La ciencia confirma que las personas obesas tienen menos probabilidad de ser considerados sospechosos de un delito

Como soy un hombre que vive con el temor constante de pasar por un puente y que una cámara de seguridad reconozca el ancho de mi cintura con un acercamiento en HD y usen mi foto en las noticias como una imagen de archivo para un informe sobre la obesidad en el país —"En las últimas noticias", dice un locutor con cejas de azotador que luchan por la supremacía de su frente, mientras mi panza y mi playera apretada oscilan con toda su grandeza en la pantalla del fondo, "los hombres son cada vez más gordos, mueren en manadas, se tropiezan en la calle, se caen, mueren y su cuerpo hace un sonido estrepitoso antes de morir"—, confieso que me alegró mucho la noticia de que, según la ciencia, la mayoría de la gente cree que las personas con sobrepeso son "demasiado gordas" como para cometer un delito. Planeo usar este conocimiento para robar Kit Kats en las tiendas y devorarlos sin compartir. Planeo usar mi capa de invisibilidad hecha de grasa para robar las medicinas para los problemas cardiacos que algún día voy a necesitar sin tener que pagar la consulta.

Un estudio realizado por la Universidad de South Bank de Londres reveló que sólo el 10 por ciento de las personas consideran que los gorditos son capaces de cometer un delito y que la mayoría creemos que es más probable que un tipo musculoso nos pegue con un bate de beisbol y nos deje en un basurero o algo así.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores le mostraron a los participantes dos videos de la reconstrucción robo con violencia y les pidieron que observaran las fotografías de cuatro sospechosos —uno con sobrepeso, uno musculoso y dos flacuchos— que en realidad no tenían nada que ver con el delito. En el video se tapó el rostro del criminal y las fotos de los sospechosos fueron elegidas al azar, por lo tanto, la única forma de señalar al responsable era basándose en el tipo de cuerpo.

Y qué creen: el 51 por ciento de los participantes señalaron como culpable al más musculoso, 37 por ciento señalaron a los tipos promedio y sólo el 10 por ciento señalaron al gordito. Por fin ser musculoso es malo. Toma esa, Roy del gimnasio. No vas a poder salir de la cárcel venciendo a todos en fuercitas, ¿o sí? No vas a poder levantar pesas gigantes con el poder de tus fabulosos brazos broceados, ¿o sí? ¡Por fin ser gordo es cool! ¡Es malo consumir proteínas en vez de donas!

La experta en criminología Julia Shaw cree que la gente con sobrepeso se aprovecha de su condición para pasar por encima de la ley. Los gordos exhiben sus enormes torsos desde las ventanas de sus autos caros y conducen a toda velocidad sin pagar sus multas, los gordos se toman la molestia de subir las escaleras para hacer fraudes con PayPal, los gordos lanzan piedras para romper la ventana de una patrulla y lo logran al tercer intento porque no tienen mucha fuerza en los bíceps, etcétera. "Los estereotipos del tipo de cuerpo no permiten que se imparta justicia", dijo Shaw. "Nuestro descubrimiento indica que si eres inocente del delito que se te acusa, tus músculos podrían causarte serios problemas".

"El tipo de cuerpo se considera un factor de discriminación y casi nunca se ha examinado en contextos legales. Esta investigación prueba que el tipo de cuerpo de un sospechoso podría influir parcialmente en la declaración de los testigos".

Como sea, en resumen: la próxima vez que robes un banco o algo sí, olvídate del pasamontañas y mejor ponte una almohada bajo el suéter. Grita lo difícil que es encontrar pantalones que te cierren cuando vas caminando por la calle en lo que te subes al auto y escapas. Comete una hamburguesa mientras lanzas balas al aire. La policía nunca te va a encontrar.

@joelgolby