Estandarte del amor, la fumadera y los movimientos sociales: 20 años de Cultura Profética

Foto vía el Facebook de la banda

Cultura Profética ha sido una de mis adoraciones musicales desde aquella época dorada en la que podía quedarme viendo humo salir del porro con un enamoramiento total. Cada que prendía uno, me gustaba—y me gusta— escuchar voz súper dulce de Willy relatar la cadencia con la que sube el humo. No voy a revelarles cuántos porros me he fumado, pero las canciones de esta banda son parte del soundtrack de mi vida, me acompañaron a la universidad, me alivianaron en más de un after, me dieron argumentos para defender mi derecho político y espiritual a fumar mota y por supuesto, han sido responsables de varias de mis historias de amor.

Este año celebran su aniversario veinte y volvieron a México a una gira festivalera como parte de su plan de celebración. No podía perderme la oportunidad de entrevistarlos. Recuerdo que fue por ahí del 99 que vinieron por primera vez a nuestro país y hoy por hoy, para ellos y nosotros, el panorama ha cambiado:su público ha crecido, se ha diversificado y sobre todo, Cultura Profética se ha convertido en una de las bandas referentes del reggae latinoamericano. Hablé con Willy y Bori sobre sus mejores historias con fans, la mala educación que hay entorno a la marihuana, las carencias que sufre la escena musical en Puerto Rico, su trayectoria y el poder de la música en el cambio social.

Noisey: Empecemos hablando de qué significa para ustedes cumplir veinte años en un género como el reggae, ¿cómo han ido cambiando las cosas en la escena desde que ustedes empezaron?
Willy: Primero que nada es ver que no hemos perdido el tiempo, que sí ha pasado mucho tiempo pero que hemos estado trabajando, que no hemos parado de trabajar y que el trabajo se ha hecho de manera independiente, que eso es lo que le da fuerza al proyecto, que siempre se ha hecho independiente, entonces cuando uno mira para atrás estos veinte años, uno dice: qué bueno, qué bueno que aposté y que salió y que sigue saliendo.

Bori: Y que es un poco loco que maybe, si ves el pasado de otra manera, como pasa con las disqueras que te ponen dinero por todos lados y la música explota y al momento puede que hubiese caducado antes, el hecho de que haya salido lento nos ha hecho tener trabajo más a largo plazo… ha sido… más genuino, más orgánico totalmente, la gente lo ha hecho más de ellos, se siente más propio. Hay como una línea fina ahí porque a la gente les gusta sentir que es de ellos, de pronto cuando se hace viral a la gente que le gustaba al principio ya no les gusta, porque ya le gusta a todos. De hecho eso nos ha pasado un poco ahora que se ha dado a conocer más el proyecto, a mucha gente ya no le gusta nada más por eso, puedes hacer las mismas canciones, poner la misma energía y el mismo contenido, pero si sale en la radio ya los fans dicen: “ya no es real porque sale en la radio”. Y no, lo importante es que también nuestros temas lleguen a la radio, lo importante es comunicar.

Willy: Claro, el trabajo que uno hace es para comunicar, totalmente se trata de las temáticas, de las letras y eso hay que comunicarlo.

Bori: Y en cuanto a la escena del reggae, sí sentimos que ha cambiado bastante y ha sido lindo cuando grupos nuevos nos dejan saber que nosotros los hemos influenciado y es bueno saber que hemos puesto un granito en que la música sea diferente. Nosotros realmente el mayor éxito que hemos tenido no ha sido solamente estar metidos en la escena del reggae, sino en que nuestra música se expanda fuera de esos límites. Digo límites porque a veces los géneros limitan la creatividad y nosotros somos más. No por mejor ni peor, sino somos más, es otra cosa.

Y justo como ustedes tienen tanta trayectoria y el desarrollo de la banda ha sido tan orgánico, ¿ustedes creen que son un punto de referencia o una influencia dentro del reggae?
Willy: Claro y no es que lo creamos, es que nos lo hacen saber, y no solamente dentro del reggae, muchos que hacen pop, incluso que hacen reggaetón. Por ejemplo, J Balvin dice que creció escuchando nuestra música, hace poco me dijeron que Maluma también es fan y le encanta nuestra música. Es algo que tú no te esperarías, ¿no? Y sí, uno deja un poquito de influencia ahí. Pero sí en cuanto a reggae latinoamericano en general, nosotros definitivamente ya somos un referente. Y es loco saber también que hace años, nosotros empezamos a meterle montuno al reggae, el montuno es la rítmica que hace el piano en la salsa y hace ¿qué… como diez años?, escuchamos un grupo como Midnight que es un referente del reggae en general de estos nuevos tiempos, que le estaba añadiendo también el montuno al reggae y obviamente eso no viene de ningún lado más que de Puerto Rico y de nosotros. Es chévere darte cuenta que esas cosas pasan, claro que no todos te lo van a decir necesariamente, pero tú lo sabes.

Claro, y en realidad es un efecto en cadena, la música de otras generaciones nutre a la nueva escena musical. Cuando comenzaron, ¿cuáles eran sus referencias?
Willy: Por ejemplo, en nuestra música tú puedes sentir influencia de Jamiroquai en la cuestión de los teclados. Estábamos en un momento… Nosotros nacimos dos años después de Jamiroquai estuviera pitteando porque ellos hicieron un buen pit en el 94 por allá, ya estaban haciendo una música increíble y nosotros iniciamos en el 96, entonces para el 2000 estábamos escuchándolos bastante. A ellos a Hepi Hankok que ya es una institución y se siente esa musicalidad en nuestro buscar, porque todavía estabábamos tanteando todavía, se sienten esas esquinas más funky, sobre todo en los teclados… Igual los ritmos, muchas veces…

Bori: Es que, por ser Puerto Rico, tiene mucha respuesta musical de todos lados, entonces es como que incontenible que tengamos tanta influencia.

Hablando del público, ustedes han tenido oportunidad de viajar a varias partes del mundo, sobretodo han estado en Londres y Nueva York, ¿cómo son las presentaciones en esos lugares y qué tal es tocar para el público anglosajón?
Willy: Nueva York está lleno de latinos y si te digo latinos está más lleno de puertorriqueños que olvídate, entonces tenemos una base de fans que nos apoya y hace que otra gente pueda venir a conocer al grupo, entonces esto… no te puedo decir que se nos ha hecho fácil, pero siempre hemos tenido buena recepción del público por esa base de fanáticos latinos que nos apoyan. Con el pasar del tiempo hemos ganado muchísimo público, público que ni siquiera conoce el idioma.

Bori: Claro, porque como preguntas, el público anglosajón dentro de las primeras veces que fuimos a Estados Unidos, principalmente en Miami, conocimos personas que habían viajado más de cinco horas para poder vernos y que habían aprendido español por medio de nuestras letras, para poder entender de qué se trataba nuestra música y eso te cambia la vida. Obviamente tenemos más facilidad con el público latinoamericano porque nos entiende de una, pero la música es el idioma universal y sí se acerca mucha gente con respeto, además para ellos allá es algo exótico.

Siempre han tenido la política dentro de sus temas y la música siempre es un motor de cambio, ¿ustedes cómo ven el panorama actual en Puerto Rico? Y además, cada vez es menos la música que habla de política ¿creen que hace falta eso en las nuevas generaciones?
Willy: Creo que nos movió la realidad de Puerto Rico en un inicio, porque nosotros somos la única colonia que existe todavía y pues se le escondió un poquito poniéndole otro nombre, pero nosotros sabemos que somos una colonia, así que ese fue el motor de nuestros primeros discos, casi todo. Y para ese tiempo tampoco se hablaba mucho de política en la música, nosotros decidimos hacerlo y eso de cierta manera nos abrió a mucho público que necesitaba eso, pero también nos cerró muchas puertas. Creo que siempre es necesario, pero también pienso que no es como que para tu música tenga valor, tenga que tener un discurso siempre. Y sería aburrido si siempre se habla de política, es como si estuviéramos en una reunión, ni siquiera una fiesta, ¿sabes?, vamos pa’ la casa, te invito a comer y todo lo que hablamos es de política.

Bori: Todos estos cambios pasan por ciclos, de repente pasa un tiempo en que no pasa nada, la gente no demanda nada y todo lo que escuchan es cualquier cosa. Y de repente se toma consciencia y vuelve a salir gente que retoma eso y otra vez se cae…

Willy: De cierta manera necesitas hablar de los temas importantes, pero también necesitas música que te haga bajarte un poquito. Por ejemplo, nosotros tenemos mucha música que habla sobre lo que está pasando, porque siguen los mismos problemas, como a veces nos dicen: "¿por qué no hablan sobre la colonia?" Y bueno, ese tema es de hace quince años, ahí está. Entonces tú quieres siempre como músico, como escritor, exigirte cosas nuevas, sin embargo por la sensibilidad que tienes a lo que te rodea, pues siguen saliendo temas así sociales, como "Le da igual", nuestro último tema de producción, que quedó fuera de La Dulzura, porque la temática no iba con la propuesta y porque no se había terminado de cuajar la letra. Y pues quedó en un momento perfecto en que estamos en una situación crítica enconómica en el país, que de momento están creando un grupo, una junta fiscal que va a venir desde Estados Unidos a tomar las decisiones económicas en nuestro país y es muy fuerte.

Foto por Alex Díaz

Ustedes impactaron en México por el 99, ¿qué se siente ahora venir a tocar diecisiete años después con esta trayectoria?, ¿cómo sienten al público?, ¿ha cambiado?
Willy: Yo creo que el público se ha expandido bastante y esto también en color. Cuando empezábamos éramos como que más hippies, teníamos un grupo específico y hoy en día se ha diversificado bastante. Seguimos estando los hippies, los chamacos en general, los que van a la universidad y también mayores, familias completas que nos llegan a decir: “nosotros nos enamoramos con su música”, y cosas así, hay mucha variedad y es bonito ver cómo ya con el tiempo ya muchos chamacos dicen: “Vine al concierto con mi viejo porque a él le encanta su música, me robó el CD”. El público ha crecido bastante y eso es gratificante.

Cuál es la mejor experiencia que han tenido con un fan hasta ahora. Algo que les haya volado la cabeza, que tengan muy presente.
Willy: Yo una vez iba andando por Argentina y me saltó de momento una muchacha que yo como que brinqué porque me cogió desapercibido. Y bueno, me dice: “Disculpa, no te quiero molestar, pero ve, lo que pasa es que yo padezco mucho de ataques de pánico y ansiedad y las medicinas que me dan no me estaban haciendo nada y no fue hasta que escuché tu música que me pude tranquilizar; ahora cada vez que siento que me va pasar algo, pongo tu música y me relajo y es lo único que me ha curado”, y claro que ya solté la lágrima, fue increíble. Por ejemplo una vez también, hubo una huelga de estudiantes en Puerto Rico y pues nosotros íbamos en calidad de ex estudiantes, íbamos a protestar igual y nos dijeron que nuestra música había sido el motor, que ellos crecieron escuchándonos y que ahora que estaban en el momento de ser estudiantes, de ser los que deciden, era nuestra música el motor para ese movimiento. Son cosas que sí te vuelan la cabeza.

¿Qué se siente saber que esta gira es para celebrar sus veinte años de trayectoria?
Willy: Pasó un poquito más rápido de lo que uno pensaría. Tú sabes, veinte años parecen poco, pero para una carrera es bastante tiempo, los Beatles ¿qué duraron?, ¿como diez años? The Doors, yo creo que ni diez duraron, y son grupos memorables que pasaron influenciando mucha gente. La verdad sí tenemos que celebrarlo, no solamente es nuestro logro, sino el hecho de que la gente nos siga permitiendo hacer música. Y lo lindo es que no estamos celebrando de manera nostálgica, no es como que simplemente estamos recordando sino darnos cuenta que esto va viento en popa. No es como que somos unos viejitos y nos estamos retirando, sino que todavía falta mucho por venir y más grande. Ésa es la fiesta: estamos celebrando el porvenir.

Hablando de "Saca, prende y sorprende", ¿han notado un cambio la perspectiva sobre el consumo de marihuana?
Willy: Falta mucho reeducar, porque hubo muchos años de mala información sobre el consumo de la marihuana, entonces muchas personas crecieron pensando ideas erróneas y es muy difícil que les cambies la manera de pensar. Pero el hecho de que esto se esté volviendo algo mediático, de que la televisión y las noticias normales de repente te informen desmintiendo todas estas falacias que te habían vendido por tanto tiempo, pues ayuda a que la gente se vuelva más tolerante, por lo menos. Claro que el camino es largo, pero ya se siente que cambió bastante, tú sabes, en muchos países se ha legalizado y eso vuelve la conversación mucho más fácil. Antes era como que “No, no se puede”, pero ahora puedes decir: “esto está pasando en este país y en éste, no es que seamos unos locos”, y la gente se está prestando más a escuchar y a ceder, ¿no?

Bori: Nos hacen falta más campañas de educación contra la mala educación que se le dio a la marihuana.

Willy: Y realmente a fin de cuentas lo que quisiéramos, es que muchas veces lo que está pasando con la marihuana es que está moviéndose hacia una legalización controlada, hacia unos fines de control económico, de beneficio para las grandes empresas, y realmente lo que tiene que pasar es que la planta sea libre, porque es una planta, ¿no? Obviamente te la quieren controlar para ponerte impuestos y para que las multinacionales hagan dinero de otro producto, igual que nos controlan el agua, las semillas. Quieren seguir agarrando los recursos naturales para explotarlos y la marihuana debe llegar al punto en que sea libre. Pero para eso es paso a paso.

Foto por Alex Díaz

¿Cómo ven el futuro de la música en Puerto Rico?
Bori: Hay muchas cosas pasando buenas. Hay muchos músicos buenos. Pero no hay muchos conceptos fuertes y congruentes que tengan la capacidad para expandirse internacionalmente. Pero de que hay, hay. Hay música que se está haciendo buena. Como antes, como hace muchos años pasaba que era como tirar un maíz y vieras crecer una planta.

Willy: La música está volviendo a la auto gestión, las grandes disqueras están cambiando su manera de trabajar porque ya se dieron cuenta que internet se las comió y que las bandas por sí pueden hacer mucho ruido, por los medios sociales, y que ya no necesitan tanto de ellas. Obviamente siguen manejando los talent shows, los Grammy y eso… son realmente los shows de las disqueras y pues es difícil competir con eso. Pero ellos están cambiando, el público mismo está haciendo que ellos cambien porque ya no consumen. Pero la música siempre está existiendo, siempre se va a seguir haciendo música. En Puerto Rico hay muchísima música muy buena que casi nadie conoce y creo que eso es lo que va florecer próximamente.

¿Qué creen que haga falta?
Willy: Recursos, es que sí, la verdad es que sí se necesita dinero.

Bori: Recursos y foros.

Willy: Sí, lugares. En verdad es bien loco, porque en Puerto Rico, es cuna de demasiada música, a mí se me hace bien difícil decirle a alguien extranjero que venga de un lugar para ir escuchar música en vivo, yo no conozco, digo, igual porque ya estoy en una edad en la que no salgo tanto, pero de verdad que no conozco. Y sí hay mucha música pasando.

¿No hay conciertos cada fin de semana? ¿En serio no hay un foro donde siempre puedas escuchar música?
Willy: No.

Ya para terminar, ¿qué es lo que quieren que sus fans sepan de este tour?
Willy: Bueno, que estamos haciendo un recorrido por la trayectoria, justo en este momento en México estamos visitando las ciudades más grandes en festival, nada más. Porque queremos volver a final de año a celebrarlo con la gente en concierto. Por ejemplo, Monterrey, Guadalajara, aquí mismo en el D.F., bueno, CDMX [ríe] vinimos sólo a festival. Pero a fin de año, en Noviembre 12 vamos a estar en el Pepsi Center y lo mismo en Monterrey, Guadalajara, Tijuana, las ciudades más potenciales para nosotros, vamos a hacer conciertos ya de dos horas, largos, como siempre.