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UFC 197: La receta del espectáculo

El regreso de Jon Jones trae la luz principal, pero apenas es el último detalle de la gran cartelera de UFC 197.
Djatmiko Waluyo

Hay un aura extraña rodeando a Jon Jones. Hay tantos elementos rodeando su persona que podrían lo podríamos catalogar con facilidad como el chico malo de UFC por excelencia. Entre los problemas con la ley, altercados físicos frente los medios y el público general, publicaciones borradas en redes sociales que parecían comprometedoras, y una sonrisa que juega entre el sarcasmo y la auténtica diversión, Jon Jones además es una de las figuras más dominantes que ha tenido UFC. Jones es un atleta increíble. Su físico es un tema constante, pero son sus habilidades de controlar los combates en cualquier instante, como si le arrebatara cualquier ánimo de sus contrincantes para seguir su lucha ante él, Jones también es una estrella en todos los sentidos. UFC 197 celebra el regreso de Jon Jones, una pelea de título entre Demetrious Johnson y Henry Cejudo, una intrigante batalla que pinta para ser un espectáculo puro entre Anthony Pettis y Edson Barboza, y varias figuras más que incluyen al ascendente mexicano Yair Rodríguez.

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A pesar de tantos peleadores y combates atractivos en la cartelera de UFC 197, Jon Jones sigue siendo el centro de atención, y no importa que su pelea estelar tiene un faltante tras la ausencia de Daniel Cormier debido a lesión. Y aunque los títulos interinos parece que se andan lanzando cada semestre en UFC, no ha generado mucha polémica el tema el hecho de que Jones ahora estará compitiendo por uno contra Ovince St. Preux, un peleador discreto que habla con una voz tímida y reemplaza a Cormier con la oportunidad de su vida. Jones declara una y otra vez lo contento que está con esa sonrisa constante, y asegura que le debe a los fans que lo siguen vitoreando y aplaudiendo a pesar de sus meses fuera de combate por polémicas que rebasan el deporte y coquetean con la ilegalidad, y sobretodo la irresponsabilidad. Es con lógica que Jones se siente en deuda con los fans, pero Jones también se ha ganado su lugar a base de genialidad impresa sobre el octágono.

Pocos le dan el beneficio de la duda a Ovince St. Preux, también conocido como OSP. Hijo de inmigrantes haitianos, OSP ha sido un gran atleta toda su vida, y aunque no logró establecerse como jugador profesional de futbol americano, encontró un llamado en las artes marciales y su camino por el MMA ha tenido momentos de impresionantes desempeños como derrotas complicadas. Sin duda el noquear a Mauricio "Shogun" Rua en 34 segundos destaca como ninguna otra cosa en su récord, y representa la peligrosidad que tiene el peleador.

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Momentos antes del regreso de Jones, estarán dos de los peleadores más veloces y técnicos de UFC: Demetrious "Mighty Mouse" Johnson, el campeón completamente indiscutido de peso mosca, y el mexicano-estadounidense Henry Cejudo. Como siempre, la categoría mosca sufre de una falta de atención. La gente quiere ver a estos combatientes enormes y musculosos que pegan con un peso noqueador. Pero la pareja enfrentada en Johnson y Cejudo trae un poco de frescura a la división. Johnson ha sido completamente dominante y busca su octava defensa de título pero contra un reto distinto, un peleador que sólo sabe ganar y sólo tiene la disciplina de un campeón. Cejudo, ya lo sabemos, es medallista de oro olímpico en lucha, invicto en MMA, y técnicamente pulido en todos los aspectos. Es verdaderamente impresionante ver los movimientos que ejecutan los peso mosca, y saben trabajar día-a-día con adversidades de tamaño en el gimnasio, por lo que la competencia los agranda.

Johnson habla con la confianza de siempre, citando la pelea ante Cejudo como una más, mientras lo vemos mejorar pelea tras pelea. Cejudo interactúa con la gente, ha acaparado atención, se declara ansioso por pelear contra el mejor Demetrious Johnson que se ha presentado porque "no quiere excusas". El choque entre Johnson y Cejudo es tanto técnico y estratégico como mental. Y aunque Jon Jones sigue acaparando la atención, estos dos peso mosca merecen todas las luces.

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La intensidad de las miradas que se cruzan Anthony Pettis y Edson Barboza tal vez indican lo que muchos dicen podría ser la mejor pelea de la noche. Pettis es el creativo y popular peleador que constantemente deja al púbico boquiabierto. Sabe lo que es estar en la cima con el cinturón en mano, y no deja de sorprender con explosivos movimientos y patadas de fantasía en el más alto nivel. Pero Barboza ha sido peleador desde los ocho años de edad, cuando tuvo su primera pelea de muay thai. "Es lo único que sé hacer", dice el brasileño, y no duda en intercambiar. Si alguien patea con más velocidad que Pettis sería Barboza, quien además de sus clásicas combinaciones de muay thai, saca patadas de giro de la nada. Lo más sorprendente sería si estos decidieran engancharse y llevarse al piso, aunque tal vez no sea sorprendente porque es común la estrategia ante golpeadores como éstos. Sea lo que sea, Pettis y Barboza se entregarán a la pelea, y sin duda al espectáculo.

Con esto quisiera empezar a hablar de Yair Rodríguez porque la verdad nos ha traído grandes emociones en el octágono a su corta edad, y su reto ante Andre Fili es uno verdaderamente complicado. Pero no hay que dejar de vista a Robert Whittaker y Rafael Natal, dos pesos medianos y veteranos de UFC que saben finalizar. Whittaker es un joven, prometedor y poderoso neozelandés con cuatro victorias al hilo, y su potencia en el golpeo es temido. Natal, sin embargo, lleva tiempo enfrentando todo tipo de peleador y aunque su trabajo principal es el piso con una cinta negra de jiu-jitsu brasileño bien adaptado al MMA, entiende bien la distancia y los ritmos en la pelea de pie que le permiten trabajar cómodamente en toda posición.

Yair tiene todo el futuro por hacerse. Con 23 años de edad, es uno de los prospectos más llamativos de la división peso pluma. Desde que ganó la primera temporada de The Ultimate Fighter Latinoamérica, se haido ganando los fanáticos y los analistas. Su trabajo de pie es obviamente lo más sobresaliente. Es difícil no entretenerse con el arsenal de pateo de Yair, pero hay que reconocer que ha sabido construir todo un juego de MMA con ello. Patadas dobles, de giro, con salto, Yair es un espectáculo, pero también es efectivo. Fili, por el otro lado, es un peleador realmente completo, con una buena base de lucha y un gran campamento que lo rodea en Team Alpha Male donde están Urijah Faber, Chad Mendes y Joseph Benavides, entre varios más. Fili tiene la potencia para finalizar las peleas con sus golpes y eso tendrá a Yair cauteloso, pero no hay duda que el mexicano saldrá a divertirse y ganar.

UFC 197 marca el regreso de Jon Jones, es cierto, pero también marca una cartelera principal con grandes actores que saben pelear sin perder el toque de espectacularidad. Claro que hay más con nombres como Sergio Pettis, las chicas Carla Esparza y Juliana Lima, dos de las más destacadas peso paja, y el pasado entrenador de TUF Latinoamérica II, Efraín Escudero, entra ante el agresivo Kevin Lee. Las Vegas, la capital de la pelea, se viste una vez más de MMA.