​Fotos por Paulina Munive​.
Fotos por Paulina Munive.

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Bye manteconcha: llegó el Pitufitamal a romper las redes

Probé el controvertido tamal azul y aquí está mi veredicto.
PM
fotografías de Paulina Munive

A los habitantes de la Ciudad de México se nos puede acusar de muchas cosas, pero de faltos de inventiva y de creatividad, especialmente en cuanto a lo culinario se refiere, jamás. Es por esta peculiar característica que hemos sido bulleados por el resto de los estados de la República, pues cuando parece que ya lo hemos inventado (o reinventado) todo, siempre hay alguna novedad gastronómica que vuelve a sorprendernos y a levantar ámpula. Y eso fue lo que hizo el famoso “Pitufitamal” hace unos días, que gracias a su estridente color azul, se robó la atención de muchos de los internautas. Este polémico tamal, que debe su nombre a una caricatura que fuese muy famosa allá por los años ochenta, ya cultivó opiniones encontradas con respecto a si es un postre que se antoja o algo que se sumaría a la lista de “aberraciones” que parecen pulular en los antojitos.

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Pero vaya: es muy fácil juzgar sin antes probar, así que antes de emitir un veredicto decidí hincarles el diente, además de charlar con su creador, el fundador de la tamalería ‘Tamale Mio’: Omar Baraga.

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VICE: ¿En qué consiste ‘Tamale Mío’ y en que se diferencia de otros lugares de tamales de la Ciudad de México?
Omar Baraga: Estos tamales no son gourmet ni pretenden serlo, más bien son una forma divertida y diferente de comer tamales. Los tamales salados, por ejemplo, van salseados. Tenemos seis tipos de salsas que son de chipotle, habanera, frijol, morita, rojo y verde. Y en cuanto a los tamales dulces, estos son completamente diferentes a como los podrías encontrar en cualquier otro lado. Estos tamales son muy coloridos, lo que hace que les gusten mucho a los niños, o a las personas mayores pero con alma de niño.

¿Cómo está la onda de los tamales salseados? ¿Es algo así como un “tamal ahogado”?
Sí, tú llegas y pides tu tamal y puede ser de verde, mole, rajas, frijoles con queso, chilorio o cochinita. Y luego eliges una salsa, los bañamos en cualquiera de las salsas de las que ya te hablé y eso hace que se redondee y se resalte el sabor y además le quitamos lo seco al tamal.

La salsa es lo que permite que se reblandezca y tenga un sabor y consistencia distinta. Y han gustado mucho: la gente que viene, repite, porque les gusta mucho la onda de salsear su tamal. Es algo diferente.

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Hablando de diferente, vamos a lo que me trajo hasta aquí que son los tamales dulces que tienen en la carta.
Eso buscamos desde el principio, que fueran un golpe a la vista. Yo soy diseñador gráfico, así que me gusta mucho jugar con los colores y gracias a eso es que han gustado tanto entre los niños. Además son sabores muy simples: mora azul, frambuesa, chocolate. Digamos que el color es el gancho, pero el sabor para nada es chocante para el paladar.

Y veo que tu carta está influida por personajes de la cultura pop…
Sí. Tenemos tamal de Snoopy, que es de Cookies & Cream; tenemos el Tamal Minion que es de banana; El tamal Unicornio o el Tamal Venom, de chocolate blanco y chocolate oscuro. Ese es muy chistoso porque le acabamos de dar un “relanzamiento”. Ya lo teníamos desde el año pasado, pero ahora con el estreno de la película lo volvimos a impulsar. También tenemos el Tamal Evil, que es de uva. Son sabores de tamal que no se encuentran en ningún otro lado. El Tamal Unicornio es de Frambuesa, mora azul y fresa, o el Napolitano que también es trisabor: de chocolate, vainilla y chocolate.

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Ahora háblame del famoso Pitufitamal, que tanta polémica ha levantado en redes. ¿Cómo les ha ido con él? ¿De qué es?
¡Jaja! Pues mira, nos ha ido muy bien. Fue de los primeros que lanzamos jugando con los colores. Además de que el tamal es de un azul muy intenso. Tiene una jalea sabor chicle.

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¿Cuáles han sido los comentarios de las personas que lo prueban?
Pues fíjate que la gente que los ha probado los ha recibido muy bien. Claro, es que también la gente viene mentalmente preparada para probar algo diferente, que es lo que nos distingue, entonces tampoco los sorprende negativamente.

¿Y siguen preparando sorpresas?
Sí. De hecho ahorita todavía no está en la carta oficialmente, pero acabamos de crear el tamal de m&m’s, así que pronto estará dentro de las opciones de tamal dulce.

¿Qué les dirías a los que no los han probado pero que ya se formaron una opinión?
¡Que vengan! Estamos muy cerca de la estación de Metrobús José María Velasco y abrimos de lunes a domingo. Pueden checar nuestros horarios en nuestro Facebook. Pero sobre todo, que se abran a experiencias diferentes, porque se pueden llevar muy gratas sorpresas. Ah, hablando de apertura, este es un lugar muy friendly con todos, con la gente de la diversidad, con las personas que traen mascotas, etcétera. Aquí todos son bienvenidos. De hecho estamos pensando en hacer un tamal arcoíris para la gente de la comunidad gay, pero es un reto meter tantos colores y sabores en un solo tamal, jeje.

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***

Le agradezco a Omar por la entrevista, pero es la hora de la verdad: es momento de probarlos. Curiosamente, es el tamal más controvertido de la carta el que más me gusta y al que le daría la nota más alta de todas: el Pitufitamal. La salsa de chicle le da un toque muy poco convencional y el paladar lo agradece. Prueba superada. Pero vaya, si eres menos arriesgado, puedes optar por un Napolitano, uno de Snoopy o uno de Minion, cuyo sabor a banana recuerda a los chicles ‘Motita’.

@PaveloRockstar