Durante el ultimo año fuimos testigos de varios entregas audiovisuales cortesía de este MC venezolano donde de forma sutil nos dejaba acechar fragmentos de su trotamundismo; de pronto subía un clip rapeando en NY haciéndose de prendas Tommy y Ralph Lauren como un Low Life promedio, dando la vuelta por el Brooklyn Bridge para cambiar de plano en segundos y aparecer rimando en París, fumándose un cigarro con la torre Eiffel de fondo. Otro clipsito de vuelta a su hogar en Maracay para subir la barra en el siguiente video mirándose en Tokyo estoico frente a una cantidad de paisajes tanto de campos como urbanos e infinidad de templos. Temas como "'99", "Hambre", "Unstoppable" y apenas hace un mes "光 Luz" iban creando expectativa de lo que aparentaba conformar un nuevo disco de este artista marcial lírico proveniente del YO YO Dojo! Ahora finalmente y después de 11 años de carrera, Lil Supa nos presenta Serio, su primer disco en forma.
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Es un abuso jactarse de estrenar "tu primer album" tras más de una década de carrera ininterrumpida, haber tocado cientos de shows en más de 3 continentes y ser un referente del género en tu país; sin embargo, no deja de ser tan irónico como cierto y así se ha dado la carrera de Marlon Morales. Sin omitir por supuesto las maquetas, mixtapes, EPs, compilados, discos en colaboración (con Supremacy y el difunto Canserbero) que lleva bajo el brazo. De toda su discografía, Claro, el extended play que sacó en 2015 del que se desprenden temas como "Valórate" y "Mista uanteik", este último respaldado por un video clip que fue responsable de llevar a este rapero a los oídos de cientos de escuchas alejados del underground venezolano y en el que relataba sus inicios en el rap, su cansancio por el mismo y su juventud skater. En retrospective este EP ahora se aprecia como la clausura de una época en la vida del rapero perfecta para dar pie a la siguiente, una que arranca con la palabra SERIO.Serio mantiene el estilo que ha venido acuñando desde el inicio de su carrera. Para los que llevan tiempo escuchando a Zoo, saben que no es de los que ponen las direccionales, aprovecha su gracia para cambiar constantemente de un carril al otro, fluyendo como si las métricas enmarañables no fueran un obstáculo y para jugar en modo experto, cambia entre el español y el inglés con una gracia y naturalidad que pocos interpretes latinoamericanos han podido lograr, cosa que suma gracias a su clara dicción. Con respecto a las instrumentales, si bien se sigue notando ese gusto por los arreglos de jazz, por los pianos ligeros y los bajos dinámicos, se nota la ausencia de sus constants colaboradores tales como Kpu y Afromak, para suplir con nueva sangre como es Drama Theme, Beat Tape y Rial Guawanko (quien además es uno de los tres MCs que colaboran líricamente en el disco). La influencia noventera de la que este MC se enorgullece tanto, sigue presente en el sonido del disco. De no ser así, no sé quién se atrevería a samplear la película Good Fellas en estos tiempos. Sin embargo, la producción final no entrega un producto anacrónico, sino muy bien pensado y que sabe dónde dar y dónde tomar.Es en lo bucólico donde quizás se hace notar más el avance de los años para Lil Supa. Si bien temas como "Luz" y "Espejos" siguen hacienda pie a la búsqueda de la virtud y de la conciencia que demostró desde el principio de su carrera, donde llamaba a hacer "rap conciencia"; temas como "Hambre" y "Fresco y sucio" muestran una chulería que rebase la mera competitividad característica del juego. Finalmente se permite hablar de posesiones materiales y mujeres con un desquite que quizás nunca se había permitido. Canciones como "'99" y "Huellas" hacen referencia a la nostalgia que siempre ha sido un sello de este MC y que al final, son los que terminan uniendo estas dos caras del artista: tanto lo mundana como lo espiritual y anclando un balance en este disco. Su primer disco.