El Subcomandante Marcos deja de existir

Imagen vía.

Rafael Guillén, mejor conocido como el Subcomandante Insurgente Marcos, parte del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), anunció el 25 de mayo del 2014 después de reaparecer un día anterior en un homenaje a un compañero caído, que Marcos dejaría de existir.

A través de un comunicado titulado 'Entre la luz y la sombra', el líder y portavoz del EZLN realizó una mirada introspectiva y hacia atrás sobre quién había sido el SupMarcos —como se le llamaba— y dijo ya no es 'una botarga o un holograma', sino tan sólo un profesor universitario originario del 'ahora doloroso' Tamaulipas. Un personaje creado por los zapatistas y admitió que pasó de ser un vocero a un distractor.

Después de varios años en que el Subcomandate Marcos tuvo una presencia intermitente, el sábado 24 de mayo hizo una reaparición durante una ceremonia de honores a Galeano, un zapatista asesinado el 3 de mayo en una comunidad de los altos de Chiapas llamada La Realidad Trinidad, en el municipio de Las Margaritas.

José Luis Solís López, conocido como Galeano, vivía en La Realidad y fue maestro de la Escuelita Zapatista, una escuela con su propio modelo educativo autónomo en cuatro municipios del EZLN en Chiapas. También fungía como líder de la Junta de Buen Gobierno, pero el 3 de mayo falleció por  pedradas, balazos y machetazos por parte de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC) a quienes acusan de ser del Partido Verde Ecologista Mexicano (PVEM) y del Partido Acción Nacional (PAN).

Un ataque que los zapatistas después explicaron se trató de una emboscada por parte de paramilitares y acusaron al gobierno de Chiapas, así como al gobierno federal de lo que consideraron como una agresión 'con alevosía, premeditación y ventaja', a pesar de que los medios nacionales lo reportaron como un enfrentamiento entre Zapatistas y los miembros de la CIOAC.

Imagen vía.

De Marcos se especuló mucho durante los años. Que si era rico, recibía órdenes del ex presidente de México priista Carlos Salinas de Gortari, que si tenía cáncer terminal o si no vivía en Chiapas y sólo era la imagen del movimiento.  Lo cierto es que en el último comunicado emitido, Rafael Sebastián Guillén, nombre del líder detrás del pasamontañas, calificó como rumor la información sobre una supuesta enfermedad y lo llamó 'el último gran truco del holograma': simular una enfermedad terminal y 'todas las muertes que padeció'. Además justificó que si alentaron esos rumores, fue porque así convenía.

'Si me permiten definir a Marcos, el personaje, entonces diría que fue una botarga' al parecer Rafael Sebastián Guillén Vicente, procedente de Tampico, se desprende de quien alguna vez tomó la personalidad y a quien definió en 1994 como 'gay en San Francisco, negro en Sudáfrica, asiático en Europa, chicano en San Isidro, anarquista en España, palestino en Israel, indígena en las calles de San Cristóbal, chavo banda en Neza, rockero en CU, judío en Alemania, pacifista en Bosnia, mapuche en los Andes, maestro en la CNTE, artista sin galería ni portafolios, ama de casa un sábado por la noche en cualquier colonia de cualquier ciudad de cualquier México".

Rafael Guillén, que estudió filosofía y obutvo mención honorífica en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), evocó también el principio de su lucha en el EZLN desde febrero de 1995 y fue identificado como uno de los líderes principales del Ejército. Representó también, con su pipa de tabaco, la tela negra en la cara, los ojos claros y la piel morena, un sex symbol que emitía irónicos comunicados. También era entrevistado por los medios, escritores e intelectuales como Eduardo Galeano y Noam Chomsky, lo que lo convirtió en el mítico líder revolucionario enmascarado que vivía en la selva chiapaneca.

Sin embargo, explicó en el comunicado, 'hemos decidido que Marcos deje de existir hoy' y enfatizó que quienes entiendan, al final 'sabrán que no se va quien nunca estuvo'. Informó que a las 2:08 horas del 25 de mayo del 2014, 'deja de existir el Subcomandante Insurgente Marcos' y aclaró que por su voz ya no hablará la del EZLN y al final del escrito, firma el nombre de Subcomandante Insurgente Galeano, 'desde las montañas del Sureste Mexicano'.

Y aunque la carta se prestó para varias interpretaciones por parte de los medios como que Rafael Sebastián o el subcomandante decía adiós al EZLN, la parte destacable es donde recuerda que el 21 de diciembre del 2012 durante la Marcha del Silencio, miles de zapatistas de las diferentes comunidades chiapanecas pueden 'hacer ruido' sin necesidad de un sólo portavoz o una imagen, pues no hubo un discurso ni un pronunciamiento de líderes. Si no los zapatistas en conjunto.

Y no sólo los zapatistas encontraron en el Subcomandante Marcos a un líder y a un representante, también muchos mexicanos vieron a una figura débil y pobre al no plantarse como una oposición fuerte en la política, aunque nunca se pronunció como tal, más que Subcomandante Marcos del EZLN. Así como existió la comandanta Ramona y existe el subcomandante Moisés, pues ellos mismos han declarado que 'para rebelarse y luchar no son necesarios ni líderes ni caudillos ni mesías ni salvadores'.