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El fentanilo es tan peligroso que algunos policías llevan antídotos consigo por si lo tocan

Según la policía canadiense tocar o inhalar el fentanilo puede resultar fatal, una conclusión extrema que ha provocado que sus agentes empiecen a patrullar las calles del país provistas de un botiquín cargado con antídoto, no sea caso que se intoxiquen.
Des fausses pilules d'Oxycodone qui sont en réalité du fentanyl. (Tommy Farmer/Tennessee Bureau of Investigation via AP)

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Muchos agentes de policía y miembros de los servicios de emergencia del Canadá y Estados Unidos ya trabajan provistos de un antídoto para el opiáceo más devastador del siglo en el continente norteamericano. Se trata del fentanilo, un opiáceo sintético 50 veces más poderoso que la heroína, que se vende bajo prescripción médica en las farmacias estadounidenses. Ahora los policías canadienses han decidido llevar consigo naloxona, el antídoto contra la sobredosis de fentanilo, para tratarse en caso de entrar en contacto con la sustancia.

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Tocar o inhalar una pequeña cantidad de fentanilo puede resultar fatal, de manera que muchos agentes de la policía federal canadiense salen de servicio provistos de un nebulizador nasal de naloxona. Igualmente, se espera que las fuerzas de seguridad empiecen a distribuir botiquines del antídoto entre sus agentes para que estos puedan socorrer a futuras víctimas de sobredosis.

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Bob Paulson, comisionado de la Real Policía Montada del Canadá (RCMP en sus siglas inglesas) contó el martes a la prensa que no se pueden subestimar los peligros que entraña el consumo de fentanilo. La fuerza también ha publicado un vídeo que muestra a dos agentes hablando sobre cómo se intoxicaron después de contactar accidentalmente con el demoledor analgésico.

"Se está extendiendo por todo el país y está dejando un rastro de miseria y de muerte", ha escrito Paulson a través de un comunicado de prensa. "Los servicios de emergencia y de primeros auxilios tienen que saber que incluso estar cerca de la sustancia puede resultar extremadamente nocivo, e incluso tener consecuencias fatales"

'Los servicios de emergencia y de primeros auxilios tiene que saber que incluso estar cerca de la sustancia puede resultar extremadamente nocivo, e incluso tener consecuencias fatales'

Son ya muchos los agentes de policía estadounidenses y canadienses que trabajan provistos de naloxona — comercializada por el laboratorio estadounidense Narcan — en caso de que se encuentren con alguien que lleva consigo fentanilo, o de que sospechen de que alguien lo pueda haber ingerido.

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La semana pasada, la policía de Vancouver, que solo este año espera enfrentarse a 800 casos de sobredosis, anunció su intención de distribuir el antídoto entre sus fuerzas del orden. El inspector jefe de la policía de la ciudad comunicó a la prensa que sus agentes se ven expuestos con frecuencia a la sustancia.

El pasado mes de agosto la policía montada del Canadá cedió una concesión valorada en casi 1,5 millones de euros a la farmacéutica Adapt Pharma Canadá, el laboratorio que produce Narcan. Sin embargo, apenas han trascendido ni los motivos ni la naturaleza de la concesión, más allá de que la inversión será empleada en "producir medicamentos y otras sustancias biológicas".

A principios de este año, el detective de New Jersey Dan Kallen, informó a Associated Press de un incidente en que él y algunos de sus hombres se habrían intoxicado después de abrir una caja en la que había restos de fentanilo. Sucedió durante el registro policial de una residencia y Kallen sospecha que la culpa es del fentanilo.

Sobre cómo el Walter White del fentanilo apareció y desapareció de la dark web. Leer más aquí.

"Nos golpeó como si nos hubiese caído encima una tonelada de ladrillos", ha comentado. "De pronto apenas podíamos respirar. Se nos disparó el ritmo cardíaco. Teníamos náuseas, casi nos retiramos… Yo me sentí, como no sé, 'Dios santo, la voy a palmar ahora mismo'".

Este verano,23 departamentos de policía de policía distintos de Delaware han empezado a llevar consigo naloxona para protegerse y para salvar a otros de posibles muertes por sobredosis. Los botiquines han sido financiados con el dinero incautado durante distintas redadas policiales.

Según ha informado el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos se ha producido un vertiginoso aumento aumento de las incautaciones de fentanilo desde 2013, especialmente en Ohio, New Hampshire y en Massachusetts.

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