, pero sí más fotos.

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Así se ve el lugar cuando está cerrado. Sí, me quedé hasta que cerraron.

Todas las pinturas son de Cecilia Beaven.