Hablamos con Deltatron sobre vandalismo, fiestas y tropical bass

La estética cruda y callejera en las portadas de Deltatron, distrae la atención de los estereotipos con los que tenemos asociados a quienes hacen tropical bass, cumbia digital, o mezclan dembow en sus piezas. En las portadas de este peruano no aparecen uñas largas fluorescentes, ni máscaras nativas en contacto con extraterrestres. El neón se reduce a un par de rayones fluorescentes que dibujan el título de sus canciones sobre fotografías dramáticas y densas en las que lo mismo aparece un malandro en un coche clásico, que una nena con flequito y pelo de colores. En general, hay muchos ombligos. Su música es de esas que tiene una denominación de origen muy contundente. Deltatron arremete igual con una cumbia amazónica que con un trap bien amarrado y presenta figuras obscuras y ponedoras. Funcionan tanto en la pista como en el sillón de tu casa.

Deltatron es Paz Ferrand, un chico de Lima que lleva casi 10 años moviendo nalgas mediante ritmos periféricos en su ciudad. Es DJ, productor y fundador del colectivo Terror Negro, conformado por otras luminarias del undeground nalguístico limeño como Elegante y la Imperial, Tribilin o Chakruna, desde ahí han tendido vínculos hacia Argentina y se codean con Dengue Dengue Dengue!

Deltatron tocará este 10 de julio en la Ventana, junto con DJ Pho y Space Monkey en una de las fiestas de #LATINOAMÉRICASUENA. Antes de su presentación hablamos con él sobre piratería, la escena en Lima, la fiesta y la negritud.

Vice: Podrías hablarnos del slogan de Terror Negro, "difundir la piratería y el vandalismo cultural" , eso puede ser muy necesario en algunas circunstancias, ¿a qué te refieres tú?

Deltatron: Nosotros, cuando comenzamos, sampleamos un montón de bandas antiguas, de acá y de otros discos. En Perú hay una mafia de empresas fonográficas, siempre te vienen a cobrar en las fiestas, así no tengan los registros. Esa es una de las razones, porque sampleábamos y distribuíamos sin permiso; regalábamos los discos y no pagamos nunca ningún derecho. Así que tomábamos algo que no nos pertenecía y lo usábamos, era abusivo, pero era la única opción que teníamos, porque sabíamos que no íbamos a vender discos desde el comienzo. Por otro lado la vaina con el vandalismo era porque esta música no le gustaba a mucha gente de los círculos en los que tocábamos y cuando nosotros empezamos no lo miraban tan bien. Cuando empezamos a ir a las discotecas, o a los lugares en donde normalmente tocan más house y esas cosas, la gente no miraba tan bien esto.

Para nosotros era un tipo de vandalismo porque los obligábamos a bailar una cosa a la que no estaban acostumbrados, a recibir una cultura que, a pesar de que era muy común para sus abuelos o sus padres, o para ellos mismos, no se traducía en la fiesta. Entonces, era como bombardear un lugar en la fiesta. La estética del sello se trataba de robar mucho. Nuestros logos eran copiados de Run Dmc, otro de pandilla basura Garbage Pail Kids, todo era una cultura de mash up. Usábamos técnicas de distribución, de guerrilla, por eso ese slogan.

Vice: ¿O sea que uno no puede tocar discos de Los Mirlos y Los Destellos porque le cobran?

Eso de los Mirlos y Los Destellos empezó como un revival, hace como 5 o 6 años, pero no era normal, no era como que la gente lo valoraba o apreciaba, no había una escuela. La mayoría de nosotros, en Terror Negro, creció escuchando cumbias, reggaetón, etc… y para nosotros era normal. Cuando empezamos a hacer los tracks tocó ir a buscar las raíces de esos productores. Productores que no tocaban en ZZK, no, acá era Dj Vampiro, DJ Taz… productores de cumbia y reggaetón de barrio, de verdad.

Vice: ¿Tienes una especie de concepción activista sobre la música?

Esa era la idea desde el comienzo, no era solamente hacerlo por hacerlo, sino algo político. Lo que hacemos no era normal al comienzo, no estaba en boga.

En 2009, 2010 empezaron las fiestas. Pero fue difícil. A los latinos les es difícil valorar algo que ellos mismos hagan. Siempre tienen que copiar o esperar que algo nuestro pegue en el extranjero para valorarla. Yo sabía que todo esto iba a pegar, todos lo sabíamos: Chakruna, Tribilin, Elegante, la mayoría menos Dengue (que aún no se nos unía), sabíamos que había un futuro para nosotros, porque en aquel entonces no había una escena de productores como nosotros, de DJs de acá, que produzcan ritmos de acá. Sabíamos que iba a ser difícil, que tarda tiempo en formarse la escena porque conocíamos casos como el de Puerto Rico y pues como sabíamos que no había nada más que hacer, lo adoptamos.

Vice: Dime ¿cómo se vive la escena en Lima?, ¿de qué barrio eres, de Miraflores, o de la periferia? y ¿cómo es la esfera de participación del tropical bass en Lima, cómo te colocas?

Yo nací en París, pero vine a Perú a los 2 años. Mi mamá es actriz y ella estaba de gira, nací allá solamente por eso. Crecí en Surco, uno de los barrios más grandes de Lima, ese barrio tiene barrios pitucos, barrios pobres etc. Yo crecí en Vista Alegre, ahí las viviendas son chéveres, de nietos de militares, de policías o de las fuerzas armadas; viviendas para servidores del Estado. Crecí escuchando hip hop por opción y punk, bastante punk, pero por obligación escuchaba reggaetón y cumbia todo el tiempo, en todos lados: en los quinceañeros, en la calle, en los buses. Estábamos bombardeados, nuestro presidente nos bombardeaba todo el tiempo de eso como una cortina de humo. Hasta la canción de su campaña era una cumbia.

Además vivía con un tío que es de la selva. En mi casa vivíamos un montón: yo, mis primos, mi abuela… un montón. Él escuchaba cumbia amazónica: a Los Wembler's, Juaneco… Por otro lado mi mamá estaba obsesionada con que yo fuera músico y a los 20 o 21 ya hacía música electrónica. Mi padrastro es director de conservatorio y no le gusta la idea de que yo haga música comercial. Él dice que la nunca música que sirve es la canónica.

En el 2006 yo tenía 20 o 21 y hacia tracks de cumbia y reggaetón y tenía una banda que se llama Olaya y un día una amiga mía hizo una fiesta con Sonido Martinez, argentino. Para nosotros él es como un padrino de Terror Negro, junto con Dj Sabroso. En 2007 él vino y me dijo "ahh, tu estás haciendo cumbia y reggaetón, pero ¿en qué te fijas? Hay una escuela de DJs de cumbia que está en los barrios". Me empezó a mostrar a los DJs de la cumbia villera y me voló la cabeza porque dije, "¡hey! hay una escuela de Djs latinos, no hay por qué seguir otra escuela". Al toque me di cuenta que había más DJs como yo, como Chakruna o Tribilin, que no tenían la visión de ZZK, sino una visión real, basada en los aspectos reales. Yo pienso que eso fue el inicio de Terror Negro, cuando encontramos la línea directa, real, de DJs.

Cuando pasó eso, la gente empezó a trabajar enfocada en una escuela y en lo que había que aprender; teníamos mucho que aprender y así empezó Terror Negro. Hacíamos fiestas en warehouses, en ese entonces, en Lima, había un boom inmobiliario y se rompían muchas casas para hacer edificios y empezamos a hacer nuestras fiestas ahí.

Al principio, nuestro público eran artistas o arquitectos, porque esa era la gente chic, pero toda esa gente estaba en el noise y la vanguardia y nosotros lo que queríamos era hacer fiestas y que la gente tomara cerveza, comprara las entradas y listo. Sabíamos que iba a ser muy difícil entrar a los barrios porque, en los barrios de Perú, la cumbia ya no tiene un valor, no habla de cosas callejeras y es bien fancy. Antes, en los ochenta, tenía carácter marginal, ahora la gente que la escucha tiene plata, se toca con grandes orquestas de música y les gusta empoderarse de eso. Lo que más callejero en Perú es el reggaetón, aquí la cumbia es marginal pero más para los adultos, algo de lo que hay que sentirse orgulloso, es más oficial.

Entonces, una vez que empezamos a llenar esas fiestas, hasta Auxiliar y Dengue Dengue Dengue! venían. Auxiliar ayudó mucho a la escena porque antes hacían drum and bass, dubstep etc. y cuando escucharon a ZZK empezaron a copiar ese estilo, hasta visualmente, y eso empezó a llamar la atención de más gente (esto lo cuentan ellos mismos). Lo nuestro es más agresivo, eso fue bueno porque creció más la gente que nos seguía y poco a poco, hacia 2011, las discotecas empezaron a llamarnos. Cuando Dengue hacia fiestas necesitaba de todos nosotros porque no había más gente que tocara esto, pero lo nuestro era más pesado.

Después, en 2012 o 2013 nos dimos cuenta que queríamos hacer nuestras noches en las discotecas y empezamos a tomarlas. Habían fiestas de 2000 o 1500 personas, había un lugar que se llamaba El Toro, ahí se hicieron la mayoría de las fiestas, ese local nos ayudó un montón. Era grande ese local, ahí como que se solidificó, cuando vimos a esa cantidad de personas dijimos "esto es bien real". A partir de ese año empezamos a hacer giras en Argentina y a salir a tocar. Fue chévere porque todos producían desde el comienzo, hacían sus propios mashups, había esa necesidad de hacer algo propio.

TERROR NEGRO MIXTAPE 006 - DR. PANIKO - EL AMANSAGÜAPAS by Terror Negro Records on Mixcloud

Vice: Me causa conflicto que la etiqueta del tropical bass no describe un género musical sino un movimiento continental y es una generalidad que ha acogido muchos proyectos con denominación de origen muy fuerte. Hay muchos, pero el caso de Deltratron me parece que es uno de ellos, suena muy peruano. ¿Qué preguntas te hiciste para llegar a lo que suena Deltratron?

Yo soy bien obscuro en lo que me gusta, cuando empecé quería hacer que la gente baile y que tenga esa atmósfera obscura que se vive en las fiestas. Pero no solamente importa hacer bailar, sino que a veces quiero hacer canciones para que la gente las escuche después, en su casa. Soy bien natural para hacer música, es obscura pero rítmica. Eso soy yo, esa vibra tiene mi crew, nuestra fiesta es bien agresiva; la música los ritmos, son agresivos, no es un paseo por Disney y en verdad no me parece mal que nos hayan llamado así.

Nosotros estábamos más interesados en los ritmos del ghetto, cualquiera: reggaetón, trap de Atlanta, el kuduro, soka, el zouk, cumbia villera, chicha, ritmos de barrios era el indicio de Terror Negro. Esta bueno que nos llamen tropical bass, porque engloba todos esos ritmos y eso nos permite hacer más mezclas. Para nosotros eso del vandalismo cultural, el nombre de la disquera y toda su esencia, se basa en la idea de negro, de nigga, de esas cosas despectivas. A los indios en Argentina también les dicen negros.

Para nosotros eso no se define por la piel, "negro" es un estado mental, más que una raza, conozco blancos que son negrazos y negros que son blancazos, que son racistas con los miembros de su propio barrio. A toda esa gente la da vergüenza su barrio pero por otro lado le encanta, le encanta comer y bailar esa música. Para nosotros era eso: llegar a algún lugar y decir que somos el Terror Negro, esa vergüenza, esa esencia latina, con creatividad para buscar soluciones, esa gente que puede sentirse a gusto en cualquier parte del mundo porque conoce sus raíces.

Vice: ¿Has venido a tocar a Colombia?

Nunca

Vice: Qué se puede esperar la gente de Colombia, que es un país muy cercano a Perú, pero muy particular, y además es un mercado bien competitivo en términos de cumbia.

Por mi lado, yo como Dj, siento que son bien intensos y eso es lo que les voy a dar: un set intenso, sin parar, igual que lo hago en Lima, pero he visto a los DJs colombianos como Dash Slktr o la gente de Sabor y todos tienen un estilo bien fuerte de dembow y cumbia, agresivo. Yo espero eso, hacer una buena fiesta, más que tocar mis tracks, voy a tocar de todo: de mi disquera, de mis amigos. Ahora, después de 5 años hay muchos tracks nuestros, al principio nos fijamos mucho en el dubstep y ahora tenemos una gran paleta. Daré un set intenso.

Personalmente quiero ir a buscar discos, Colombia es la cuna de la cumbia, e ir, para mí, es como una peregrinación. Cuando fui a Argentina busque a los originadores de la cumbia del barrio de ahí, fui a conocerlos y a estar con ellos. No sé si pueda hacer eso en Colombia pero quiero ir a buscar vinilos de Anibal Velázquez, Chico Cervantes, Lizandro Meza, Alfredo Gutiérrez, cumbiamberos de los cuales quiero sus vinilos y que son difíciles de encontrar acá.

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La fiesta de #LATINOAMERICASUENA con Deltatron, DJ Pho y Space Monkey será este 10 de julio en La Ventana (Cra 12A #83-61).