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Conoce al fotógrafo en busca de los mejores retratos gatunos

El Dr. Paul Koudounaris ha cambiado las fotos de fémures por felinos llenos de personalidad.
Kitty Warhol

A finales del siglo 19, el sur de California atrajo a inadaptados, idealistas y empresarios con pocos lazos con otras personas. Swamis, espiritualistas, y otras autoproclamadas autoridades religiosas, rápidamente hicieron su camino hacia el oeste para forjar nuevas creencias. Publicistas independientes de libros, conversadores motivacionales, artistas metafísicos y escritores se convirtieron en parte del paisaje de Los Ángeles.

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Mejor conocido por su trilogía de sorprendentes y macabros libros de fotografía sobre cadáveres, morgues, osarios y actitudes humanas ante la muerte, el Dr. Paul Koudounaris ha, desde entonces, apuntado sus lentes en su propio y amado felino para ilustrar lo que sucede cuando pasas de tomar fotos de joyería extraña, o de esqueletos enjoyados, a fotos de una gata asumiendo varios roles icónicos de la historia.

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Cat-ton LaVey

La trayectoria en la carrera de Koudounaris lo ha llevado de ser profesor a escritor/documentalista y, ahora, artista, en parte gracias a una musa extremadamente cooperativa, su gata rescatada ‘Baba’. Koudounaris primero la encontró tras entrar al Refugio Animal del Norte Central en Los Ángeles para adoptar otro gato en el que ya había puesto su mirada, pero un hombre que resultó ser un oficial de policía literalmente mostró su placa y aseguró que ya tenía sus manos en él. En su camino a la salida, Koudounaris vio a Baba, desde entonces ha sido su leal acompañante. “Creo que es cierto en la mayoría de las veces que es el animal quien nos escoge y no viceversa”, comenta Koudounaris a The Creators Project.

Observando a través de las increíbles fotos de Baba tomadas por Koudounaris, uno no puede sino preguntarse cómo la gata logra ser tan paciente para que se tomen las fotos. “Ella sólo tiene ese talento”, explica Koudounaris. “Es como preguntarse por qué una persona puede cantar bien y otra no; a veces simplemente hay una habilidad innata. Claro, hay otra respuesta, posiblemente más obvia: Me ha sugerido la gente que ella es una modelo de moda reencarnada. Eso no lo puedo asegurar”.

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Billy the Kitten

Koudounaris, tiene tres gatos y solía tomar fotos de todos ellos, pero cada que él sacaba su cámara, rápidamente Baba eclipsaba a sus compañeros de cuatro patas. Ahora, Koudounaris fotografía exclusivamente a Baba. “Es una gata muy inteligente y pienso que llegó a un punto en el que se dio cuenta que si jugaba este juego con la cámara, de pronto ella recibiría toda la atención que quería”, señala Koudounaris. “Estoy seguro de que es parte de eso. Pero aún no puedo explicar su nivel de habilidad. Simplemente le sale natural”.

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Cat Beard

Todos los disfraces de Baba son hechos por Koudounaris, quien a veces los retoma de viejos animales de peluche. Incluso estiliza las pelucas de la gata, que usualmente son diseñadas para muñecas, y aplica pelo facial en el rostro de Baba usando cinta para peluquín. En cuanto a los fondos, el fotógrafo también pasa mucho tiempo buscando las impresiones adecuadas. “Es una verdadera colaboración entre nosotros”, describe Koudounaris sobre su trabajo con Baba. “Si fuera una situación de Photoshop, no me molestaría en crearlo, cualquiera puede hacer eso. Pero nadie más puede hacer lo que estamos haciendo. Eso es lo que lo hace especial para mi”.

De hecho, Koudounaris toma sus imágenes de forma tan seria, que de hecho tiene accesorios que encajan con los trajes de Baba y toma fotos de prueba antes de proceder con la verdadera sesión de fotos. Algunas toman más tiempo que otras, pero como sea, “la clave para mi es saber qué estoy haciendo”, comenta Koudounaris. “Porque ella lo está leyendo de mi. Si tengo una idea clara de lo que quiero, ella lo entiende. Si no, ella no lo capta. Así que trato de no molestarla con nada hasta que siento que estoy listo con mi propósito”.

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Marie Cat-toinette

Pero el impulso de Koudounaris para tomar increíbles fotos de Baba va más allá del simple capricho. “En sus raíces, toda la serie de fotos es un experimento de comunicación entre especies”, comenta. “Ella tiene que confiar en lo que le estoy poniendo. Debo encontrar una forma de comunicarle la expresión y pose que necesito. No siempre tenemos éxito. A veces, ella no entiende lo que quiero. Sin embargo, de forma interesante, a veces miro de vuelta las sesiones ‘fallidas’ y me doy cuenta de que esas sesiones no fueron un total fallo porque su instinto para la pose fue mejor que el mío”.

Koudounaris confiesa que “cada una de estas fotos tiene defectos”, ya sea un problema con la peluca, bigote, o con la cámara. Pero comenta que es esa imperfección lo que al final le da a las imágenes “una cierta calidez única”. Y claro, a pesar de la producción orgánica, las fotos también van a través de un nivel de procesamiento, ya sea por una corrección de color, ajuste de brillo, nivel de exposición, contraste o luces.

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Cat-stronaut

De acuerdo con Koudounaris, sus retratos de Baba no son sólo retratos de la gata: también son autorretratos. “A veces eso golpea a la gente cuando lo menciono, pero cuando piensas en ello, comienza a tener sentido”, explica Koudounaris. “[Baba] no conoce a estos personajes. Ella no sabe quién es Andy Warhol, o cualquier otro personaje del que hemos hecho caricaturas. Yo sé quienes son estas personas, y yo llego con un personaje para ella para que actúe de acuerdo con el disfraz y el escenario, y ella lee eso de mi. Así que todas estas fotos son autorretratos: básicamente yo como el personaje a través del gato como medio. Esta, la principal parte del proceso de trabajo no involucra para nada fotografía, involucra el clarificar la forma en que veo al sujeto como caricatura, y entonces haciendo o encontrando lo que necesito”.

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Ahora, Koudounaris presenta las fotos de su gata en Instagram, pero espera sacar un foto libro en algún momento del futuro. “Podría no ser el libro que la gente espera”, comenta. “Quiero escribir un libro bajo su nombre y en la voz de un gato, que de una visión felina de la historia y cultura humana, y estas fotos ayudarán a ilustrar. Es por eso que todas son caricaturas. ¿Qué pensaría un gato de un drama renacentista? William Shakes-paw te dirá. ¿Cuál es la visión de un gato de la Roma Antigua? Ahí es donde Mew-lius Caesar llega. Así que estas son más que fotos: hay toda una perspectiva de historiador que posteriormente se pondrá en juego cuando junte todo”.

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Cat-urday Night Fever

Estos días, Koudounaris también está tomando fotos surrealistas de maniquíes y otros  accesorios en minas abandonadas alrededor de Los Ángeles. Como nativo de Los Ángeles, él cree que su ciudad natal es un lugar ideal para expandir la creatividad de uno con proyectos excéntricos como este. “No hay muchos otros lugares en que podría vacilar entre todas las cosas que estoy actualmente haciendo. Para mí, California es un proceso continuo de descubrimiento y con ello cambia mi visión. Así que, ¿por qué sigo aquí? Finalmente porque, a pesar de todas las cosas negativas que uno podría decir al respecto, es un lugar donde nunca me siento estancado”.

Como alguien que es tan familiar con la escena oculta de Los Ángeles, Koudounaris siente que la ciudad tiene una rara apertura y aceptación a pesar de la propia convicción de uno por la vida. “Quiero decir, soy un chico con un doctorado en Historia del Arte, ¿no se supone que debería estar sentado en un salón de clases regurgitando lecturas sobre Rembrandt por los próximos 25 años?” él pregunta. “Bueno, eso no va para mi, y estoy aquí en un ambiente que me hace seguro de mi libertad de darle la espalda a eso”.

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Paw McCartney

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Cat-Sabbath

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I Want Mew—Uncle Sam

Sigue a Paul Koudounaris en Instagram y visita su sitio web.

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