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Cultură

Dentro de la industria multimillonaria de los retratos de bodas chinas

En ciudades chinas como Shanghái, estos retratos previos a la boda con una gran variedad de poses, atuendos y locaciones, son una parte es esencial de la ceremonia de bodas.

Song y Lan posando al fondo de la biblioteca (Todas las fotos por el autor).

Son las 11AM y está lloviendo. Corro a refugiarme bajo un árbol en la iglesia que está en la intersección de la calle Kent y la calle Harry en lo que espero a que llegue Elsie, mi guía de ese día. Por mucho que parezca, no estoy en un pueblo inglés pintoresco y lluvioso. Estoy en Shanghái y Elsie es la co propietaria de una empresa local de retratos de bodas. Quedamos de vernos en Thames Town, un suburbio en Shanghái diseñado para parecerse a un pueblo británico, porque es la locación para la sesión de la pareja de hoy.

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La lluvia hizo que empezáramos la sesión en el interior. Por suerte, muy al estilo inglés, Thames Town está preparada para la lluvia. Bajo tierra, debajo de las casas falsas estilo Tudor, Thames Town tiene un estudio de fotografía construido a propósito. Las casas estudio con diferentes escenarios son utilizados por las parejas que toman sus fotografías antes de la boda. El estudio cuenta con 30 fondos diferentes para que las parejas escojan cuál quieren en su retrato de bodas.

En ciudades chinas como Shanghái, estos retratos previos a la boda con una gran variedad de poses, atuendos y locaciones, son una parte esencial de la ceremonia de bodas.

"Las fotos son obligatorias", dijo Sophie Zhang, una recepcionista de 29 años de edad originaria de Shanghái. "Todos las tienen", enfatizó Angel, una maestra de mandarín de 35 años de edad. Elsie explicó que se espera que todas las parejas exhiban sus retratos el día de su boda. "Los únicos que no lo hacen son los necios", añadió.

Tras una hora de peinado, maquillaje y selfies, la novia sale del vestidor con su primer atuendo del día, un vestido blanco de encaje y unos tenis Nike color rosa. No creo que esté tratando de imitar a Lily Allen; seguro solo quiere un poco de soporte para su tobillo para las próximas nueve horas. Song Song y Peng Lan, la novia y el novio, se toman su primer retrato en un fondo con cientos de lámparas colgando del techo. Mientras tanto, otra pareja escoge un fondo de la Torre Eiffel para su foto. Elsie explica que la ropa de la pareja es un ejemplo de la moda del año pasado, igual que las poses que hacen con el paraguas, lo cual, incluso para mi ojo no entrenado, se ve un poco pasado de moda.

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Desde la clásica casita de campo con árboles verdes y hasta la biblioteca del siglo 19 con una pintura gigante de Napoleón, cuando se trata de fondos, no falta imaginación. Creo que mi favorito es la fachada del "Café de Hello Kitty", una habitación rosa donde encontré a una novia posando para la cámara vestida con un tutú naranja y una blusa verde acostada en una cama rosa, una imagen que casi rompe mi retina por la sobredosis de color.

El cielo se despejó después de unas horas y salimos a tomar las fotos a la iglesia. Para muchos, las construcciones europeas no son más que fondos de moda. Sin embargo, estas fotos tienen un significado especial para Song Song porque la van a bautizar en unas semanas. Tanto Song como Elsie forman parte de la población Católica que crece cada vez más China. Elsie explicó que a veces los clientes piden a la empresa que decore los álbumes con oraciones de la Biblia "porque son hermosas".

Song y Lan afuera de la iglesia.

Sin embargo, las fotos en sí no tienen nada que ver con la religión ni son una tradición cultural antigua. El origen de la práctica es meramente comercial.

"Este tipo de negocios vienen de los empresarios de Taiwán", dijo Cheng Li, dueño de un estudio en Wuhan. También me explicó que la práctica se originó en Taiwán, donde los fabricantes de vestidos de boda ofrecían sesiones de foto para vender más vestidos. Después, en la década de los 80, "llevaron el negocio a China continental porque es más grande y hay muchas parejas", dijo Li.

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Esto fue después de que terminó la Revolución Cultural, el movimiento maoísta que paralizó al país. "Como muchas personas creyeron que nunca iban a poder salir del país", dijo Li. "Por eso empezaron a tomarse fotos frente a contracciones de aspecto extranjero antes de sus bodas y luego se volvió una moda".

Hoy en día, la industria mueve mucho dinero. En enero de 2015, CCTV América informó que la industria de los retratos de boda en China vale aproximadamente 2 mil millones de dólares cada año. La mayoría de la gente gasta mínimo el equivalente 25 mil pesos en su sesión de fotos en el estudio de Elsie. Por otro lado, los que quieren tirar la casa por la ventana acostumbran viajar al Thames Town real, o a París, Nueva York o Roma. Claro, para esto debes se capaz de pagar los 20 mil pesos diarios por cada miembro del staff, además de los vuelos, la estancia y la comida de todos.

Me pregunto qué hace que esta práctica sea tan popular. Aunque Sophie y su novio todavía no han fijado la fecha para la boda, ya viajaron a Hangzhou para su sesión de fotos. "Me tomé estás fotos porque quiero que mis nietos vean que en algún tiempo fui hermosa", explicó Sophie.

¿Y de quién es la idea de tomarse fotos? "De las mujeres, siempre es de las mujeres", dijo Elsie.

Sin embargo, esta costumbre no es obligatoria para todas las parejas en toda China. Como explicó Elsie: "La gente que vive en ciudades, ya sean grandes o pequeñas, casi siempre se toma este tipo de fotos. Pero no estoy segura si los que viven lejos, en las regiones rurales pobres, también lo hacen. Yo nací en la al noreste de China y las fotografías son horribles ahí. Los vestidos, el maquillaje, el peinado, todo es feo y está muy pasado de moda".

Nueve horas después, al terminar la sesión, le pregunto a la pareja si este fue un día especial. "Sí", responde el novio, "porque mis finanzas bajaron hoy".

El matrimonio y el dinero están unidos, dijo Elsie. Es una realidad en la mayoría de los países. Es obvio que no puede haber una boda sin un gasto considerable. Pero en China, los que pueden pagar estas sesiones de foto tan caras, no escatiman para nada.