Pacificadores de la ONU acusados otra vez de violación en la República Centroafricana

Menos de una semana después de que el responsable de la misión de Naciones Unidas (ONU) en la República Centroafricana fuese despedido entre acusaciones de violaciones por parte de sus pacificadores, la ONU ha anunciado tres nuevas denuncias de violación de tres jóvenes, una de las cuales es menor de edad.

La portavoz de la misión, Vannina Maestracci, declaró el miércoles ante la prensa que la Misión Multidimensional de Estabilización Integrada en la República Centroafricana (MINUSCA), había sido puesta al corriente de las denuncias. Los hechos sucedieron, presuntamente, en el pueblo del centro del país de Bambari el pasado 12 de agosto — un día después de que Amnistía Internacional denunciara que una niña de 12 años había sido violada y dos civiles habían sido asesinados por miembros de las fuerzas pacificadoras a principios de mes.

El 12 de agosto, Ban Ki Moon, secretario general de la ONU, anunció que el responsable de la misión MINUSC, Babacar Gaye, había sido obligado a dimitir. El secretario ya advirtió entonces que "debería de haber más responsables entre nuestros líderes".

"Ya basta", declaró Ban a los reporteros.

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Maestracci expresó que no podía especificar en qué día sucedieron los últimos episodios denunciados. El delito habría sido perpetrado por tres pacificadores y Maestracci solo dijo que habían sucedido en las "semanas" anteriores al 12 de agosto. A pesar de que las autoridades de la ONU han proclamado que no pueden desvelar la nacionalidad de los pacificadores, lo cierto es que las únicas tropas desplegadas en Bambari son oriundas de la República Democrática del Congo. Fuentes diplomáticas confirmaron más tarde a VICE News que las tropas acusadas de violación proceden del susodicho país.

"Se ha informado al país del que provienen las tropas de que dispone de diez días para investigar las denuncias", informó Maestracci. "En caso de que el país miembro decline la investigación o no responda a la solicitud, Naciones Unidas emprenderá su propia investigación de manera inmediata".

Una fuente diplomática en Naciones Unidas relató a VICE News que preocupa que las autoridades congoleñas no conduzcan una investigación suficiente en el plazo que les ha sido concedido.

Maestracci señaló que ignoraba el paradero de la tropa acusada.

En septiembre del año pasado la misión asumió oficialmente sus obligaciones pacificadoras y absorbió a los contingentes africanos que ya se encontraban en el país, para convertirla en una misión de la Unión Africana (UA). Los últimos incidentes elevan a 13 el número de denuncias por conducta sexual inapropiada dirigidas contra la misión, desde que esta fuera oficialmente formada en abril de 2014. En total, las denuncias por conducta inapropiada interpuestas contra la misión ya son 61. Por conducta inadecuada se entiende cualquier tipo de abuso de fuerza y de robo. Los detalles de algunas de las denuncias, como el número de víctimas que han concurrido en cada caso, todavía no han sido comunicadas oficialmente ni por la misión ni desde la sede de la ONU.

Maestracci confirmó que cuatro pacificadores y dos miembros del destacamento policial de la misión han sido repatriados a petición del secretario de la organización.

"Otros 20 miembros del contingente militar fueron repatriados por razones administrativas, después de haber empleado una fuerza excesiva en una operación que terminó con la muerte de civiles. Estamos a la espera de que se complete la investigación", añadió.

La denuncias por abuso sexual contra los pacificadores internacionales son anteriores al periodo en que la misión MINUSCA fue diseñada y desplegada.

A partir de 2013, según los investigadores de derechos humanos de la ONU, pacificadores franceses y centroafricanos, abusaron sexualmente de niños de Bangui, la capital de la República Centroafricana, durante un periodo de varios meses. La tramitación de las denuncias sigue siendo un asunto polémico y ha motivado que Ban haya creado un comité de investigación destinado a evaluar las denuncias y la reacción de las autoridades en derechos humanos de la ONU en incidentes similares.

A pesar de los casos revelados de conducta inadecuada entre los miembros de la MINUSCA — en ningún caso aislados, puesto que la misión ha despertado una plaga de denuncias — los incidentes continuaron.

La semana pasada Aminstía Internacional publicó un informe en el que se detallaba el perturbador caso de violación perpetrado sobre una niña de 12 años. El delito se produjo durante el despliegue de una campaña de seguridad en Bangui, a primera hora del día 2 de agosto. Durante la operación, que se llevó a cabo en un enclave fundamentalmente musulmán, un grupo de atacantes armados dispararon contra los pacificadores y mataron a un "casco azul". Al día siguiente, los pacificadores regresaron y abrieron fuego, aparentemente de manera azarosa, contra los residentes, provocando la muerte de un padre y de su hijo.

En la dimisión por escrito presentada ante el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, Gaye escribió que pese a los esfuerzos por atajar los delitos, "los abusos continuaron".

"En adelante, quiza debe contemplar el asunto como un problema sistémico", escribió Gaye.

Diane Corner, vicepresidenta de la misión, explicó que las denuncias habían sido trasladadas a la sede central de la ONU, en Nueva York. Una vez allí, se puso al corriente al departamento Servicios de Supervisión Interna y del país en que operaba la tropa denunciada; esto es, la República Centroafricana.

Maestracci expresó en Nueva York que Ban ignoraba la existencia de nuevas denuncias cuando anunció la dimisión de Gaye — que él mismo había exigido — el día 12 de agosto.