FYI.

This story is over 5 years old.

18+

Un porno-star japonés de 74 años

¿Hasta qué edad puede un hombre seguir follando? En Japón hay un valeroso abuelo que utiliza su propio cuerpo para responder a esta pregunta. Su nombre es Shigeo Tokuda, es actor en producciones pornográficas y cuenta 74 años de edad.

¿Hasta qué edad puede un hombre seguir follando? En Japón hay un valeroso abuelo que utiliza su propio cuerpo para responder a esta pregunta. Su nombre es Shigeo Tokuda, es actor en producciones pornográficas y cuenta 74 años de edad. A menudo protagoniza películas cuya acción transcurre en hogares para la tercera edad: “abueletes salidos se trajinan a sus cachondas cuidadoras” y cosas por el estilo. Francamente, no tenemos ni idea de a quién puede interesar ver estos films si no es por echarse unas risas.

Publicidad

En fin, eso no importa. Lo que de verdad nos interesa es encontrarnos con este intrépido y geriátrico invasor de chuminos y hacerle unas preguntas acerca de su venerable titola.

Las imágene son de Tit-lover Old Man Kameichi and His Horny Pranks (Glory Quest), algo así como ‘Kameichi, el viejo pillado con las tetas, y sus cachondas travesuras’

Vice: ¿Podría decirnos cuánto tiempo lleva trabajando de actor porno y en cuántas películas ha participado?

Shigeo Tokuda:

Llevo 14 años y medio haciendo esto, y he actuado hasta la fecha en unas 250 películas. Dicho esto, sólo en un 10 por ciento más o menos habré sido protagonista junto a una actriz. Por regla general los míos son papeles secundarios. Todos, eso sí, en películas para adultos. Nunca he actuado en otro género.

¿Qué clase de papeles interpretas?

Ya tengo más de 70 años, así que no siempre aparezco practicando sexo. A menudo mis papeles no están relacionados directamente con el sexo; por ejemplo, puedo interpretar a una figura autoritaria, como un padre severo que obliga a sus hijas a mantener relaciones con algún hombre. Últimamente estoy protagonizando una serie de películas ambientadas en un hogar para la tercera edad. La chica co-protagonista interpreta ya a la esposa de mi hijo, ya a la hija de un pariente al que se supone que estoy buscando, ya a una cuidadora del centro. Rodamos un episodio al mes. El otro día tuve que interpretar a un ceramista obsesionado con las mujeres, un artesano que en lo único que piensa son las chicas.

Publicidad

¿Con qué frecuencia trabaja?

Hay meses en los que no ruedo una sola película, mientras que otras veces llego a tener hasta nueve rodajes. Es bastante errático, ya que normalmente son las compañías las que vienen a verme cuando tienen un proyecto y no al revés.

¿Cómo empezó en esta industria?

Hace veinte años yo quería comprar una película porno especializada en besos, sólo besos. Lo que más me atrajo, sin embargo, fue el hecho de que estaba estructurada como una serie de televisión, con historia y todo. Por aquel entonces yo no me atrevía a comprar algo así en una tienda de vídeos grande, así que acudí directamente a la compañía que la distribuía para comprarla allí. Empecé a frecuentar el lugar y llegué a trabar amistad con el director. Un día me propuso que participara en una película porque, por lo visto, había una gran demanda de “pornografía con gente mayor”. En mi vida yo había soñado participar en un film porno, así que rechacé la proposición. Pero a medida que iba conociendo más y más al director, empecé gradualmente a entender sus ideas y sus intenciones. Dos o tres años más tarde le dije que sí. Así comenzó mi carrera.

¿Hay muchos actores ancianos en esta industria?

Cuando yo empecé a trabajar de actor había otro hombre, unos 12 años mayor que yo. Participamos juntos en varias películas. Aparte de él, no he encontrado más actores en edad senior. En este sentido creo que lo mío es algo insólito en esta industria. Supongo que esto debe tener algún valor.

Publicidad

¿Sabe su familia a qué se dedica?

Les he contado que trabajo de extra en ví-deos y en televisión, y que de vez en cuando me llaman para salir en una película para adultos. Ni mi esposa ni mi hija han vuelto a sacar el tema. Imagino que mi familia opina que el hecho de que tenga buena salud y siga trabajando ya es de por sí algo bueno.

¿Tuvo problemas con su familia la primera vez que les habló del tema?

No, en realidad no. Es maravilloso que a mi edad pueda seguir trabajando, y creo que tanto mi esposa como yo estamos de acuerdo en que nuestra relación durará más tiempo si mantenemos cierta distancia, teniendo en cuenta que nuestros intereses y aficiones son muy distintos.

¿Algún miembro de su familia ha visto sus películas?

No. Son todas pornográficas, asi que no creo que vayan a tener ocasión de ver una. Y de ningún modo se las voy a mostrar yo. Eso sería como cavar mi propia tumba.

¿Son las actrices con las que trabaja mayores o jóvenes?

Desde el punto de vista de la compañía, luce mejor y es más fácil de vender si emparejan a una persona mayor con alguien muy joven. Así que la mayoría de mis parejas son jóvenes actrices. Pero, con franqueza, no tengo mucho en común con las chicas adolescentes o veinteañeras, y me siento más relajado y tengo más cosas de qué hablar con personas de entre treinta y cuarenta y pico años. Prefiero el encanto sexual de las mujeres de mediana edad, pongo más entusiasmo cuando trabajo con actrices de estas edades. Por desgracia no suelo disfrutar de muchas ocasiones así.

Publicidad

¿Emplea alguna técnica para mantener la erección en las pausas entre tomas?

Un factor muy importante es si la edad, apariencia y atributos físicos de la actriz encajan con mis gustos personales. En otras palabras, que básicamente se trata de qué chicas me ponen más caliente. Dependiendo de cómo sea mi compañera, instintivamente pienso, “Sí, esta escena va a ser buena”, u “Hoy creo que voy a tener problemillas”.

¿Son reales sus penetraciones?

En general, todas las escenas de penetración son reales y sin condón. Llevamos preservativo hasta justo antes de rodar la escena. Por supuesto, como los genitales están difuminados en toda la secuencia, teóricamente no podrías decir si los llevamos o no, pero lo cierto es que la textura y el aspecto del plástico se aprecian a través del difuminado, y esa es la razón por la que primero realizamos la penetración sin protección. En este sentido intentamos que todo sea lo más realista posible.

Imágene son de Tit-lover Old Man Kameichi and His Horny Pranks (Glory Quest)

¿Sin goma? ¿Y no teme contraer alguna infección?

No estoy seguro de que lo que voy a decir sirva para cada persona, pero la mayoría de actores y actrices pasan controles sanitarios regularmente. En algunos rodajes incluso hay que presentar pruebas de que estás limpio. Puede que sólo sea una formalidad, pero mi impresión es que en la mayoría de rodajes la gente está muy sensibilizada con este tema. Yo, personalmente, jamás he contraído ninguna infección practicando el sexo.

Publicidad

¿Alguna vez ha tomado Viagra para rodar una escena?

La he probado en alguna ocasión, cuando un director me ha ofrecido. Sólo tomé la mitad, quizá un cuarto, y eso fue hace seis años. Funcionó, pero perdí interés a nivel mental. Pude mantener la erección largo tiempo aunque tuviera la cabeza en otras cosas. Así que, sí, puedo decir que he probado la droga, aunque debo insistir en que sus efectos en mí dependen totalmente de la pareja con la que deba actuar.

¿Cuál es su postura favorita?

Me gusta que la chica se ponga encima y tome la iniciativa. No me gusta ser yo quien tome el papel activo, y además resultaría un poco extraño dado que sería totalmente opuesto a los roles que interpreto.

¿Qué le motiva a seguir trabajando en el porno a su edad?

Como decía antes, me gustan los films que están estructurados como episodios de una serie de televisión. Esto es en parte porque siempre he deseado ponerme en la piel de toda clase de personas diferentes. Así que mantener sexo con alguien no es realmente lo que me motiva. Sigo trabajando en esta industria no porque me guste aparecer en películas para adultos, sino porque me da la oportunidad de transformarme en otras personas. Eso es lo que me atrae, más que alardear de mi capacidad actoral. En consecuencia, la mayor parte de los films en los que actúo tienen una trama y una narrativa.

¿Qué es para usted lo más importante que hay que tener trabajando en esta industria?

Publicidad

Creo que lo más importante es conservar la buena salud. En ocasiones tengo que aparecer caminando en pleno invierno vestido sólo con un ligero kimono de verano, o llevando un montón de ropa en verano. La temporada del año en que se sitúa una película puede ser completamente distinta a la temporada en la que la película se está rodando; por tanto, encuentro muy importante vigilar mi salud día a día. Siempre me han gustado las actividades al aire libre y por eso creo que me conservo mejor que muchas personas de mi edad. También puede deberse a los días en que me dedicaba a escalar montañas, gracias a eso soy capaz de adaptarme rápidamente a diferentes climas. No transpiro mucho en verano y no noto mucho el frío en invierno. De hecho, suelo caminar descalzo. No sé a ciencia cierta si mi cuerpo ha aprendido a adaptarse o es que no soy susceptible a estas cosas por mi propia naturaleza. Tal vez sea una habilidad innata. Otra cosa que tengo presente en los rodajes es la importancia de comunicarme con el equipo y con los otros actores porque, al final, todo consiste en establecer buenas relaciones, conectar unos u otros.

Seguro que tiene cosas interesantes que contar sobre sus experiencias en rodajes.

Hace cinco años participé en un porno dramatizado titulado

Japón Durante la Gran Guerra Asiática

. Mi papel era el de responsable de una comunidad municipal que tiene que ocuparse de evacuar a todo el vecindario porque van a caer las bombas; me encuentro con una chica enferma a la que han dejado atrás, la cargo sobre mi hombro y me la llevo a un refugio, y una vez allí practicamos sexo. Para mí fue un rodaje memorable porque las condiciones que se dieron durante la guerra me son familiares. La película me dio la oportunidad de rememorar esa época.

Publicidad

¿En su opinión, como se vive el sexo hoy en día en Japón?

Empecé a aprender sobre el sexo en el período de posguerra, cuando no teníamos nada. Todo el mundo estaba tan centrado en vivir, en estudiar, graduarse y trabajar que ni yo ni mis compañeros de clase estábamos muy interesados en el sexo. Para mi generación, la cuestión sexual consiste en recuperar aquellos sueños perdidos de nuestra juventud. La Sociedad actual es más abierta en lo referente a la pornografía, y eso creo que es bueno, pero personalmente creo que el sexo debería ser algo más austero. Me refiero a que debería verse como la comunión física entre dos personas. Sé que esto parecerá gracioso diciéndolo alguien con un trabajo como el mío, pero sinceramente así lo creo. Me gustaría tener una conexión más profunda, una conexión entre dos seres humanos, con aquellas chicas con las que fornico.

¿Cuáles son sus ambiciones de cara al futuro dentro de esta industria?

Cumplí 74 años el pasado agosto. Obviamente me va a resultar difícil seguir trabajando en esto las décadas venideras. Quizá me gustaría producir algún día mi propia película, un trabajo conmemorativo de mi carrera. Estaría basado en mis propias preferencias sexuales, así que no creo que fuese muy popular a nivel comercial. Cada persona tiene sus propios gustos, y lo que yo querría en mi película es expresar los míos. Probablemente sólo un contado grupo de personas apreciaría el film.

¿Qué es exactamente lo que tiene en mente?

Aún no tengo claros los detalles, pero estaría basado en mi idea de que, en los vídeos, todo se basa en los movimientos para dar sentido a las imágenes. Yo no creo que las intenciones del creador se expresen siempre adecuadamente a través del movimiento. Dicho esto, sería aburrido para el espectador sentarse a contemplar una imagen fija, sin personas moviéndose. Por tanto se necesita algo de movimiento para que el vídeo le resulte interesante al público. En mi caso es justo al contrario, me resulta más gratificante ver en pantalla una imagen fija. Como una fotografía pero en formato vídeo. Mi sueño es crear una forma de pornografía que provoque emociones mediante imágenes fijas. Esto es sólo un proyecto personal y no necesita tener un público. Lo haría para mí, para sentirme satisfecho a un nivel personal. Todavía debo acabar de perfilarlo, así que no es probable que vea la luz en un par de años, como mínimo.

Usted planea continuar en la pornografía hasta el último día, ¿verdad?

Seguro. Ahora mismo no padezco ninguna enfermedad, así que seguiré cuidándome e intentando seguir en activo, al menos, hasta los 80 años [risas].