Plátanos, ropa vieja y un sándwich cubano bastan para unir al mundo

FYI.

This story is over 5 years old.

Comida

Plátanos, ropa vieja y un sándwich cubano bastan para unir al mundo

Las Olas es una humilde rareza en medio de los departamentos multimillonarios y los restaurantes más lujosos de South Beach en Miami. Su comida atrae carteros, obreros locales y oligarcas rusos por igual.

El café cubano es para Miami lo que son los comedores para muchas ciudades del norte de Nueva Jersey o las tiendas de autoservicio para Los Ángeles. Es decir, es el tipo de establecimiento que dice mucho acerca del lugar donde se encuentra. Además, es un sitio donde puedes conseguir desde una taza de café estilo casero hasta una deliciosa cena, y todo lo que hay en medio.

Las Olas Cafe sidewalk

Las Olas Cafe. Todas las fotos por el autor.

El mes pasado, pasé un par de días en Las Olas Café en Miami Beach. Es uno de los pocos establecimientos cubanos de la vieja escuela que quedan en la glamorosa y costosa South Beach. Las Olas, ubicado en SoFI—esto es South of Fifth, o sea al sur de la quinta calle, casi en el extremo sur de Miami Beach—, es una humilde rareza en medio de los departamentos multimillonarios y los restaurantes mucho más lujosos del vecindario. Su comida atrae carteros, obreros locales y oligarcas rusos por igual.

Publicidad
Las Olas Cafe cashier line

Las Olas Cafe le ofrece a este vecindario, casi completamente aburguesado, una probada del pasado. De cuando la zona era el lugar que aparece en Scarface, es decir, el sitio donde miles de Marielitos llegaron a la costa gracias a que Castro decidió abrir las puertas de sus prisiones en 1980. Era una época en donde un agradable plato de ropa vieja terminado con un cortadito y un pastelito eran la norma. Las Olas Café es un recordatorio de que el Miami del pasado —construido sobre la espalda de los cubanos desposeídos— sigue vivo debajo de la superficie.

Las Olas Cafe pastelito de guayaba

Pastelito de guayaba.

Irónicamente, el lugar no ha estado ahí tanto tiempo, abrió apenas a inicios de 2010. Y eso en el panorama de los restaurantes clásicos cubanos en Miami no es nada, establecimientos como Versailles y La Carreta, fueron inaugurados por refugiados cubanos a principios de los 60, y son tan conocidos que sirven a los presidentes y tienen locales en el aeropuerto de Miami.

Las Olas Cafe black beans serving

Frijoles negros.

De cualquier forma, Las Olas Café es legítimo sin duda alguna y se ha convertido en una presencia inamovible de la vida diaria de muchas personas.

Las Olas Cafe line

Quizá la gente difiere acerca de cuál es la verdadera prueba para un restaurante cubano auténtico. Ciertos sellos distintivos, sin embargo, son necesarios: los increíbles cafecitos, lo suficientemente fuertes y dulces para picarte los dientes; una terraza donde puedes consumir dicho café y vomitar todo tu español sobre los vecinos, mientras insultas a Fidel a tope; un montón de mujeres ocupadas sirviendo pastelitos de guayaba y queso; un menú —con imágenes, por supuesto— de varias páginas, con desayunos, almuerzos, comidas y botanas; y un ruidoso extractor de jugos para hacer guarapa, la bebida empalagosa de azúcar de caña que seguro te deja sudando y aturdido.

Publicidad
Las Olas Cafe sugar cane juicer

Guarapa.

Y sobre todas las cosas, un restaurante cubano verdadero hace un Cubano genial o sándwich cubano, la delicia de cerdo asado, jamón y queso que no sabe igual fuera de los climas subtropicales. Es el platillo que ha sido campeón por décadas.

Las Olas Cafe cubano sandwich

Sándwich Cubano.

Las Olas Café hace un sándwich cubano espectacular. De hecho, Michael y Jane Stern los famosos creadores de Roadfood, lo ha considerado el mejor. Lomo de cerdo asado, pan con mantequilla real antes de tocar la plancha, bastantes pepinillos y mostaza amarilla, es, escriben, "un solo acorde de sabor sensacional". Los he comido desde que era un niño y debo decir que estoy de acuerdo. Demasiados lugares en Miami sirven sus cubanos medio asados, con carne mala y margarina. Las Olas no. Puedo coincidir que el Cubano de ahí está hermosamente asado y tiene un sabor complejo. Es un sándwich verdadero.

Las Olas Cafe cortadito

Cortadito Cafecito.

Sin embargo, un restaurante cubano no puede sobrevivir sólo gracias a un sándwich. En nombre de la ciencia, tuve que probar más platillos. Un chico de Corea del Sur llamado Sang-Joon se me acercó y, comunicándonos por medio de una aplicación de traducción en su teléfono, me preguntó qué ordenar. Vio la línea afuera y decidió entrar. Le recomendé el lechón, la ropa vieja, los plátanos y frijoles negros. Por supuesto, todo estaba delicioso.

Las Olas Cafe serving lechon

Lechon Ropa vieja

Las Olas Cafe platanos

Plátanos.

El pastelito de guayaba se desmenuzaba fácilmente y era dulce, casi como una combinación de croissant y pan danés. Las croquetas de jamón y queso estaban calientes y crujientes. Y la verdadera prueba, el cortadito, un expreso "cortado" con un golpe de leche, fue genial. Son los pequeños detalles lo que hace que Las Olas se distinga en el casi interminable mar de pan con bisteces y plátanos.

Las Olas Cafe croquetas fryer

Croquetas de jamón.

Al final, comer en Las Olas por un repugnante total de cuatro veces en dos días me hizo entender algo: crecer, siendo un niño judío en lo que seguramente es uno de los centros más grandes del mundo latinoamericano, fácilmente podría haber hecho sentir que estaba siempre al otro lado del espejo. Pero, en definitiva, las firmes instituciones de la cocina cubana como Las Olas Café pueden unirnos a todos.

LEER MÁS: Pan duro con jamón y ron: el turismo en el tiempo de Cuba