Artículo publicado por VICE México.Terminar una relación para bien o para mal nunca es bonito. A menos de que haya sido una relación abusiva que se tenía que cortar de tajo, la realidad es que nadie sabe cómo aproximarse a la idea de que, seguramente, herirán los sentimientos de su pareja por ya no querer estar con ella.El problema es que, dada la naturaleza humana, todos constante e irremediablemente la cagamos —o no tenemos el interés de mantener una relación de cordialidad mínima con una persona por la que perdiste el respeto completamente—. Me sucedió que después de mucho tiempo comprendí que una persona con la que intenté repetidamente terminar bien, no tenía interés alguno en poner algo de su parte para que fuera así. Como consecuencia, entre muchas otras razones, la situación terminó como un sinregistro de nuestro paso. Tal vez fue para lo mejor, pero la realidad es que no tengo idea de qué podría haber dicho ella con respecto a la misma situación. El punto es que para romper con alguien todos somos una basura; todos tienen la culpa y, por lo mismo, nadie la tiene.
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Buscando redimir mi propia historia le pregunté a personas la peor manera en que habían terminado una relación. Unas historias son largas, otras cortas, pero todas son feas. Sin importar si eran el cortante o el cortado, los testimonios demuestran inequívocamente que la madre de todas estas terribles situaciones está entre la indiferencia y la rabia.
Estábamos en Puebla, habíamos ido a tomar un curso en un museo. Era una especie de reencuentro. Y de pronto, sin más, después de una charla en la que habíamos acordado mejorar nuestra relación y dejar atrás ciertos vicios compartidos, me confirmó con sinceridad que había cogido con alguien más y que, además, no llevaba dinero para pagar las cosas. "Sólo quería hablar con honestidad", dijo. Y así, sin más, le arrojé la copa de vino y dejé sólo mi parte de la cuenta.Nos volvimos a encontrar por cuestiones académicas y laborales, pero nos volvimos invisibles mutuamente. Fue horrendo en su momento, pero mi ira se desbordó. Solo le dije al final: “vete a la mierda, por favor”.León, 34 años.Lancé su celular por el balcón y luego la fui a dejar a casa de la persona con la que me engañaba, después me fui a clase de Latín, todo me quedó de paso.Paulina, 24 años.Tramité todo para trabajar en un barco por 9 meses… le dije 2 días antes de irme para ahorrarme dramas.Lucía, 26 años.
Le aventé una copa de vino en la cara
Destruí su celular
Dos días antes de irme
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Lo corté y lo vomité también
Mientras salía de la ciudad
El pesero
Terminando el velorio
Me persiguió en su coche
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Lili, 22 años.Antes de su defensa de tesis.Zenón, 30 años.Cambió su estatus en Facebook a "Soltera" sin avisarme. Estaba en la playa y no traía computadora ni celular. Me enteré que ya no estaba en una relación porque un amigo me avisó tres días después.Gabriel, 25 años.
Él era super posesivo, celoso y manipulador. Realmente todo ese colmillo le salió conforme andábamos. Total, un día me la hizo de jamón porque no quise salir con él, quería un día para mi misma, siendo que todos los pinches días de la semana lo vi por muchas horas. Me terminó convenciendo de pasarla con él, pasó por mi a mi casa y fuimos a su depa.Él tenía unos patines nuevos y me los estaba probando mientras platicábamos que peli mirábamos o que pedíamos de comida. “Ah, ahora si te interesa estar conmigo” me dice. La verdad que me ganó el coraje de estar con semejante pelmazo. Agarre los patines, me los quité, los aventé al suelo y le dije “Ya no quiero andar contigo, ya estuvo, llévame a mi casa”. El se quedó serio y continué: “Voy a ir a tu cuarto por los libros que te presté y cuando regrese me llevas”. Fui por mis libros, me regresó a mi casa y ya estando frente a ella me quizo convencer de que la cagó y no se qué. Lo mandé a la mierda y esa noche dormí feliz y tranquila.Mariela, 25 años.Me invitó a salir y le dije que no porque tenía que ir a mi terapia psiquiátrica porque tenia problemas mentales. Lo cuál era mentira, sí tengo problemas mentales pero los exageré para que se espantara.Regina, 25 años.
Tesis
Vía Facebook
Me ganó el coraje de estar con semejante pelmazo
Problemas mentales
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Pelea en el metro
Sergio espera terminar bien su próxima relación en Instagram.