Ilustración por Sara Pachón / Fuente: Criminalidad Urbana de Daniel Mejía.
Caminar por las calles de Bogotá es como poner todo lo que uno carga en los bolsillos sobre el tablero de apuestas de una ruleta. Así el alcalde Gustavo Petro afirme que la ciudad solo se pone cada día más segura (y tenga los para demostrarlo), los estudios de "percepción de seguridad" que elabora la Cámara de Comercio, y el hecho de que buena parte de nuestras conversaciones casuales (y hasta algunos de los artículos de VICE) giren en torno a nuevas e , demuestran que ser atracados sigue siendo una de las grandes preocupaciones de los bogotanos. No en vano la seguridad es uno de los temas a los que los actuales candidatos a la alcaldía le han botan mas candela durante la presente campaña.
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powerpointsinverosímiles maneras de robarte 'el bicho'Pero ¿qué tantas probabilidades tenemos de salir 'ganadores' en esta macabra ruleta del atraco? Saberlo con exactitud es prácticamente imposible. Sin embargo, gracias a un estudio publicado a principios de este año por Daniel Mejía, un profesor de la Universidad de Los Andes, con la colaboración de Karen Ortiz y Daniel Ortega, sabemos con algún grado de certeza matemática cuándo, cómo y dónde suceden los crímenes en la capital. Así que me valí de los datos aportados por el estudio de Mejía, y de la ayuda de Andrés Lizcano, un matemático de la Universidad de Los Andes, para hacer un modelo que, si bien no tiene la validez científica de una fórmula clásica e imbatible como e=mc2, sí nos permite hacernos una idea de qué tan probable es que la suerte nos acompañe, o más bien nos abandone, cuando estamos en las calles de Bogotá.Antes que nada voy a explicar cuáles fueron las suposiciones que hacen que el modelo no sea exacto pero que nos permiten calcular esta probabilidad:
Asumimos de de los 40.563 robos a personas y vehículos que, según datos de la Policía Nacional, sucedieron en Bogotá entre 2012 y 2013, todos tuvieron víctimas distintas. Es decir, que a nadie lo han robado dos veces en ese periodo.
Asumimos que todos los 7.878.783 habitantes que según las proyecciones del DANE tiene Bogotá hoy en día tienen la misma probabilidad de ser robados, independientemente de cuánto tiempo pasen en la calle, cuántos escoltas tengan y cómo se vistan.
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Considerando lo anterior, la probabilidad de ser robado en Bogotá es de 1 en 200. Llegamos a esta cifra de forma muy sencilla: dividiendo la cantidad total de robos entre la cantidad de habitantes. Esto significa que ser atracado en Bogotá es mucho más probable que ganarse el Baloto, ya que la probabilidad de este evento es de 0,12 en 1.000.000. Pero no se alarme, la probabilidad de que un inescrupuloso lo ponga a perder es muy pequeña, sobre todo si se le compara con la probabilidad de que una mujer quede embarazada cuando confía en el condón como único método anticonceptivo durante un año completo, que es de 1 en 5.5. Puede que las calles de Bogotá no sean las más confiables, pero puede tener la certeza de que son más seguras que confiarle su plan de vida a un condón.Sin embargo, esta cifra no dice mucho, ya que, como todos sabemos, una cosa es la probabilidad de que le roben el teléfono mientras se toma una selfie en el Museo del Chicó y otra muy distinta es la de que peguen su raponazo por andar hablando por celular en la Jiménez con Caracas.
Lo novedoso del estudio de Mejía es que, a diferencia de los estudios publicados en el pasado, este no solo incluye la cantidad total de robos que suceden en la capital, sino que además permite ubicarlos a nivel de localidades, incluso a nivel de cuadras. Mejía logró esto clasificando las cuadras de la ciudad en dos tipos: normales y calientes. Por cuadra caliente, Mejía se refiere al 1 % de los segmentos de vía que mayor cantidad de robos concentran en la ciudad: mejor dicho, la crema y nata de los atracaderos bogotanos. ¿Qué tan calientes son estos segmentos "calientes"? Pues para que se hagan una idea, este 1% de la cuadras concentra el 30% de los atracos que suceden en Bogotá, así que yo no andaría mandando snapchat desde ninguna de ellas.
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Sabiendo cuántas cuadras "calientes" existen en cada localidad de Bogotá, y con la ayuda de Andrés Lizcano, logramos diseñar un modelo que permite calcular (con ciertas limitaciones) la probabilidad de vernos cara a chuzo con el destino en cada localidad. Cabe anotar que para hacer este cálculo partimos de otra suposición atrevida. Solo existen dos tipos de calle en Bogotá: las 'calientes', donde suceden 3 de cada 10 crímenes, y las 'normales', donde suceden los otros 7.En ese orden de ideas, las tres localidades en las que es más posible que lo roben (si nuestra matemática resulta correcta) son: La Candelaria, donde la probabilidad de que lo roben a uno es de 1 en 1.020, un poco mayor a la probabilidad de 1 en 1.113 que tiene un estadounidense de morir ahogado bajo el agua. Luego viene Chapinero, con una probabilidad de 1 en 1.695, algo menor a la probabilidad de 1 en 1.442 que tiene un gringo de morir en un incendio. El podio lo completa la localidad de Santa Fe, donde lo van a robar en 1 de cada 1.887 visitas al puteadero.Ahora van las 3 localidades más 'seguras' de la capital. De mayor a menor peligro, estas son: San Cristóbal, una localidad en la que las probabilidades de ser atracado son de 1 en 4.700, una cifra mucho menor a la probabilidad de 1 en 3.600 que tiene un gringo de morir atorado. Irónicamente, la siguiente en el Top 3 es la misma localidad en la transcurría la serie Pandillas: Guerra y Paz, Ciudad Bolívar. La probabilidad de que roben a alguien en la localidad en la que hacían de las suyas el Javi, Mateo y Richard es de 1 en 5.000, casi tres veces menor que la probabilidad de ser atracado en Chapinero. Y, finalmente, la localidad en la que, al menos en teoría, usted puede relajarse, cogerla suave y caminar sin mirar para atrás es … Usme con una probabilidad de 1 en 5.230, casi dos veces menos que la probabilidad de 1 en 3.226 que uno tiene de ser atracado en Usaquén, la más tranquila y residencial de nuestras localidades.
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Aquí les dejo unos datos que les permiten hacerse una idea de que tan 'caliente' es su localidad:LocalidadCuadrasCalientesNormalesTotalAntonio NariñoBarrios UnidosBosaChapineroCiudad BolivarEngativáFontibónKennedyLa CandelariaLos MártiresPuente ArandaRafael UribeSan CristobalSanta FéSubaTeusaquilloTunjuelitoUsaquenUsmeTotal BogotaFuente: Criminalidad Urbana en Colombia. Daniel Mejía.Ahora, antes de mandar a la mierda a sus papás por ponerlo a vivir en una localidad insegura, o de ceder su contrato de arrendamiento para ir a conseguirse un ranchito en Usme o en Ciudad Bolívar, quiero recordarle que estos datos solo aplican para crímenes a la propiedad: es decir, hurto a personas y a vehículos. Otros crímenes igual a o más graves, como el fleteo, la extorsión, las lesiones personales y el homicidio no están contemplados en esta estadística y se reparten de manera muy distinta en la ciudad, haciendo presencia fuerte en esos mismos barrios en los que tampoco atracan:
A veces la vida real se parece a esos malos diálogos que escriben los libretistas: "La plata o la vida".
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Lo novedoso del estudio de Mejía es que, a diferencia de los estudios publicados en el pasado, este no solo incluye la cantidad total de robos que suceden en la capital, sino que además permite ubicarlos a nivel de localidades, incluso a nivel de cuadras. Mejía logró esto clasificando las cuadras de la ciudad en dos tipos: normales y calientes. Por cuadra caliente, Mejía se refiere al 1 % de los segmentos de vía que mayor cantidad de robos concentran en la ciudad: mejor dicho, la crema y nata de los atracaderos bogotanos. ¿Qué tan calientes son estos segmentos "calientes"? Pues para que se hagan una idea, este 1% de la cuadras concentra el 30% de los atracos que suceden en Bogotá, así que yo no andaría mandando snapchat desde ninguna de ellas.Sabiendo cuántas cuadras "calientes" existen en cada localidad de Bogotá, y con la ayuda de Andrés Lizcano, logramos diseñar un modelo que permite calcular (con ciertas limitaciones) la probabilidad de vernos cara a chuzo con el destino en cada localidad. Cabe anotar que para hacer este cálculo partimos de otra suposición atrevida. Solo existen dos tipos de calle en Bogotá: las 'calientes', donde suceden 3 de cada 10 crímenes, y las 'normales', donde suceden los otros 7.En ese orden de ideas, las tres localidades en las que es más posible que lo roben (si nuestra matemática resulta correcta) son: La Candelaria, donde la probabilidad de que lo roben a uno es de 1 en 1.020, un poco mayor a la probabilidad de 1 en 1.113 que tiene un estadounidense de morir ahogado bajo el agua. Luego viene Chapinero, con una probabilidad de 1 en 1.695, algo menor a la probabilidad de 1 en 1.442 que tiene un gringo de morir en un incendio. El podio lo completa la localidad de Santa Fe, donde lo van a robar en 1 de cada 1.887 visitas al puteadero.Ahora van las 3 localidades más 'seguras' de la capital. De mayor a menor peligro, estas son: San Cristóbal, una localidad en la que las probabilidades de ser atracado son de 1 en 4.700, una cifra mucho menor a la probabilidad de 1 en 3.600 que tiene un gringo de morir atorado. Irónicamente, la siguiente en el Top 3 es la misma localidad en la transcurría la serie Pandillas: Guerra y Paz, Ciudad Bolívar. La probabilidad de que roben a alguien en la localidad en la que hacían de las suyas el Javi, Mateo y Richard es de 1 en 5.000, casi tres veces menor que la probabilidad de ser atracado en Chapinero. Y, finalmente, la localidad en la que, al menos en teoría, usted puede relajarse, cogerla suave y caminar sin mirar para atrás es … Usme con una probabilidad de 1 en 5.230, casi dos veces menos que la probabilidad de 1 en 3.226 que uno tiene de ser atracado en Usaquén, la más tranquila y residencial de nuestras localidades.Aquí les dejo unos datos que les permiten hacerse una idea de que tan 'caliente' es su localidad:LocalidadCuadrasCalientesNormalesTotalAntonio NariñoBarrios UnidosBosaChapineroCiudad BolivarEngativáFontibónKennedyLa CandelariaLos MártiresPuente ArandaRafael UribeSan CristobalSanta FéSubaTeusaquilloTunjuelitoUsaquenUsmeTotal BogotaFuente: Criminalidad Urbana en Colombia. Daniel Mejía.Ahora, antes de mandar a la mierda a sus papás por ponerlo a vivir en una localidad insegura, o de ceder su contrato de arrendamiento para ir a conseguirse un ranchito en Usme o en Ciudad Bolívar, quiero recordarle que estos datos solo aplican para crímenes a la propiedad: es decir, hurto a personas y a vehículos. Otros crímenes igual a o más graves, como el fleteo, la extorsión, las lesiones personales y el homicidio no están contemplados en esta estadística y se reparten de manera muy distinta en la ciudad, haciendo presencia fuerte en esos mismos barrios en los que tampoco atracan:
