Trump dice que el ataque con armas químicas en Siria 'rebasó los límites'... ¿pero actuará?

Hace apenas unos días, los más altos mandos del gobierno estadounidense aseguraron que quitar del poder al presidente sirio Bashar al-Assad, no era prioridad. Pero justo después del ataque con armas químicas, que mató a más de 80 personas incluidos 30 niños, parece que han cambiado de idea.

El presidente Donald Trump se refirió al ataque químico como un hecho que va "más allá del límite", y su opinión sobre el presidente de Siria también cambió. La embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Nikki Haley también advirtió que Washington podría llevar a cabo acciones unilaterales al respecto.

Sin embargo, la Casa Blanca no dio más detalles sobre cómo el presidente Trump planea responder a los crecientes crímenes cometidos por Assad, quien ha sido ampliamente juzgado por el ataque con armas químicas del martes pasado en la zona de Idlib, aún bajo el control de los rebeldes.

Tanto Estados Unidos, como Turquía y Reino Unido, han culpado a las fuerzas del gobierno sirio por el incidente, pero Bashar al-Assad, junto con Rusia, han dicho que todo fue resultado de un ataque aéreo del gobierno a instalaciones donde los rebeldes guardaban armas químicas, insistiendo en que la agresión estaba dirigida a un depósito que pertenecía al Frente Al Nusra, un poderoso afiliado de Al-Qaeda.

Las declaraciones hechas por Estados Unidos este miércoles sobre los actos realizados por al-Assad son un cambio significativo en la postura del país norteamericano en menos de una semana, cuando Washington no tenía intenciones de abandonar al presidente sirio.

A través de una conferencia de prensa en la Casa Blanca, Trump dijo que el ataque había sobrepasado "varias, varias líneas más allá del límite" desde su perspectiva, por lo que no podía ser tolerado. "Les diré algo: lo que sucedió ayer me parece inaceptable", declaró Trump. "También les diré que mi actitud hacia Siria y hacia Assad han cambiado mucho… Ya estamos hablando de un nivel completamente distinto".

El presidente norteamericano reconoció que ahora tiene la "responsabilidad" de responder ante el ataque, al cual se refirió como "una afrenta a la humanidad", pero fue vago cuando le preguntaron si cambiaría las políticas de Estados Unidos respecto a Siria después de esta atrocidad. "Ya verán", dijo Trump.

Durante una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas llevada a cabo en las primeras horas del miércoles, la embajadora Nikki Haley mostró fotografías de los niños muertos en el ataque, el cual se cree fue realizado con gas sarín, mientras advertía que Estados Unidos podría responder de forma unilateral a los abusos cometidos por el presidente sirio en caso de que la comunidad internacional no lograra hacerle frente.

"Cuando Naciones Unidas falla en su tarea de actuar de forma colectiva, a veces otro Estado está obligado a realizar sus propias acciones", dijo Haley.

Rusia ha utilizado en varias ocasiones su poder de veto en el Consejo de Seguridad para bloquear las acciones de la ONU en contra de al-Assad, y este miércoles no fue la excepción: decidió bloquear un proyecto de resolución que condena el ataque. Y aunque Trump se contuvo en criticar a Moscú por su decisión, la embajadora Nikki Haley criticó a Rusia por desviar la atención sobre los abusos de Assad.

"Una y otra vez, Rusia usa la misma narrativa para desviar la atención que recae sobre sus aliados en Damasco", dijo. "¿Cuántos niños más tienen que morir para que a Rusia le importe?".

Rex Tillerson, secretario de Estado norteamericano, pidió a Rusia que "piense cuidadosamente" sobre el apoyo que le brinda al presidente sirio, mientras que el vice presidente Mike Pence dijo al canal Fox News que "todas las opciones están sobre la mesa".

Sin embargo, Rusia dejó muy clara su postura este jueves.

"La postura de Rusia ante al-Assad es clara. Él es el presidente oficial de un Estado independiente. ¿Cuál es la postura de Estados Unidos?", declaró a la cadena CNN Maria Zakharova, vocera del Ministerio de Asuntos Exteriores de la Federación Rusa. Por su parte, el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que la información que tiene Estados Unidos sobre el ataque no es objetiva, además de que culpar a Siria es prematuro.

El reciente ataque químico pone al presiente Donald Trump ante el mismo dilema que enfrentó Obama por un ataque similar contra los rebeldes en 2013, uno de los episodios más recordados en los seis años del conflicto.

Sin embargo, cualquier acción directa en contra de Bashar al-Assad aumentaría los roces con Moscú y arrastraría a Estados Unidos hacia una guerra en la que lo más importante es destruir al Estado Islámico. Aunque al no hacer algo después del ataque ilegal con químicos podría tomarse como una señal de que al-Assad puede seguir cometiendo crímenes sin ninguna consecuencia.

De acuerdo con el grupo Syrian Observatory for Human Rights, 86 personas fallecieron durante el ataque del martes, mientras que la Organización Mundial de la Salud y Médicos Sin Fronteras han dicho que algunos síntomas de las víctimas corresponden a la exposición de agentes nerviosos. Dos tercios de las víctimas fueron trasladadas a Turquía, y los resultados de las autopsias serán enviados a la La Haya para exámenes más profundos, informó el gobierno turco este jueves.

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