Mucha gente habla sobre la comida reconfortante o "comfort food" de forma abstracta —sobre todo describiendo nuestro derecho a automedicarnos con puré de papas, espagueti carbonara y otras delicias que probablemente sepamos que no son muy saludables—, pero es mucho menos común que señalen las razones por las cuales necesitamos este consuelo calórico. Por ahora solo podemos adivinar algunas.Quizá porque las sociedades mundiales se sienten divididas, Trump y la mitad de los estadounidenses odian a los latinos y sí, la Gran Barrera de Coral (el mayor arrecife de coral del mundo, ubicado en Australia) está muerto. Nosotros lo matamos. Nos hemos —y estamos— equivocando tanto.Solo hay un forma de sobrevivir los últimos meses de 2016: debemos comer comida reconfortante.Te presentamos la receta perfecta. Son macarrones con queso y pimiento; son tan cremosos, especiados, picantes y llenadores que quizá olvides la sensación de que el apocalipsis es inminente. Dos tipos de queso diferentes; tres tipos de especias: un plato de felicidad momentánea derretida.
Estamos para servirte. Recuerda algo: los macarrones con queso nunca te decepcionarán.RECETA: Macarrones con queso y pimiento