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El alcalde de Valladolid, experto en meter bien la pata, se vuelve a presentar

Javier León de la Riva tiene pendiente un juicio por Desobediencia un mes antes de las elecciones municipales y cuando habla da titulares muy incómodos.

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"Piensa que entras en un ascensor y hay una chica con ganas de buscarte las vueltas, se mete contigo, se arranca el sujetador o la falda y sale dando gritos diciendo que le has intentado agredir. Ojo con ese tema". Ésta es una de las perlas que han salido en los últimos veinte años de la boca de Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid desde 1995 y ginecólogo de profesión. "Los ginecólogos sabemos que el sexo fuerte es la mujer", soltó una vez cuando le acusaron de machista.

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Ahora ha habido cierto suspense, no se confirmaba que volvería a ser candidato porque el alcalde tiene algún asuntillo con la Justicia pendiente. El día 27 de abril va a ser juzgado por Desobediencia, porque no ha cumplido una sentencia que ilegalizaba el edificio en el que tiene su vivienda habitual, situado en la céntrica Plaza de Zorrilla. Al PP de Valladolid y a la cúpula nacional del partido no les ha parecido suficiente motivo para apartar a su hombre fuerte en la capital de Castilla y León de una carrera por la alcaldía en la que, pese a todo, parte con todas las papeletas para volver a hacerse con la victoria. Él mismo asegura que ve "clara" la victoria, así que poco más se puede aportar a este respecto.

León de la Riva tendrá que visitar el Juzgado de lo Penal número 2 de Valladolid el 27 de abril, justo un mes antes de las Elecciones Municipales, pese a que ha intentado adelantar o atrasar el juicio. En una tierra como la castellana, feudo 'pepero' de referencia, y en una provincia como Valladolid, una de sus canteras más notables, León de la Riva se ha hecho fuerte y de vez en cuando suelta un exabrupto en forma de declaración que le convierte en portada de los periódicos nacionales. Vamos a repasar algunas de sus mejores 'jugadas' verbales.

El año pasado, cuando advertía sobre chicas que se arrancan la falda y el sujetador en un ascensor, lo hacía a propósito de un caso de violación que tuvo lugar en la ciudad en la que es regidor. Dejando muy claro que él no justifica en ningún momento la agresión, también puntualizó: "A las seis de la mañana, una mujer joven tiene que cuidar por dónde va". Y también advirtió a sus conciudadanos que no se puede tener a un policía en cada parque. Un nuevo concepto de seguridad ciudadana. Bastante alternativo, sin duda.

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Una horas después de hablar así en Onda Cero, el Twitter del Ayuntamiento quiso puntualizar y enmendar un poco la salida de tono del jefe: "El alcalde quiere aclarar que se han malinterpretado sus palabras, sacándose de contexto, y pide disculpas a quien se haya sentido ofendido". Explicación no pedida, el caso es que León de la Riva copó las portadas de los principales medios nacionales.

Uno de sus grandes 'ataques' verbales tuvo como objetivo a Leire Pajín, cuando ésta era ministra de Sanidad. Sobre ella aportó una opinión personal: "Cada vez que veo esos morritos pienso lo mismo, pero no lo voy a contar". Y también tuvo palabras hacia otra ministra del gobierno Zapatero como Carme Chacón a la que calificó como "la señorita Pepis vestida de soldado". Y sobre la que fuera portavoz en el Congreso en la época de Rubalcaba, Soraya Rodríguez, a la que se enfrentó en las urnas en 2007, dijo: "Me han acusado de todo, menos de violar a la candidata". En fin.

Pero esto no es algo nuevo en la trayectoria del alcalde, poco tiempo después de tomar posesión de su cargo, en 1995, expresó cómo esperaba que fuera su ciudad para el futuro. "Quiero que Valladolid deje de ser la ciudad de las tres 'pes'. Voy a limpiar la ciudad de piojos, pulgas y putas". Limpia, fija y da esplendor.

De su estrategia para las campaña electorales, quedará para la historia su memorable "aunque dé el doble de votos, me cuesta ir dando besos a los niños con mocos". A la vista del resultado que lleva acumulando en las urnas desde 1995, su fórmula es bastante acertada y sus votantes pasan por alto sus salidas de tono. Así es.

El mundo de la farándula, los siempre temidos actores-protesta, que levantan urticaria entre las filas del PP, también recibieron los dardos afilados de León de la Riva. No podía ser de otro modo. Con Javier Bardem hizo un combo mezclando su filiación política y también una defensa (algo particular) de la Sanidad española, por la que tan poco están haciendo sus compañeros de partido en el Gobierno central.

"Es uno de esos artistas que se muestran muy solidarios con los saharauis, cosa que no hicieron en ocho años de Gobierno socialista, que es muy propalestino, pero que cuando tiene que parir la mujer alquila una planta entera en uno de los hospitales más caros y de mayor calidad de Estados Unidos, el Mount Sinaí, que además es judío". A Maribel Verdú le recriminó ir a la entrega de los Premios Goya vestida de Armani y luego apoyar a las víctimas de los desahucios. Hay para todos.

Aunque tenga pendiente un juicio por un extraño asunto inmobiliario y las elecciones a la vuelta de la esquina, seguro que León de la Riva nos sigue regalando grandes titulares humorísticos (y sonrojantes), estaremos muy atentos.