FYI.

This story is over 5 years old.

Cultură

Varios follamigos nos cuentan cómo se lo montan para que su historia funcione

Cómo conseguir que tus sentimientos no se interpongan en tu camino y poder seguir follando feliz.

El sexo tiene que ser uno de los placeres más simples de la vida. Drake lo sabe; Julio Iglesias lo sabe; Rihanna lo sabe; hasta el cantante ese raro de Bloodhound Gang lo sabe. Por eso es raro que el ser humano, por naturaleza, suela complicar lo que debería ser una cosa sencilla. En vez de disfrutarlo por lo que es, normalmente echamos a perder relaciones de sexo ocasional al interesarnos por la personalidad del otro, desarrollar sentimientos y apreciar al otro por algo más que el sexo.

Publicidad

Pero, ¿y si pudieras follar sin compromiso? Tener relaciones sexuales con alguien de vez en cuando sin estropearlo todo cuando uno de los dos, inevitablemente, comience a mostrar más interés que el otro en la relación. Suena poco probable, ¿no?

Un poco, pero no es imposible. Hablé con tres parejas de amigos con derecho a polvo sobre cómo se lo han montado para conseguir que sus encuentros siguieran siendo ocasionales.

HANS Y GRACE

VICE: Hola, ¿cómo os conocisteis?
Hans: Por Tinder, hace más o menos dos años.

¿Y cuánto pasó antes de que empezarais a tener relaciones sexuales?
Grace: ¡Buena pregunta! Creo que después de haber salido un par de veces. Me acuerdo de haberlo visto en… no sabría decir qué bar.

¿En algún momento hablasteis de cómo iban a ser las cosas entre los dos, o el tema quedó abierto?
Grace: No lo planeamos. Simplemente pasó.
Hans: No fue al cien por cien un plan casual; fue una cosa de un viernes por la noche, algunas veces cada dos semanas, o una vez al mes.

¿Cada cuánto os veíais?
Grace: Iba a dormir a su casa muchas veces porque normalmente salía cerca de donde él vive, así que era mucho más fácil que irme a mi casa.
Hans: Casi siempre era los viernes, o cuando salíamos de fiesta o así.

¿Cómo conseguisteis hacer que siguiera siendo algo ocasional? ¿Ninguno de los dos empezó a sentir nada por el otro?
Hans: Hemos tenido muchas conversaciones difíciles, pero nunca nos sometemos a sentimientos intensos, ¡en serio! De hecho, ahora somos muy amigos.
Grace: Sí, me acuerdo de haber sacado el tema en algún momento, pero lo hice de manera indirecta y una vez que estábamos muy borrachos.
Hans: Ahora solo somos amigos, y dormimos juntos sin que haya sexo.

Publicidad

¿Ha habido momentos en que la situación se ha vuelto violenta?
Grace: No, para nada.
Hans: En absoluto, en serio. Ni siquiera cuando empezamos a salir con otros. Es todo risas.

¿De verdad? ¿Nada de celos?
Hans: Creo que el secreto está en procurar no sentir nada por la otra persona.
Grace: La verdad es que él estuvo seis meses fuera, así que, aunque hubiera empezado a sentir algo por él, de todas formas no estaba. Luego volvió, se hizo amigo de mis amigos, y listo, acabamos siendo mejores amigos.
Hans: Estoy de acuerdo con Grace. Antes de irme estuvimos hablando. En aquel entonces, nuestros grupos de amigos se conocían pero no muy bien. A mi vuelta, conocí a todos sus amigos en un festival en Croacia, donde intimamos mucho. Así que, de alguna manera, aquellos dos años de sexo ocasional terminaron en una muy buena amistad.

¿Creéis que el sexo era lo que os hacía volver, o era la comodidad de saber que siempre estaríais el uno para el otro?
Grace: Supongo que a veces iba solo para poder estar acurrucada con él.

Si tuvierais que darle algún consejo a otros follamigos, ¿sería "No desarrollar sentimientos y emborracharse mucho"?
Grace: Nunca dejéis que surjan sentimientos.
Hans: ¡Y sed siempre respetuosos!
Grace: Sí, yo creo que saber qué piensa el otro ayuda mucho.
Hans: También hay que saber mantener la distancia, cosa que era fácil para nosotros porque vivíamos en extremos opuestos de la ciudad. Pero sí: no tener sentimientos y emborracharse juntos.

Publicidad

PATRICK Y SAM

¿Cómo os conocisteis?
Sam: Fue una noche cualquiera en un bar; no me acuerdo quién habló primero, pero él se vino conmigo a mi casa. Patrick te puede decir.
Patrick: Me acuerdo de haberla conocido en la zona de fumadores de un bar llamado Junk. Pedir un encendedor es una buena forma de empezar una conversación.
Sam: Hubo noches desastrosas. Esa vez él estaba más hecho polvo que yo.
Patrick: Estaba muy borracho.
Sam: Al final acabó vomitando en mi lavabo y lo mandé a su casa. Pero estoy segura de que intentaste hacer algo con ese aliento a potada que tenías.

Veo que por aquel entonces todavía no os habíais acostado; solo vomitaste sobre ella, ¿no, Patrick?
Sam: Lo mandé a su casa y tuve que limpiar todo el vómito del lavabo. Fue una noche muy larga. No sé por qué le volví a hablar, pero lo hice. Patrick, ¿te acuerdas de la primera vez?
Patrick: Viniste a mi casa un par de semanas después.

¿Cómo fue?
Patrick: Simplemente pasó. Los dos lo pasamos muy bien. Ella se sorprendió de lo bueno que era; dijo: "No esperaba que fueras tan bueno".
Sam: ¡Por Dios, no hacía falta dar tantos detalles!
Patrick: ¡Creo que sí!

¿Y qué hicisteis a la mañana siguiente? ¿Hablasteis de mantener esas relaciones ocasionales u os limitasteis a dejar que la cosa fluyera?
Sam: Los dos nos dejamos llevar. Y me parece recordar que yo me fui sin decir nada. Antes de que él se despertara.
Patrick: Sí, así fue; ella no se quedó la mañana siguiente. No me acuerdo de si la vi salir o no.
Sam: Estoy segura de que me vestí mientras estaba todavía oscuro.

Publicidad

¿Por qué?
Patrick: Sí, ¿por qué?
Sam: Hombre, al menos pasé la noche. Normalmente no soporto dormir con un tío, sobre todo si es tan sobón como Patrick. A ver… una vez que lo has hecho, pues sigues a lo tuyo.

¿Y cómo fueron las cosas después de aquello? ¿Cuántas veces más os acostasteis?
Sam: Con bastante frecuencia, después de salir por las noches, así que, no sé…¿tal vez una vez a la semana? A veces más, a veces menos, dependiendo de lo que estuviera pasando. Creo que estuvo bien. Nunca discutimos por las otras personas con las que estuviéramos saliendo, y lo mantuvimos con cierta discreción, pero obviamente mis compañeros de casa lo sabían.

¿En algún momento empezasteis a sentir algo uno por el otro?
Sam: Mira, me encantaría saber la respuesta a esa pregunta. Llevo años esperando. ¿No fui suficiente para ti, Patrick?
Patrick: Sí, ella es una chica muy atractiva y sabe muy bien lo que hace. Pero ninguno de los dos tenía intención de llevarlo más allá; estábamos contentos con cómo estaban las cosas. Si nos hubiéramos comprometido, tal vez no estaríamos hablando hoy.

¿Fue incómodo en algún momento?
Sam: Una vez le di un beso a un amigo suyo; no me acordaba de eso, hasta que me mandó un mensaje al día siguiente intentando ligar conmigo. Pat me ignoró por completo durante semanas. Una vez incluso tuve que llevármelo aparte en un bar, y me mintió diciendo que su teléfono estaba dañado. Pero al final me perdonó; recibí un mensaje una mañana cuando estaba de viaje en París.
Patrick: Aparte de eso, aquella otra vez.
Sam: ¿Cuál?
Patrick: La vez que volví a tu casa y, no me acuerdo por qué exactamente, discutimos sobre algo y me amenazaste con tirarme el móvil por la ventana.
Sam: ¡Ah sí! ¡Porque quería que te callaras y te durmieras! No parabas de susurrarme mierdas al oído. Estaba muy cabreada. Le dije que se fuera, pero no me hizo caso y se quedó ahí, escribiendo mensajes con su teléfono. Lo lancé contra la pared primero, y luego por la ventana. Pero la siguiente vez que nos vimos fue bien. Incluso volviste a mi casa. Él muchas veces llegaba borracho a mi casa. Pat, ¿te acuerdas de esa vez que me llamaste borracho y acabamos viendo El libro de la selva y durmiendo?
Pat: ¡Sí!

Publicidad

Suena bien. ¿Cómo habéis evitado que lo vuestro vaya a más?
Sam: Ambos nos acostábamos con otras personas. Libera un poco la presión el tener la atención dividida.

¿Qué consejo daríais a otras personas que quieren llevar relaciones de este tipo?
Sam: Que lo hagan solo con gente con la que pueden ser amigos. Que se lo tomen con calma y sentido del humor. Y que recuerden que algún día será una buena historia.
Patrick: Sí, y siempre sean sinceros con su pareja. No vale la pena echar a perder algo bueno por una tontería.

MITCH Y STEPHANIE

¿Cómo os conocisteis?
Mitch: Nos conocimos en una entrevista grupal para un cargo en una empresa de gestión de instalaciones. Había algunos puestos disponibles del mismo nivel y los dos los conseguimos. Steph era la única persona joven en la entrevista, aparte de mí, así que nos hicimos amigos muy rápido.
Stephanie: Y él siempre tenía comida extra para mí a la hora de comer. Su madre le preparaba cosas buenísimas.
Mitch: La primera vez que follamos fue en la fiesta de Navidad de la empresa.
Stephanie: Lo hicimos en el cuarto de la limpieza.
Mitch: Con otras 150 personas a solo 20 metros, en la habitación de al lado.
Stephanie: Me di en la cabeza con el lavamanos.
Mitch: Fue un poco desastre.

¿Y qué pasó la mañana siguiente? O bueno, tal vez no fue la mañana, sino la noche.
Mitch: Sí, fuimos a una discoteca después. El resto de la noche no podíamos parar de reír.
Stephanie: ¡Y todavía es así!
Mitch: Hablamos sobre eso un par de días después y acordamos que iba a ser una cosa de una sola vez. Pero terminamos haciéndolo otra vez, unos meses después.

Publicidad

¿Solo esa vez?
Mitch: Sí, solo esa vez más. Bueno, fueron como ocho veces esa noche.

¡Vaya! Muy bien, chicos.
Mitch: Sí, estuvimos toda la noche enganchados. Fue una maratón.
Stephanie: Creo que al día siguiente los dos nos dimos de baja en el trabajo.
Mitch: Sí, así fue.
Stephanie: Creo que follamos otras dos veces por la mañana y luego te dejé en tu casa.

Qué bonito. ¿Y alguno de vosotros generó sentimientos por el otro?
Stephanie: Solo por la forma de cocinar de su madre.
Mitch: Yo no.
Stephanie: No. Yo estaba "saliendo" con alguien.

¿Con quién salías?
Stephanie: Con un idiota.

Ya. ¿Y fue incómodo en algún momento?
Mitch: No, no fue nada incómodo; nos seguíamos viendo todos los días en el trabajo. ¡Incluso subió nuestra productividad!
Stephanie: A Mitch lo ascendieron. Yo era una buena motivadora; creía en sus capacidades para hacer el trabajo.

¿Pero cómo hicisteis para evitar que fuera un desastre emocional y físico? Quiero decir, suena como si físicamente hubiera sido desastroso.
Mitch: Sí, el sexo era bien salvaje.

¿Cómo lograsteis controlarlo para que no fuera a más?
Mitch: Voy a dejar que Steph conteste a esto.
Stephanie: Teníamos 20 y 21 años cuando follamos por primera vez. Todavía quería follar con otras personas. Y él también. De hecho, usábamos Tinder para buscarle rollo al otro. Nunca fue una cosa seria que llevara a nada. Y, la verdad, disfruto mucho el sexo como para comprometerme con una sola persona.

¿Qué consejo daríais a quien aspira a tener relaciones ocasionales?
Mitch: El sexo divertido y descarado es genial. No hay que arrepentirse, porque, a fin de cuentas, es solo sexo.
Stephanie: Y si pueden, que lo hagan en el cuarto de la limpieza; ayuda con el tema del orden.

Sigue a Usher en Twitter.