FYI.

This story is over 5 years old.

astrologia de la liberacion

Astrología de la liberación

Lo que le funcionó a los heroicos curas salvadoreños o brasileños de los años sesenta, puede funcionar para nuestra frívola sociedad necesitada de autoridades sobrenaturales y no demasiado claras.

No es que seamos tontos, sólo estamos un poco confundidos. Nuestro pedazo de mundo va rompiendo uno tras otro los récords regionales de pobreza e indigencia (y también de riqueza, gracias a los méritos del señor Slim). El movimiento obrero se ha convertido en la pera de boxeo de jueces y legisladores. Ninguna figura pública osa plantear nada distinto a un recambio en la administración de la esclavitud. Y aun esto produce escándalo. La ley consagra derechos laborales que se rompen abiertamente en cada oficina, cada fábrica y cada empresa. Por mucho menos que eso, los países civilizados arden. Pero nosotros, que no somos inflamables, nos limitamos a poner cara de perplejidad. Oteamos el horizonte con la esperanza de ver llegar la caballería. Pero nada. Necesitamos desesperadamente la ayuda de un deus ex machina que nos señale el camino. Y en realidad sabemos de sobra cuál es el camino, sólo que necesitamos los ánimos de un poder superior que nos exima de la responsabilidad de seguirlo. Tenemos las orejas, sólo necesitamos la pluma de Dumbo.

Publicidad

Siempre me pareció que las enseñanzas de la teología de la liberación eran en general  bastante razonables, aunque nunca entendí la necesidad de mezclar al buen Dios en temas tan ajenos a su incumbencia. Si nunca le preocupó la pobreza del mundo, ¿por qué iba a preocuparle ahora? Por otro lado, si utilizar la palabra “teología” funcionaba para defender los derechos humanos en una aldea guatemalteca o para criticar el reformismo del Partido Comunista colombiano, pues santo y bueno. Nunca oí que Dios se quejara. Después de todo, es perfectamente cierto que una biblia puede detener una bala, siempre esté forrada de acero.

¿Se ha fijado usted que basta con poner una de las doce palabras de los signos zodiacales, escogida al azar, delante de cualquier sentencia, para conferirle a ésta cierta autoridad mística muy en boga? Por ejemplo, Tauro: No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. O bien, Capricornio: come frutas y verduras. Así que, ¿por qué no usar este inofensivo mecanismo para legitimar otro tipo de verdades más peliagudas? Lo que le funcionó a los heroicos curas salvadoreños o brasileños de los años sesenta, puede funcionar para nuestra frívola sociedad necesitada de autoridades sobrenaturales y no demasiado claras.

Así pues, seamos más modestos. No quisiéramos responsabilizar al manso Jesucristo de estas recomendaciones tan poco cristianas, pero en cambio nada impide asociarlas con los astros, que nos miran desde el cielo con perfecta indiferencia. Como dijo Roque Dalton, está bien creer en las predicciones de la astrología, siempre que coincidan con las del materialismo histórico. Bastante mal han hecho los doce parásitos del Zodiaco; ya es hora de que sirvan para algo útil y no sólo para estafar a los crédulos.

Al reconocer francamente que los astros en realidad nada tienen que ver en esto y que la aplicabilidad de cada horóscopo es independiente del signo al que va dirigido, nuestra astrología es la única que no miente. Pero como en este mundo mentir es la norma y la verdad es monopolio de los cínicos, ningún medio medio-decente osaría publicar sus horóscopos y la Astrología de la Liberación no pudo existir hasta ahora sino como un fantasma que recorre tuiter. Pues bien, ya es hora de darle a este fantasma un soporte mayor a los 140 caracteres.

Espera tus horóscopos semanalmente en este mismo medio. Si se forran de acero, les garantizo que detienen balas.

Sigue a Óscar en Twitter:

@OdePablo