FYI.

This story is over 5 years old.

Música

All you need is <3: Una charla sobre emojis con Paul McCartney

Hablamos de la era digital con uno de los músicos más importantes que han pisado este planeta.

Ilustración por Nick Gazin

Pocos momentos antes de nuestra llamada agendada, la publicista de Paul McCartney me llama para darme un mensaje rápido: “Sí, perdón… No estamos seguros cuándo va a llamar. Está en ‘Tiempo Paul’ ahorita.”

Normalmente, un mensaje como ese puede ser un poco desesperante. Pero está bien, porque, pues este es Sir Paul McCartney, uno de los músicos más importantes que ha pisado este planeta. Es un caballero real y un Beatle y literalmente se han escrito libros sobre la elección de peinados a lo largo de su vida. Considerando que prácticamente cualquier persona en el mundo puede recitar la letra de alguna de sus canciones, podríamos decir que casi todo el mundo está en ‘Tiempo Paul’.

Publicidad

Eventualmente, como una hora tarde, me llama. Y me llama para charlar sobre emojis.

Sí, emojis. La razón por la que estoy hablando con un Beatle es porque recientemente se unió con Skype para crear unos emojis “de amor” titulados “Love Mojis”, los cuales fueron lanzados por la compañía para celebrar el Día de San Valentín este fin de semana. McCartney grabó música para cada uno de ellos, usando una guitarra, batería, sintetizadores, xilófonos y su voz en las composiciones. En primera instancia, todo esto podría parecer extremadamente raro, pero si lo piensas detenidamente, los emojis podrían ser una de las formas emocionales de comunicación más efectivas que hay hoy en día. Son como canciones de los Beatles para el teclado del teléfono. ¿Te sientes mal por un correo muy duro que le mandaste a alguien? Manda otro con una carita feliz. ¿Quieres que tu amigo entienda que el mensaje que le mandaste es sarcasmo? Mándale una carita feliz al revés. ¿Quieres sextear? Añádele una berenjena o un durazno ;).

“El único problema que vi en este proyecto fue cuando pensé, ‘¿Es esta una manera tonta de pasar mi tiempo?’ Seguro habrá personas que lo piensen, y me estoy poniendo de frente como el tema al decirlo yo mismo” dice el hombre de 73 años. “Pero, ¿por qué hago estas cosas? de vez en cuando hago cosas así, que sean un poco extrañas, fuera de lo normal. Y es justo por eso: porque no es lo que normalmente hago”.

Publicidad

Fuera de los emojis, a lo largo de nuestra charla de 17 minutos, McCartney me contó sobre cómo utiliza proyectos como este —u otros, como el trabajar con Kanye West— para mantenerse fresco creativamente. Lo cual debe ser todo un reto, considerando que su carrera lleva seis décadas, que ha grabado 60 discos de oro, ha vendido más de 100 millones de discos y más de 100 millones de sencillos tanto por su trabajo con los Beatles como por su trabajo solista. Pero claro, es Paul McCartney. No necesito sentarme a explicarles su importancia. Llamarle una leyenda no empieza sin quiera a describir su importancia.

Noisey: ¿Hola?
Paul McCartney: Hola Eric, es Paul, llamando desde Inglaterra.

Hola Paul, ¿cómo te va?
Bien. Espero que estuvieras esperando mi llamada, si no, me imagino que esto debe ser una gran sorpresa.

Sí la estaba esperando. ¿Cómo te va?
Bien, gracias. Acabo de llegar a mi estudio de grabación; estoy sentado afuera en mi coche, hablando contigo antes de entrar.

Muy bien. Bueno, siempre he querido entrevistarte, pero nunca creí que sería con motivo de algo como esto. Supongo que tenemos que hablar sobre emojis.
Sí, creo que de eso se trata.

¿Cómo pasó todo esto y de qué se trata?
Bueno, pues los muchachos de mi equipo saben que me gusta que me presenten ideas nuevas y saben que yo puedo decir que no me interesa. Algunos de mi equipo habían estado involucrados con una cosa en Japón con LINE —una especie de Whatsapp japonés— en donde hicieron algunos emojis de mí. Entonces los chicos japoneses tienen un dibujito de mí y se los pueden mandar a sus amigos diciendo “Perdón,” o “Te amo,” o lo que sea, el sentimiento adecuado expresado en emojis. Entonces ya más o menos sabía de qué iba esto. Me impresionó escuchar que hay 11 millones de personas usándolos, así que pensé “Eso está cool”. No era algo que realmente me interesara… yo sentía que si un mensaje de texto que estaba a punto de mandarle a alguien sonaba muy serio, sólo le tenía que poner una carita feliz o algo al final, pero nada más.

Publicidad

Claro, es lo que hace todo el mundo.
Así es, yo conocía los emojis y los usaba muy poco, pero los usaba. Entonces me intrigó el proyecto, fue como “Skype va a hacer estas cosas para el Día de San Valentín y quieren que los musicalices". Me mostraron las animaciones. Así que pensé “Bueno, OK, esto está cool”. Pensé que alguien lo iba a usar para mandarle un tipo de regalo virtual a su enamorada de la oficina. Visualicé todo esto pasando. Ya sabes, la pequeña animación muestra visualmente la animación con un te amo, un te extraño o lo que sea. Y al final en esa cosita hay un poquito de sonido.

Hoy en día el mundo está lleno de estos pequeños pedazos de audio. Justamente acaba de sonar uno en mi teléfono, que me acaba de avisar que me llegó un mensaje. Ringtones, cositas como esas. En fin, para no hacer la historia más larga, me intrigó bastante y dijeron, “Mira, te van a dar una lista de 20 emociones que les gustaría que expresaras con tu cara”. Yo dije “OK, déjenme ver si voy a disfrutar esto”. Entonces, el chiste era que tenían que durar menos de cinco segundos. Entonces se convirtió en un reto. Una canción puede durar unos tres, cuatro minutos. Si escribo una pieza orquestal larga, entonces puede durar una hora o algo. Lo que sea. Pero nunca me habían pedido que escribiera algo de menos de cinco segundos. Entonces ya me sonó la idea. Fue como “vamos a ver si puedo hacer esto”. Me metí en ello y fui por cada una de estas emociones que me mandaron. Y me di cuenta que era bastante divertido, un reto bastante grande. No me estresé, simplemente pensé “¡Es divertido!”

Publicidad

Es interesante. Si ahorita te pones a pensar qué canción pondrías cuando piensas “Te extraño”, ¿cuál sería? Ese era el reto. Y pensé que eso podría ser [empieza a imitar el sonido de la sirena de una patrulla] o lo que sea. Ya sabes, algo mejor que eso. Entonces fui una por una y les di mis ideas iniciales, y luego regresé a ellas. En algunos casos anoté ideas para escoger cuál creía que expresaba mejor esa emoción. Entonces hice eso y luego empecé a grabar otros sonidos sobre el instrumento inicial que había utilizado.

Es un poco raro estar hablando de esto, pero es muy interesante pensar cómo los emojis han cambiado la manera en la que nos comunicamos como humanos.
Lo es. Estoy contigo. De cierta manera da mucho miedo. Soy de la vieja escuela, yo le marco a la gente y espero hablar con ellos como estamos hablando tú y yo ahorita, con nuestras voces. Pero sabes como yo, que ya nadie contesta el maldito teléfono.

Exacto.
Sólo lo ven… y piensan, "Ah, mejor dejo eso para después" o lo que sea. Digo, esto me pasa con mis hijos. Entonces les mando un mensaje de texto. Es mucho más probable que vean eso. Y entonces hay ocasiones en las que sólo pones “emoji de beso, emoji de beso, emoji de beso”.

Es casi como un lenguaje nuevo.
Sí, estamos hablando el uno con el otro. Digo, sin contar cuando la gente sólo usa letras, como “K” y todo ese nuevo lenguaje. Digo, me siento mal por Shakespeare.

Publicidad

¿Tienes un emoji favorito?
¿Uno favorito de los que ayudé a crear?

En general.
Hay uno llamado "lust" del que pensé “OK, ese está intrigante”. Pero me gustan todos. Quise que fueran diferentes, pero que al mismo tiempo tuvieran una especie de continuidad entre ellos. Entonces tienen una especie de firma o línea, de la misma manera en la que si vas a un aeropuerto hay una especie de continuidad, sabes que te están hablando sobre un vuelo. Entonces ese es el mundo en el que me encontraba. Y pasé cinco días haciéndolo, armando todo, afinando detalles. Estuvo bien. Pude trabajar con muchos instrumentos y mi voz, y junto con mi ingeniero interior nos divertimos bastante. Jugamos con ellos y luego ensamblamos todo. Creo que en Skype van a usar diez al principio y luego creo que va a haber otra ola. Entonces vamos a ver cuáles utilizan. Espero que utilicen mi favorito.

Seguramente es interesante para alguien con tu perspectiva… Tu carrera se ha basado en básicamente en escribir canciones de amor y otras cosas, utilizando el inglés para crear frases bellas. Y ahora está este extraño movimiento —especialmente entre personas de mi generación— de usar emojis para expresarte, y estás escribiendo música para emojis. Tiene que ser una perspectiva extraña.
Absolutamente. Como decía, me empecé a dar cuenta en Japón, cuando se empezó a crear este tipo de tecnología. Y te empiezas a dar cuenta cómo a la gente, especialmente la gente joven, le gustan estas cosas. Y de pronto yo los estaba utilizando. El único problema que vi en este proyecto fue cuando pensé: "¿Es esta una manera frívola de pasar mi tiempo?" Seguro habrá personas que lo piensen, y me estoy poniendo de pechito al decirlo yo mismo. De vez en cuando hago cosas así, que sean un poco extrañas, fuera de lo normal. Y es justo por eso: porque no es lo que normalmente hago. Y eso significa que tengo un pequeño periodo de tiempo haciendo algo que no hago normalmente —este pequeño proyecto o música para una película u otra cosa— y me pasa que cuando regreso a escribir una canción normal, entonces estás un poco más fresco, no sólo estás sacando una canción tras otra. Refresca tu manera de hacer las cosas. Entonces es bueno, hace que lo que haces normalmente sea atractivo una vez más. Es como esquiar —cuando te sales del camino, se siente bien regresar a la pista principal.

Publicidad

Siempre es interesante hablar con músicos con legados tan importantes que han hecho música por décadas, y que siguen refrescándose a sí mismos o continúan haciendo cosas creativas. Porque es como seguir escalando una montaña, y me imagino que eso puede llegar a ser un reto más grande entre más tiempo pases haciéndolo.
Sí, creo que eso es cierto. Creo que cuando empiezas, tus ideas son, obviamente frescas, todo es fresco, todo lo que está pasando es nuevo. Pero gradualmente se vuelve menos fresco, menos nuevo. Y el peligro ahí es —o lo que le pasa a mucha gente— que se aburren o se hartan y empiezas a hacer lo mismo una y otra vez. Entonces, para mí, cuando llegan este tipo de cositas… Es como hace poco que trabajé con Kanye West, y por un momento pensé “¿Es esto algo que quiero hacer, o algo que tengo que hacer?” Así que pensé sobre ello y dije “¿Por qué no?” Por lo menos es un personaje interesante.

Por supuesto. ¿Cómo fue trabajar con él?
Bueno, ya sabes, tiene un talento increíble. Es un tipo loco con su talento, pero lo amo. Es muy talentoso. Trabajar con él es completamente diferente de como yo trabajo, así que fue muy distinto. La verdad sólo le botaba varias ideas y lo dejaba para que trabajara en ellas. Y él gradualmente me mandaba estos tracks, uno de los cuales, "All Day," está nominado para un Grammy, Canción del Año. Y eso vino de una melodía que el enseñé y una historia que le conté. Y aunque la melodía que le mandé era muy bonita, regresó como un himno urbano. Pero fue muy intrigante ver que eso es lo que nació a partir de nuestra colaboración. Y luego "Only One," esa nació a partir de algo que estábamos hablando. Entonces eso es lo genial de todo esto, que te mantiene fresco y, aunque siempre va a haber gente que te diga “No entiendo por qué hiciste eso,” es como cuando alguien dice “Me voy de gira” y alguien más dice “No entiendo por qué vas.” Porque en su manera de ver las cosas —que obviamente no es la mía— es estar en un camión, comiendo comida fea, pasándotela mal, no vendiendo todos tus boletos, y cosas así. Pero si te gusta como a mí, entonces no es solo eso; es algo muy atractivo. Y creo que la idea detrás de hacer todos estos proyectos raros es mantener las cosas frescas. Esa es mi historia y con eso me quedo.

¿Te llega a dar miedo o sientes un reto el regresar a hacer cosas distintas y creativas? Me imagino que son decisiones que tomas adrede, como las que mencionas: trabajar con Kanye, hacer un proyecto como este en el que te revitaliza un poco. Pero, ¿alguna vez has tenido miedo o has dudado cuando tienes que hacer algo así, como “Uff, tengo que hacer esto otra vez.”? ¿Cómo lo superas?
Creo que eso sólo es parte del proceso creativo. Tuev un sobrino que decidió que iba a pintar, pensó que sería algo catártico. Me dijo que era aterrador. Como, “Dios mío, esto está quedando bastante mal. ¿Qué estoy haciendo? ¿A dónde está yendo esta pintura? ¿Ya la acabé? ¿No?” En realidad es sólo parte del proceso, y viene con el trabajo. Así que sí, siempre va a haber ese temor de no poder hacer las cosas, pero lo supera el sentimiento de sentirte afortunado de poder hacerlo. Veo a una canción y es un hoyo negro que no tiene nada, pero que en tres horas va a tener un planeta. Voy a sacar algo de ese hoyo negro. Y eso es muy emocionante, ¿sabes? Entonces, eso me gusta. Pero siempre existe un temor relacionado con el hundirte en ese hoyo negro.

Me imagino.
Estamos usando muchas metáforas. Hoyos negros y de todo.

Eric Sundermann cumple años el mismo día que Paul McCartney y es el editor en jefe de Noisey Estados Unidos. Síguelo en Twitter.