Este comediante canadiense debe pagar 42.000 dólares por burlarse de un joven enfermo

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El comediante franco-canadiense Mike Ward planea luchar contra la orden que lo obliga a pagar miles de dólares a un chico con discapacidad, quien fue blanco de sus chistes.

"Incluso Rocky perdió su primera pelea. Vamos a apelar", publicó el comediante en su página de Facebook el miércoles por la noche, afirmando que era "un día triste para la libertad de expresión".

El fallo, emitido por el Tribunal de Derechos Humanos de Quebec, exige que Ward pague 25.000 dólares por daños morales, y 10.000 dólares más por daños severos a Jeremy Gabriel, quien sufre el Síndrome de Treacher Collins, una enfermedad que causa deformaciones en los huesos y tejidos del rostro. El comediante hizo una broma sobre Gabriel en un show en 2010, reportó la CBC. También tendría que pagar un total de 7.000 dólares por daños a la madre del joven.

El Tribunal le dio la razón a Gabriel, afirmando que Ward había infringido el derecho a mantener su discapacidad, honor y reputación a salvo de la discriminación, y rechazando la defensa del comediante, la cual explica que "existe una clara diferencia entre hostigamiento hacia un persona y el trabajo artístico producido frente a una audiencia dispuesta", informó Canadian Press.

La familia del joven de 19 años que ganó reconocimiento en Quebec después de haber ido a Roma para cantar frente al Papa en 2006, presentó una queja en 2012 sobre la pieza presentada en el especial de comedia de Ward, en el cual se burló de varias personas que, según él, generalmente no son usadas como material creativo por otros comediantes.

El chico que logró cantar para el Papa, petit Jeremy, como lo llamó Ward, es una de esas personas. Al inicio Ward dijo que se sentía feliz por defender a Gabriel de otros que se burlaban de él, y que tenía la impresión de que era un niño con una enfermedad terminal, al que le había sido otorgado un último deseo por una fundación.

"Pero cinco años después no está muerto, no está muriendo", decía con ironía sobre el escenario. "El pequeño bastardo simplemente no está muriendo".

Gabriel no podía ser asesinado, continuó Ward, bromeando con que él ya había intentado deshacerse de él sin éxito, y que cuando buscó información de la enfermedad del chico, encontró que simplemente era "feo".

Gabriel, quien no pudo ser contactado para entrevistarlo, testificó ante un tribunal, señalando que la pieza de comedia dañó su carrera y su autoestima, y que además sufrió bullying en la escuela. En septiembre, dijo que había intentado suicidarse después de ver el video.

"Tenía 12 o 13 cuando vi los videos", informó Gabriel a CBC. "No tenía la madurez para enfrentarlo; perdí confianza y esperanza. Me hizo sentir que mi vida valía menos que la de los demás porque tengo una discapacidad".

Pero Ward se defendió diciendo que el bullying probablemente comenzó antes de que hiciera las bromas, y que no podía ser responsabilizado por todo lo que le ha sucedido a Gabriel. Agregó que si la familia del cantante se hubiera dirigido directamente a él, habría dejado de hacer chistes.

"Hago comedia para hacer reír a la gente, no para herir sus sentimientos", dijo a VICE News en febrero.

Ward atajó los reflectores sobre el caso después de haber salido del festival de comedia en Montreal, donde repitió la broma que lo puso en problemas, reportó la CBC.

"Eso demuestra que Mike Ward no entendió la razón de la queja y la decisión del tribunal", dijo Gabriel a la CBC.

Varios comediantes han levantado la voz en apoyo de Ward desde que el fallo se dio a conocer, apelando a la libertad de expresión.

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