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Cultură

La basura especial nos podría encerrar por siempre en La Tierra

Si continuamos tirando nuestra basura en el más allá al ritmo actual, tendremos graves problemas en el futuro.

Imagen cortesía de NASA

La humanidad ha logrado saturar tierra, mar y aire con incontables desechos, así que uno podría pensar que seríamos más conscientes antes de llenar el espacio exterior con toda nuestra mierda. Pero no, resulta que ese vacío que nos rodea se está llenando rápidamente de basura y escombros. Si continuamos tirando nuestra basura en el más allá al ritmo actual, tendremos graves problemas en el futuro: ya no podremos lanzar cohetes espaciales a través de esa peligrosa nube de desechos y será mucho más difícil, sino es que imposible, explorar la galaxia. La idea de que los humanos quedemos atrapados por siempre en la Tierra me asusta, pero como parece que sucederá de todas formas, platiqué sobre esto con Don Kessler, astrofísico de la NASA y el primero en exponer la idea de que demasiada basura en la orbita terrestre podría llevar a resultados problemáticos.

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VICE: ¿Se reflexionó sobre la posibilidad de que la basura espacial se convirtiera en un problema cuando empezamos a poner satélites en órbita por primera vez?
Don Kessler: No. De hecho, muchos en aquel entonces creían en la “Teoría del Gran Cielo”: que podías lanzar todo lo que quisieras al espacio. Creían que estaban lanzando cosas al espacio interplanetario, pero en realidad estas cosas se estaban acumulando en la órbita terrestre baja.

Y el peligro, según entiendo, es que la situación alcance un punto de no retorno, y los viajes espaciales se vuelvan extremadamente difíciles.
Sí, a largo plazo. Estamos muy lejos de ese nivel incontrolable. El problema con las cosas que se impactan a alta velocidad, es que cada impacto produce aproximadamente cien nuevos fragmentos, suficientemente grandes para romper otros satélites. Y cuando un satélite se destruye, quedan un gran número de fragmentos más pequeños que pueden dañar las naves.

¿Qué tan pequeños? ¿Del tamaño de una nuez o una tuerca?
Oh, incluso más pequeños. Tuvieron que cambiar una ventana en el transbordador STS-7 porque un cristal de pintura de una décima de milímetro hizo un agujero en el parabrisas de cuatro o cinco milímetros. Eso fue suficiente para que ya no fuera seguro volver a lanzarlo.

La gente se imagina el espacio como un lugar muy placentero en el que los objetos flotan tranquilamente. Pero estos escombros se mueven extremadamente rápido, ¿cierto?
Sí. Sólo para permanecer en órbita deben viajar a siete mil kilómetros por segundo. El hecho de que los escombros y las naves viajen en direcciones opuestas implica que los impactos ocurren a velocidades que van de cero a 14 kilómetros por segundo. Por ejemplo, la colisión entre el Iridium 33 y el Kosmos-2251 en 2009, cuando los dos satélites se impactaron a ángulos casi rectos, como coches que chocan en una intersección. Eso llamó la atención de todo mundo, pero es justo lo que llevo diciendo desde 1978.

¿Cómo evitamos llegar a ese punto en el que quedamos atrapados en este planeta?
Es muy similar al cambio climático; entre más tardemos en hacer algo, más difícil será revertir las consecuencias. Yo diría que podemos seguir haciendo lo que estamos haciendo ahora por los próximos cien años, pero después de eso se volverá problemático. Básicamente, el momento para preocuparse por los escombros en la órbita terrestre baja es ahora.

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